La guerra en Ucrania tras la invasión rusa lleva más de 200 días. Semanas y meses en los que la muerte y la destrucción no ha cesado en ningún solo momento. A pesar de esta situación de caos y tristeza, la esperanza y los resquicios de felicidad surgen de vez en cuando entre las víctimas de esta masacre.
Un ejemplo es el que ha llegado desde las calles de Kiev. Música en las calles intentando recuperar la normalidad en una ciudad castigada por las bombas. De noche, y en medio de un apagón, un saxofonista interpreta el popular tema 'A mi manera' para infundir ánimo a los viandantes de la capital.
A pesar de este momento donde se intenta recobrar la normalidad, Rusia ha recrudecido sus ataques contra instalaciones civiles en las últimas horas. Ayer, un bebé fallecía en el bombardeo de una maternidad en Zaporiyia. El 50% de la red eléctrica está afectada. Los apagones son generalizados. También en instalaciones tan sensibles como los hospitales
Diez millones de hogares continúan sin luz. No obstante, la vida en Ucrania continúa y, a pesar del miedo, frente al caos surgen más imágenes de esperanza como la de una operación en una hospital ucraniano. Unos cirujanos intervienen de urgencia a un niño. Lo operan a corazón abierto mientras un apagón generalizado sacude al hospital en medio de la intervención.
Los sanitarios continúan como pueden: mientras unos alumbran con sus móviles, otros intervienen. Finalmente, logran salvarle la vida al pequeño en una nueva semana de terror para los ucranianos.
Solo en las últimas horas, Kiev ha recibido un aluvión de hasta 70 misiles. El balance, decenas de fallecidos: hasta 37 según declaraciones de Zelenski, entre ellos una adolescente de 16 años y un recién nacido tras el ataque a una Unidad de Maternidad.
Con todo, la población trata de mantener la moral alta. En medio del apagón, decenas de móviles brillan como si fuesen uno solo anunciando que ni Ucrania, ni sus ciudadanos se van a rendir en este conflicto provocado tras la invasión del ejército ruso.