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Miriam se reencuentra con Salvador, el párroco de Paiporta que le salvó la vida en la DANA: "Tiene una segunda oportunidad"

Miriam y Salvador se reencuentran junto a la iglesia. Telecinco.es
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ValenciaA las 19:02 horas del 29 de octubre el agua comenzó a subir por segundos en las calles de Paiporta. Miriam y su madre, sorprendidas por el caudal, se subieron a un banco de la calle para evitar que la corriente las arrastrara. A unos metros, María Jesús grababa desde su balcón la escena. "Del respaldo del banco subieron a la esquina de la iglesia. Y el agua subía y subía hasta que empezaron a mojarse los pies, mientras la gente gritaba que llamaran al 112", cuenta María Jesús Melero.

A esa hora acababa de llegar a los móviles el ES-Alert. Mirian, su madre y cinco personas más se aferraban a la vida. "Se nos ocurrió subir al muro de la iglesia. Subimos a cuatro mujeres más. No dejaban de pasar coches chocando uno contra otro, árboles, colchones y todo tipo de objetos. Una mujer sabía el número de teléfono del párroco, pero no logró contactar con él y habló con una persona en Valencia para que lo intentara localizar", relata Miriam Martínez.

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Minutos después sonó el teléfono de Salvador, el párroco de la Iglesia de San Ramón, que se encontraba en su interior. "Fue providencial porque no me entraban llamadas y me entró una desde Valencia. Me dijo, ahí abajo tienes a siete personas gritando para que les abras la puerta", recuerda el sacerdote.

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A esa hora el agua ya les llegaba al cuello. "Pasamos nadando por encima de nuestro coche y luego el párroco desde dentro y nosotras desde fuera conseguimos abrir la puerta a patadas", explica Miriam.

El reencuentro

Casi un año después, Miriam y Salvador se han vuelto a reencontrar. "Es una alegría verla de nuevo y ya le he dicho que tiene una segunda oportunidad", afirma Salvador.

Una lección de vida que ha cambiado la forma de afrontar el presente de Miriam. "Nunca puedes saber cúando puede ser el último momento o el último abrazo".

Esa noche, ella y seis personas volvieron a nacer mientras otros muchos no tuvieron tanta suerte.