Agentes de la Guardia Civil de Palencia han sorprendido a cuatro cazadores furtivos en un coto privado, ubicado entre los pueblos de Villanueva de la Peña y Traspeña, quienes llevaban en un vehículo un cadáver de cierva, seis patas y dos cornamentas y en un segundo coche llevaban las armas de fuego.

Según han informado fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Palencia, los cazadores fueron sorprendido durante un servicio de prevención del furtivismo. Tras identificar a las cuatro personas, los agentes de la Guardia Civil registraron los vehículos que empleaban y en uno de ellos se transportaban las armas de fuego y en el otro las piezas de caza mayor.

Tras revisar la documentación, se comprobó que las cuatro personas carecían de la autorización expedida por el titular del coto para cazar en dicho espacio además de que uno de ellos no poseía licencia de caza.

No tenían autorización para cazar en dicho espacio

En ese mismo momento, se interceptaron las armas, que fueron depositadas en dependencias oficiales de la Guardia Civil, y las piezas de caza fueron entregadas a agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León.

Por estos acontecimientos, se ha investigado a uno de los cazadores como presunto autor de un delito contra la flora y la fauna, por cazar sin autorización, además de que se han formulado diferentes denuncias administrativas en materia de armas y caza. Las diligencias instruidas quedan depositadas en el Juzgado 2 de Cervera de Pisuerga.

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