Las lluvias que han llegado a España por la llamada gota fría, la unión de dos borrascas que evoluciona desde el Mediterráneo y otra desde el Atlántico y está dejando precipitaciones fuertes, persistentes y con tormentas, con acumulaciones que podrán superar 300 litros por metro cuadrado, hace recordar los peores momentos del pasado 9 de octubre en Mallorca, donde perdieron la vida 13 personas.
El agua está dejando imágenes de carreteras cortadas, vuelos cancelados e incluso en algunas zonas vecinos desalojados, aunque la Agencia Estatal de Meteorología asegura que lo peor está aún por venir.
Los servicios de emergencias han informado que toda la costa mediterránea y Baleares se encuentran en alerta, pero son Castellón y Teruel las provincias con alerta roja.
Ante la situación de lluvias intensas, Protección Civil y Emergencias recomiendan a los conductores que disminuyan la velocidad, extremen las precauciones y no se detengan en zonas por donde pueda discurrir gran cantidad de agua.