La muerte de un matrimonio mayor cuyos cadáveres fueron hallados con signos de violencia en el interior de su casa en Villafranca de los Caballeros, en Toledo, no se debió a un nuevo caso de violencia de género, como se había sospechado. Al parecer el hombre decidió quitarse la vida después de ver a su mujer morir de un infarto.

Los cuerpos de Ildefonso y María del Pilar, un matrimonio perfecto según los vecinos del pueblo, han recibido sepultura. Ella se recuperaba de una operación en una residencia y decidieron salir a dar un paseo, pero antes pasaron por casa y allí María sufrió un infarto. Él intentó reanimarla pero ella falleció. Desesperado y con el amor de su vida, sin vida en brazos, decidió marcharse con ella. Eligió la más dura y lenta de las muertes, se clavó un cuchillo en el abdomen.

La escena descolocó a los investigadores que barajaron la hipótesis de un nuevo crimen machista. Asombrados, como todos, se quedaron cuando descubrieron el peor de los finales en una historia de amor perfecta.