El piso en el que dos personas han fallecido este viernes en Cassà de la Selva (Girona) como consecuencia de un incendio estaba okupado, según confirma el ayuntamiento y la Plataforma Activistas Vivienda.
El alcalde, Robert Mundet, se ha personado en el lugar del siniestro, ha lamentado la desgracia y ha recordado que en esa zona del municipio hay "un problema" con las okupaciones y que, hace dos semanas, el ayuntamiento y la Policía Local ya llevaron a cabo diferentes actuaciones.
De los cuatro heridos por inhalación de humo que también se han producido, todos han recibido ya el alta según confirma el consistorio.
Los bomberos analizan ahora si se han producido daños estructurales en el edificio, después de un fuego que se ha iniciado sobre las 8:40 horas en los bajos de un bloque de cinco plantas por motivos que se investigan.
Sin embargo, fuentes municipales subrayan que se cortó la luz recientemente al piso y que todo apunta a que se había obtenido de nuevo una conexión fraudulentamente, lo que podría convertirse en causa del incendio a la espera del análisis de los técnicos, según ha apuntado también el conseller Miquel Sàmper.
Una vez extinguido el fuego y ventilada la finca, los vecinos que habían salido por su propio pie han podido regresar a sus respectivos domicilios.
La investigación se centra ahora en identificar a los dos fallecidos, una labor dificultada por el estado en que han quedado los cuerpos, ya que están carbonizados.