La policía de Málaga investiga la paliza que una mujer le dio a un albañil que habría abusado de su sobrina. Cuando los agentes llegaron a la vivienda, tras el aviso de un vecino, ella limpiaba la sangre y se limitaba a repetir que “nadie abusa de ella”.
Un vecino malagueño llamó al 091 al encontrase a un hombre ensangrentado en el portal. Cuando llegó la patrulla policial, el herido les contó que unos ladrones le habían dado una paliza. Sin embargo, un reguero de sangre llevó a los agentes hasta un piso del edificio.
En el interior estaba una mujer limpiando la sangre mientras repetía “nadie abusa de ella”, sin parar, según informa el diario Sur.
La versión de la mujer es que tendió una trampa al hombre porque su sobrina de 13 años le había confesado que le había hecho tocamientos sin su consentimiento. Es más, habría llegado a proponerle relaciones sexuales y le habría pedido fotos de tipo sexual, algo a lo que la menor se habría negado.
La mujer llamó al hombre, albañil de profesión, para que le hiciera una reforma en casa. Según ha relatado ella misma a la policía, cuando se dio la vuelta le golpeó con la pata de una silla. Le dio una paliza pero el hombre pudo salir corriendo.
La policía de Málaga está investigando, como testigo, a otra mujer que estaba en la casa cuando ellos llegaron. Según su testimonio acudió a la llamada de la agresora.
La mujer está en libertad con cargos por un delito de lesiones. El hombre, supuesto agresor de su sobrina, también está en libertad mientras está siendo investigado. Tiene numerosos antecedentes por delitos sexuales.