Jakar, que así se llama el felino, llegó a AAP Primadomus el pasado febrero depositado por las autoridades tras encontrar irregularidades en la documentación de importación del animal. El felino fue tristemente famoso cuando fue encontrado vagando en el jardín de un particular en Marbella, que lo confundió con un lince y alertó al Seprona de la Guardia Civil.
El animal, con 20 kg en aquel momento y potencialmente peligroso, se había escapado de su casa, fue encontrado a 20 kilómetros de la misma.
Tras las pesquisas necesarias, y comprobar que el animal había sido trasladado de forma irregular procedente de Moscú y declarado para su entrada en nuestro país como gato doméstico, las autoridades han considerado pertinente su decomiso y depósito en AAP para su cuidado mientras continúan las investigaciones, para que Jakar pueda ser tratado como lo que es, un animal exótico no adecuado como animal de compañía.
Jakar pasará un periodo inicial de cuarentena donde se le realizan las pruebas necesarias para conocer su estado de salud, para después tener acceso a las instalaciones exteriores.
El caracal es un animal que puede alcanzar entre 60 y 100 cm de largo (sin contar la cola) y pesar entre los 7 y 18 Kg. Vive en las sabanas y semidesiertos del norte de África, el África subsahariana y el oeste de Asía. Son capaces de matar presas que doblan o incluso triplican su tamaño. Desgraciadamente y a pesar de lo sorprendente que parezca, no es el primer ejemplar que llega a este centro de rescate.
El mercado de mascotas exóticas y la variedad de especies afectadas no para de crecer alimentado por las facilidades que el comercio electrónico y las redes sociales ofrecen a la hora de adquirir animales, muchas veces de forma impulsiva, siguiendo modas y tendencias creadas y alimentadas a través de las propias redes. Se buscan nuevas ofertas para este mercado imparable, donde se presenta la interacción y tenencia de estos animales como adecuadas e incluso inocuas para los animales o sus propietarios.
Pero la domesticación es un proceso que requiere miles de años y los animales exóticos son potencialmente peligrosos, con altos riesgos asociados a su tenencia ya sea para el medio ambiente, la seguridad y salud pública y/o la salud y seguridad de otros animales. Además, sufren enormemente en cautiverio ya que, aunque se hayan criado en cautividad, estos animales tienen la misma composición genética que sus homólogos en la naturaleza y conservan sus impulsos y necesidades de comportamiento instintivos naturales. Esto, unido a la enorme falta de información fidedigna acerca de los requisitos de estos animales, hace imposible que sus necesidades puedan ser cubiertas en un entorno doméstico.
“Jakar ha llegado bien. Su peso actual, 15 Kg, y musculatura son buenos”, comenta Pablo Delgado, responsable del Área de Grandes Felinos de AAP y director de AAP Primadomus.
“Aunque ya nos han llegado los resultados de las primeras pruebas parasitológicas y hemos comprobado que va a ser necesario su tratamiento.” continúa.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.