Es común en muchas familias, incluso en las mejor avenidas, que sus miembros solo se vean en bodas, bautizos y, sobre todo, funerales. El de Isabel II juntó a los reyes Felipe y Letizia con los Eméritos; y ahora, el de Constantino los reunirá previsiblemente de nuevo.
Esta vez será con la familia ampliada, ya que las infantas Elena y Cristina también irán a despedir a su tío materno.
El funeral tendrá lugar en la Catedral Metropolitana de la capital griega, uno de los dos escenarios de la doble boda (católica y ortodoxa) entre don Juan Carlos y doña Sofía en 1962, y, como en aquella ceremonia, este lunes habrá representantes de varias casas reales europeas, sobre todo de la danesa, ya que la viuda Ana María es hermana de la reina Margarita; y de la británica, con la que también hay lazos de familia.
Posteriormente, Constantino será sepultado en el cementerio del palacio de Tatoi, donde están enterrados los padres de doña Sofía.
Ambos actos tendrán carácter privado, sin ceremonias de estado ni capilla ardiente, ya que años después de que la monarquía fuera abolida en Grecia, el gobierno socialista de Papandreu retiró la nacionalidad griega al antiguo monarca y a su familia.