Decretan el arresto domiciliario para Jair Bolsonaro, acusado de planear un golpe de Estado, tras el incumplimiento de las medidas cautelares impuestas
Así lo ha anunciado el juez del Tribunal Supremo de Brasil, Alexandre de Moraes, encargado de la causa que pesa sobre él expresidente brasileño
El Supremo niega la prisión provisional a Bolsonaro a pesar de una "irregularidad" en sus medidas cautelares
El Tribunal Supremo de Brasil ha decretado el arresto domiciliario para el expresidente brasileño Jair Bolsonaro por incumplir algunas de las medidas cautelares impuestas por su supuesta responsabilidad en la financiación de una trama para entorpecer desde Estados Unidos la causa en su contra, acusado de planear un intento de golpe de Estado contra el actual presidente, Lula da Silva, algo por lo que piden para él hasta 40 años de cárcel.
Así lo ha anunciado el juez del Supremo Alexandre de Moraes, encargado del caso, en declaraciones recogidas por el portal de noticias brasileño UOL: "Ante el reiterado incumplimiento de las medidas cautelares previamente impuestas, ordeno el arresto domiciliario de Jair Messias Bolsonaro", señalaba.
Además, el magistrado también ha ordenado una operación de registro e incautación del domicilio de Bolsonaro en Brasilia.
Jair Bolsonaro, en arresto domiciliario por incumplir las medidas cautelares
El exmandatario brasileño tiene prohibido recibir visitas, –excepto de sus abogados–, y usar teléfonos móviles, incluidos de terceros. Además, está usando una tobillera electrónica.
La decisión del magistrado Alexandre de Moraes de decretar arresto domiciliario ha tenido lugar tras el incumplimiento del expresidente de usar las cuentas de redes sociales de otras personas, después de que en la víspera utilizara las de su primogénito, Flávio, durante las manifestaciones en su apoyo que tuvieron lugar en el país sudamericano para supuestamente presionar y coaccionar al Supremo.
La defensa del expresidente de Brasil, “sorprendida”
Tras conocer la decisión del juez, la defensa de Jair Bolsonaro no ha tardado en manifestarse “sorprendida por la imposición del arresto domiciliario”, recalcando que "Bolsonaro no ha incumplido ninguna medida".
"La frase 'Buenas tardes, Copacabana. Buenas tardes, mi Brasil. Un abrazo a todos. Es por nuestra libertad. Estamos juntos' (con la que el exmandatario se dirigió a los manifestantes) no puede entenderse como un incumplimiento de la medida cautelar, ni como un acto delictivo", han apuntado sus abogados, anunciando que apelarán la decisión del magistrado.
La Administración Trump, contra el juez del caso Jair Bolsonaro y su orden de arresto domiciliario
En paralelo, y entrando en el caso desde EEUU, la Administración Trump, a través de su Departamento de Estado, ha denunciado que "el juez Moraes, ahora sancionado por Estados Unidos por violaciones de los Derechos Humanos, sigue utilizando las instituciones brasileñas para silenciar a la oposición y amenazar la democracia".
"Estados Unidos condena la orden de Moraes de imponer arresto domiciliario a Bolsonaro y exigirá responsabilidades a todos aquellos que ayuden e inciten a cometer actos sancionados", reza la publicación de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental, adscrita a la cartera diplomática estadounidense, en la red social X.
De igual modo, critican que "imponer aún más restricciones a la capacidad de Jair Bolsonaro para defenderse en público no es un servicio público".
“Dejen hablar a Bolsonaro”, han pedido desde Washington, cargando contra Alexandre de Moraes.
La investigación sobre Jair Bolsonaro, acusado de planear un golpe de Estado contra Lula
Acusado de planear un golpe de Estado contra el actual presidente de Brasil, Lula da Silva, la Policía brasileña registró a mediados de julio su casa en Brasilia por su supuesta responsabilidad en la financiación de una trama en Estados Unidos para defender la aplicación de aranceles y sanciones contra autoridades del país, incluidos los jueces del Tribunal Supremo, a quienes Washington ha revocado sus visados.
En ese sentido, los investigadores sostienen que Bolsonaro ha utilizado hasta dos millones de reales (300.000 euros) para hacer campaña a través de su hijo, Eduardo, en Estados Unidos, desde marzo, y en favor de estas sanciones. Todo en un momento en el que el presidente Donald Trump no ha dudado en mostrar y evidenciar un inusitado interés por su situación judicial.
Jair Bolsonaro podría enfrentarse a penas de hasta 40 años de prisión
El expresidente brasileño siempre fue un lobo solitario. Pasó por siete partidos diferentes y en todos defendía casi exclusivamente los intereses de los suyos. Desde un exagerado a un veterano militar tomado a broma en plena democracia, Bolsonaro es también un nostálgico de la dictadura que llegó al poder en 2018. Entonces, privatizó empresas del Estado, relajó la fiscalización en la Amazonia y arrasó el pulmón del mundo bajo la retorica del desarrollo a cualquier precio.
Muy criticado por la gestión de la pandemia, fue reticente a terminar su mandato e intento orquestar un golpe de Estado para mantenerse en el poder, de lo que se le acusa.
Por ahora, el Tribunal Supremo de Brasil ordena su arresto domiciliario tras saltarse las medidas cautelares aplicadas en el marco de un juicio en el que también se le acusa de haber financiado esa campaña desde EEUU para entorpecer el proceso.
Ahora, y tras la solicitud de la Fiscalía en sus alegaciones finales del juicio por golpe de Estado para que sea declarado culpable, podría enfrentarse a penas de prisión de hasta 40 años. Además, también enfrenta la inhabilitación de manera indefinida para ostentar cargos públicos.
En total, Bolsonaro y otras siete personas forman parte del llamado núcleo central de la trama golpista con la que pretendía mantenerse en el poder tras las elecciones de octubre de 2022. Están acusados de asociación criminal, intento de abolir de manera violenta el Estado de derecho, golpe de Estado y daños al patrimonio durante las protestas en las que se intentó tomar las instituciones el 8 de enero de 2023.