Ana Milán y Fernando Guillén viven uno de sus mejores momentos profesionales y personales. Juntos estrenan en Barcelona la obra 'El diario de Eva', su nuevo proyecto. El amor entre ellos surgió en 'Wilt' y un año después siguen juntos. "No conozco a nadie más bueno, más honesto y con tanta disposición a la felicidad en el día a día", explica Ana Milán sobre Fernando mientras que él ven en ella una "fuerza es todo generosidad y bondad".
Aunque coinciden en gran parte de la entrevista, Ana Milán y Fernando Guillén discrepan en cuanto al fracaso. Él cree que el fracaso enseña mientras que Ana considera que "es innecesario".
La pareja está unida en un nuevo proyecto profesional en el que ejercen como actores y productores. Ambos reconocen la dificultad para sacar adelante una obra de teatro. "No estamos en un país en el que se cuide mucho al emprendedor", denuncia Ana Milán mientras que Fernando critica el 21 % de IVA al teatro. "La cultura es fundamental. Es un sector que afecta a todo el gremio. Es una pirámide profesional que se está machacando con poco beneficio para Hacienda", denuncia Fernando Guillén.
"Invoco a mi padre antes de salir al escenario"
Fernando Guillén perdió recientemente a su padre pero lo tiene muy presente en cada función. "Mi padre era un obrero de esta profesión, no tenía aires de grandeza, era un gran trabajador, muy coherente con su ideología (...) Es imposible no evocar a mi padre mi voz se convierte en su voz, sinceramente, antes de salir al escenario, lo invoco, le dedico la función, le digo padre ven, estate conmigo porque de alguna manera hago de él".
"Una de las lecciones que me dio mi padre fue la humildad. Era un gran trabajador y muy coherente con su ideología. Eso nos afecta a todos los hermanos. Somos luchadores y nunca se nos ha subido a la cabeza", cuenta Fernando sobre las enseñanzas de su padre.