El niño que vio como su padre mataba a su madre y a su hermano de 10 años en una cueva de Tenerife, no sabe que su madre está muerta. El pequeño se encuentra bajo la tutela de la Dirección General de Protección a la Infancia y la Familia del Gobierno de Canarias, a la espera de que sus abuelos lleguen a España. Él solo quiere reunirse con ellos.
Ayer vimos en exclusiva la cueva donde Thomas Hendrick, alemán de 43 años mató a su mujer y su hijo mayor, Silvia y Jacob. El pequeño le lanzó una piedra y logró huir. Fue tan inteligente que no escapó por el camino porque el su padre le había llevado hasta aquel lugar apartado, engañándolos con que tenía allí regalos para ellos.
Así, el niño estuvo cinco horas solo deambulando por una zona de difícil acceso y barrancos, hasta que una vecina lo encontró desorientado y en estado de shock. Él fue quien dio la voz de alarma.
Su padre fue detenido inmediatamente en su casa de Adeje. Cuando llegó la policía estaba dormido y con señales de haber participado en una pelea. Dijo que no sabía dónde estaba su familia, que habían salido a pasear. Ni siquiera preguntó por su hijo menor.
Ayer el detenido participó en el registro de su casa. A su llegada, los vecinos de Adeje le esperaban a las puertas. Le increparon y mostraron su indignación. Hoy está previsto que Hendrick pase a disposición judicial.