Peregrinación a Tierra Santa

telecinco.es 04/04/2013 19:00

He visitado en muchas ocasiones Israel y siempre me ha embargado una emoción muy intensa y especial. La primera vez que recorrí sus calles sentí un estremecimiento por todo el cuerpo y una emoción que nunca antes había experimentado, ni siquiera en la India, un lugar muy sagrado para mí…

En esta ocasión, yo quería volver a Tierra Santa en una peregrinación con curas franciscanos, ya que admiro profundamente su dedicación y la grandiosa labor que están realizando por esas tierras santas en las que, gracias a ellos, sigue habiendo presencia cristiana. Cuando hablé con el Padre Teodoro y me confirmó que quedaban dos plazas para un viaje que se iniciaría cinco días más tarde, me moría de la emoción. ¡Por fin iba a ver realizado mi sueño de acudir a los lugares santos bajo el amparo de los franciscanos! Y entonces tuve la intuición. Llamé a la agencia y pregunté: “Viajo el domingo a Israel con los padres franciscanos. El guía es franciscano, ¿verdad? Y me dicen: No, en su grupo va un agustino, Jesús Gutierrez”. Me quedé paralizada. Y no porque tenga algo en contra de esa orden (de hecho me inicié en Parapsicología, en San Paulo, de la mano del Padre Lucas, agustino), pero algo en mi interior se había sacudido…

Iniciamos el viaje y, desgraciadamente, mis temores se confirmaron. No era ése el guía que deseaba y necesitaba tener para visitar esos lugares santos en los que se mueve una energía intensa y especial. Me encontré con un cura irascible y soberbio, en el que la caridad cristiana brillaba por su ausencia… Y con su actitud contribuyó a que el viaje se convirtiera en una maratón de niños de colegio en lugar de un viaje sentido y reflexionado de personas adultas que buscan y necesitan sentir algo en su interior. Comprendo que los curas son personas y, como tales, tienen sus virtudes y defectos, pero alguien que decide dedicar su vida a Dios debe intentar, con más fuerza que nadie, que aflore lo mejor de sí mismo y, ante todo, predicar con el ejemplo.

He de decir, que el grupo estaba formado por gente maravillosa. Éramos tantos que les puse apodos graciosos: Rino, un misionero que cantaba como los ángeles y que gracias a él vivimos momentos mágicos; Adolfo, el intelectual, un Tauro muy divertido que lo sabía todo y al que acudíamos como fuente de conocimiento; la señora elegante, Piscis, que con 84 Años no se quejó en ningún momento de nada y seguía el ritmo en primera línea; Alicia, la más joven del grupo; las gaditanas, que ponían un toque de alegría; la murciana… En fin, ¡qué energía de grupo y qué descontento en la gran mayoría a causa de Jesús Gutierrez, a quien en un primer momento yo le llamaba Padre y luego don Jesús! Cuando podía me “colaba” en el grupo del padre Santiago, un agustino que transmitía tanta bondad y humildad que sus palabras se convertían para mí en un soplo de aire fresco que me ayudaba a avanzar.

Contemplar el cielo en el desierto es algo inenarrable. Está cuajado de estrellas y hay un sonido musical que te traspasa el alma. Sentí una presencia, algo extraño y envolvente, algo que me elevaba hacia otra dimensión… Y tuve la sensación de que por encima de todo está Dios, y que quizá se valga de los movimientos de los planetas para activar energías. Es como si hubiera encontrado una explicación a lo inexplicable.

Os recomiendo el viaje, y hacedlo con los franciscanos porque sin ellos es imposible una organización tan perfecta ni la visita a lugares tan mágicos. Mi consejo: elegid el guía para evitar sorpresas.

Y en este mes de Aries, en el que los planetas Venus y Marte se encuentran transitando por este signo, debemos aprovechar la energía para la acción, y fijarnos objetivos que no sean muy grandes, y si lo son ir poco a poco para poder cumplirlos. Mercurio en Piscis contribuye a que la razón y la intuición estén armonizadas.

Ayer tuvo lugar el Cuarto menguante de la Luna en Capricornio y poco a poco nos vamos acercando al novilunio, que será el día 10 en el signo de Aries.

Los signos de fuego -Aries, Leo y Sagitario- están de suerte. Gozarán de una gran fuerza y energía para iniciar cosas nuevas.

Tauro, Virgo y Capricornio sentirán una gran necesidad de cambio y de renovación.

Géminis Libra y Acuario se pueden sentir oprimidos, y necesitarán apartar de sus vidas aquellas cosas que les esclavizan y no les permiten avanzar.

Cáncer, Escorpio y Piscis tendrán que sortear algunos obstáculos, pero atraviesan un buen momento para realizar exámenes y entrevistas de trabajo.

Que tengáis unos días armoniosos y felices.