El disco de Rosalía, canción por canción: de su rumba con Estrella Morente a la apuesta por la espiritualidad y el feminismo
Rosalía ha publicado 'LUX', un álbum esperado su fans y en el que se ha rodeado de artistas como Estrella Morente, Bjork o Carminho
El encuentro de Rosalía con sus fans en el Museo Nacional de Arte de Cataluña
Por fin llegó el viernes 7 de noviembre, fecha marcada en el calendario de la industria musical y día en el que Rosalía ha sacado su nuevo y cuarto álbum de estudio. Tras semanas de promoción y días anunciando su llegada, Rosalía ha dejado que 'LUX', disco en el que lleva trabajando más de tres años, deslumbre a todos los que lo escuchen.
En este nuevo trabajo, la artista catalana canta en 14 idiomas y muestra una faceta mucho más espiritual, íntima y personal acompañada de composiciones y sonidos orquestales con los que ha dejado completamente noqueados a sus seguidores y a la crítica musical. Alabando y aplaudiendo la valentía de Rosalía por apostar por este cambio de imagen y de sonido, los expertos musicales de medios como 'Rolling Stone' o 'Billboard' califican con la máxima de las puntuaciones a 'LUX'. Es decir, con este nuevo disco Rosalía ha vuelto a dejar claro que en la actualidad hay pocas, por no decir ninguna, figura musical que llegue a su altura.
'LUX', el cuarto álbum de estudio de Rosalía
Tras tres años de espera, Rosalía ha regalado a sus seguidores esta obra que está dividida en cuatro movimientos: el primero lo componen 'Sexo, Violencia y Llantas', 'Reliquia', 'Divinize --con parte de la letra en catalán--, Porcelana' y 'Mio Cristo'. La segunda parte la completan 'Berghain', 'La Perla', 'Mundo Nuevo' y 'De Madrugá', una canción que ya adelantó durante los conciertos de su gira por 'El mal querer', su segundo disco.
El tercer movimiento del álbum se compone de 'Dios Es Un Stalker', 'La Yugular', 'Focu 'ranni', 'Sauvignon Blanc' y 'Jeanne', y la cuarta y última parte la cierran 'Novia Robot', 'La Rumba Del Perdón', 'Memória' y 'Magnolias'.
Con este álbum, la cantante se aleja completamente de la artista que quiso reflejar y proyectar con 'MOTOMAMI', un trabajo cargado de sonidos sintéticos, electrónicos y producidos con los que apostaba por la vanguardia musical. Ahora, Rosalía ha ofrecido una faceta mucho más íntima y sinfónica con la que destaca por sus melodías y sus notas limpias y delicadas. 'LUX' presenta a una artista mucho más cuidada, personal, profunda y profundamente frágil.
Compuesto por 18 canciones en sus versiones físicas y por 15 temas, tres menos que en la edición de disco y de vinilo, en la edición digital, la cantante y productora de Barcelona ha mostrado con 'LUX' su lado más espiritual. Por eso, en 'Informativos Telecinco' vamos a analizar canción por canción esta nueva obra de Rosalía con la que ha roto todos los esquemas del panorama musical actual y con el que ha recibido los aplausos de críticos, seguidores y compañeros de profesión como la mismísima Madonna.
Sexo, Violencia y Llantas
La primera canción que abre el disco y una con la que Rosalía ha querido mostrar su faceta más espiritual. Haciendo referencias a la entrada en los cielos cuando alguien muere, Rosalía presenta 'LUX' con este tema que, manera de prólogo, arranca con una percusión insistente y una voz que susurra confesiones urbanas.
Sin lugar a dudas, una entrada provocadora con la que la letras juega con imágenes crudas, pero la producción las eleva a un aura cinematográfica. Una de las pocas canciones en las que Rosalía ha querido dejar un poco del espíritu de 'MOTOMAMI' y de 'EL MAL QUERER'. Con una producción más electrónica que el resto de temas, la intérprete va presentando lo que será el resto del trabajo y enfrenta el mundo carnal, de placeres materiales, con el espiritual.
Reliquia
La canción que el equipo de Rosalía publicó, parece ser que por error, el pasado martes y que rápido borraron de todas las plataformas de música. Un tema que suena como una plegaria pop acompañada de violines y por la que Rosalía repasa las ciudades que ha recorrido de todo el mundo y qué le ha pasado en cada una de ellas.
Haciendo un guiño al momento de su gira 'MOTOMAMI' en el que se trasquiló un mechón de pelo o la "mala hostia" que le entró en Berlín, Rosalía recapitula cada una de las experiencias vividas en ciudades como Florida, Marrakech o su natal Barcelona. Cargada de una melodía contenida en la que llama la atención los sonidos y las voces celestiales, Rosalía muestra su faceta más íntima y una auténtica sensación de reliquia.
Divinize
El primer tema en el que Rosalía cambia de idioma. Tras el español, el catalán nativo de Rosalía protagoniza gran parte de 'Divinize' que acaba uniéndolo al inglés. Más abstracta y experimental, Rosalía vuelve a recuperar parte de su esencia más electrónica y la alterna con arreglos de cuerda. Parece diseñada para romper la expectativa del oyente y recuerda que el disco no va a lo fácil y sí a lo más puro e íntimo.
Porcelana
Mientras, en 'Porcelana', junto con un artista masculino que la discográfica aún no ha relevado pero se rumorea que es Frank Ocean, la catalana recita en latín para describirse como "luz". Justo después, Rosalía cruza medio mundo para sorprender en un japonés con el que se relaciona con el caos. Una canción en la que las protagonistas son las palmas, los violines, el piano y el coro que le acompaña. Una canción auténticamente frágil donde la voz queda al frente, como si la intérprete tocara fondo y esmalte; hace uso de silencios que pesan y dejan respirar la melodía.
Mio Cristo
Recuperando la esencia espiritual y cristiana de este disco, Rosalía combina los versos religiosos con ritmos contemporáneos. Apostando por el italiano, como si de una soprano se tratase, la artista decide lucirse vocalmente y presentar al que sería su Cristo, un Dios que "llora diamantes". Uno de los temas donde la tensión temática del álbum se hace más explícita.
Berghain
El 'lead single' con el que Rosalía ha presentado 'LUX'. Aunque se rumorea que esta canción no será la que suene en las radios a modo de presentación de este nuevo álbum , Rosalía cuenta con Bjork y con Yves Tumor para apostar por la vanguardia mimetizada y mezclada con los sonidos sinfónicos, el rap y las bases más electrónicas que son las auténticas protagonistas del final de este tema.
Un single potente que articula dramatismo orquestal y finales explosivos, pero que no es tan comercial como para presentarlo en la radio fórmula. El tema es teatral y escénico donde hace referencias al club berlinés que lleva por nombre este tema y con el que despliega su intensidad sonora. es más simbólica que literal, una excusa para desplegar intensidad sonora.
La Perla
Una de las canciones donde Rosalía más se ha divertido a nivel de composición. En esta canción Rosalía une fuerzas con el grupo de artistas mexicanos Yahritza y su Esencia. Comenzando como una balada, Rosalía recurre otra vez a los instrumentos de cuerda donde son protagonistas los violines y que vuelven a estar acompañados de su gran aliado: el piano. En esta letra, la cantante habla con desprecio de un hombre al que califica como un "Playboy" o un "campeón" que es "un terrorista emocional" y el "mayor desastre mundial". Influenciando a los sonidos mexicanos, la cantante pone a prueba a sus oyentes y seguidores con un ritmo al que no está acostumbrada. Se palpa tradición y modernidad sostenidas por una producción elegante.
Mundo Nuevo
Durante el disco, Rosalía ha apostado por algunos sonidos que te hacen llevar a sus obras anteriores. Con 'Mundo Nuevo', sus oyentes más fieles pueden cerrar los ojos y trasladarse hasta 'Los Ángeles', primer disco que sacó la artista. Este tema tiene una letra con la que mira al futuro y unos sonidos que sirven de interludio para unir las piezas del álbum. Las trompetas del inicio introducen las ganas de la artista de "renegar" de todo para elevarse a un sitio diferente.
De Madrugá
Canción conocida por los seguidores que le siguen desde su etapa en 'EL MAL QUERER'. Rosalía recurre a su arma infalible: el flamenco. Con sonidos de guitarra, palmas y taconeo, Rosalía recupera su esencia más flamenca y con la que tanto éxito consiguió a comienzos de su carrera. Una canción que fue estrenada durante la gira de 'EL MAL QUERER' y que sus seguidores más fieles le pedían a gritos que sacase en las plataformas musicales. Apostando por texturas domésticas, Rosalía hace que el oyente y ella se conviertan en confidentes al compartir sentimientos y reflexiones de medianoche.
Dios Es Un Stalker
Título mordaz para un tema que juega con la ironía y el humor negro y con el que se atreve cantando en ucraniano. Musicalmente, es uno de los más contemporáneos y directos Rosalía muestrasu relación con la espiritualidad y, también, se pone en la piel de Dios para cantarle a alguien a quien sigue de cerca, al que protege. Así, se trata de un Dios femenino, que todo lo ve y que tiene el "buzón explotao'" de peticiones. "No me gusta hacer intervenciones", canta Rosalía mientras la acompañan las cuerdas de la orquesta y palmas con las que vuelve a recordar a su época de 'EL MAL QUERER', pero que presenta a una artista mucho más madura.
La Yugular
Como gran amante de la música flamenca y de sus orígenes, Rosalía no podía dejar el árabe de lado. En 'La yugular', la cantante recita en árabe varios versos en los que le vuelven a acompañar los instrumentos de cuerda y con coro que destaca al final de la canción.
Focu ‘ranni [Exclusiva]
Una de las tres canciones que solo se pueden escuchar en el formato físico del álbum. Es decir, comprando su versión en CD o en vinilo. Con este tema, Rosalía canta en siciliano y español y habla de su "libertad", la cual, explica, no va a dar a cambio de ningún amor romántico. Rosalía se vuelve más irónica y refinada contando cómo la idea de matrimonio le hizo darse cuenta de que nunca ha sido de nadie que no sea de ella misma. Una oda a la libertad y a la apuesta por al confianza en una misma.
Jeanne [Exclusiva]
La segunda canción que solo se puede encontrar en los formatos físicos del disco. Cantando en francés, la artista catalana evoca a figuras femeninas históricas creando una atmósfera que acaba siendo épica y minimalista a la vez. Sosteniendo la voz como si fuese una auténtica narradora, Rosalía con arreglos que sostienen la voz como si fuera una narradora.
Novia Robot [Exclusiva]
Otra de las canciones que solo se pueden escuchar en los formatos físicos del disco y una de las más reivindicativas de todo el álbum. Mezclando el mandarín y el hebrero con el español, Rosalía critica la industria con la que se intenta satisfacer el placer masculino nutriéndose a costa de las mujeres.
Con tono irónico y bastante tajante, Rosalía carga contra esos ideales que intentan hacer que las mujeres se muestren sumisas. Un himno feminista, tan necesario en estos momentos, con el que se satiriza con el negocio de un fabricante de juguetes sexuales que ofrece robots de mujeres y acusa a quien los desea. Un tema en el que Rosalía ofrece un juego entre humanidad y artificio, y funciona bien como desafío sonoro.
La Rumba Del Perdón
Recuperando la idea feminista de la que no se quiere olvidar, Rosalía se acompaña de Estrella Morente y Silvia Pérez Cruz para hablar de una traición en clave. Una canción auténticamente flamenca con la que la cantante hace un guiño al folclore español y con el que presume de ritmo de rumba reinterpretado con modernidad y una buena dosis de corazón. Es uno de los momentos más cálidos del disco. Las tres artistas se respaldan en un coro de cantaoras mientras narran una relación en la que la violencia acaba en una puñalada.
Memória
Con una sombrosa destreza vocal, Rosalía se junta con la artista portuguesa Carminho para hablar sobre las despedidas y el final de las relaciones. Una canción contemplativa que se asienta en el recuerdo y en el que destaca cómo solapan y se mezclan los tonos vocales de las dos artistas junto a los sonidos de cuerdas y el silencio que evoca una nostalgia complaciente.
Magnolias
Cerrando con un tono casi litúrgico, Rosalía termina este álbum con 'Magnolia'. Una canción que, como buena guinda del pastel con la que repasa las ideas de este nuevo álbum, la cantante se reafirma en el tema espiritual y que termina transformándolo en catarsis sonora, dejando al oyente en un eco emocional. Hablando de su propia muerte, tema que no podía faltar en un disco tan espiritual. Con el coro de la Escolanía de Montserrat, Rosalía idea su propio funeral: KTM (la marca austriaca de motos) "quemando rueda" sobre su ataúd y bailes encima de su cadáver. La artista despide 'Lux' sin asumir que su propia muerte sea el final de nada.