Anoche las luces de la casa de Guadalix volvieron a ponerse en marcha para dar paso a La Revuelta, un reencuentro entre 16 de los 21 concursantes que formaron parte de esta última edición de Gran Hermano, y que durará aproximadamente 2 semanas, hasta que comiencen los partidos de la Eurocopa.
Yo creo que la mayoría de los conflictos que se plasmaron dentro de la casa son reales, ya que muchos de ellos han optado por no dirigirse la palabra fuera de esa casa.
Como es el caso de Sindi y Sergio, que pese a tener un pasado de 5 años juntos, ahora mismo son incapaces de mirarse a los ojos y hablar como personas civilizadas debido a todo lo sucedido en estos los últimos meses.
Anoche, durante unas horas, las madres de ambos entraron en acción compartiendo silencios y miradas lanza puñales delante de toda España.
Y es que tanto Conchi como Carmen han tenido mucho que ver en esta historia y han aportado su granito de arena para que esta ruptura se produjera, cada una de ellas barriendo para el lado de su retoño.
Pero teniendo en cuenta la cara que puso Sindi al comprobar que su madre había accedido a semejante cuadro, dudo mucho que esta guerra de familias vaya a seguir siendo televisada.
Sin embargo, la sonrisa diabólica de Sergio no se vio alterada en ningún momento. Y tampoco es de extrañar, ya que desde que la Revuelta diera comienzo, Sindi se vio envuelta en situaciones incómodas, y eso es justo lo que deseaba Sergio con su regreso a la casa…
Pero este no era el único nudo al que Sindi tendría que enfrentarse, ya que aún le quedaba reencontrarse con Azucena después de su enfrentamiento en plató, por el que su fugaz amistad se dio por terminada con reproches e insultos de por medio.
Personalmente me parece absurdo el planteamiento de Azucena intentando camuflar su mala baba y ansias de protagonismo con autenticidad y verdadera amistad.
Por lo que me posiciono del lado de Sindi, que a la vez que se disculpaba por sus insultos y malas formas, reprochaba a Azucena que hubiera aprovechado un momento débil y de alta tensión para meter baza y añadir leña al fuego, mediante críticas que de haber tenido una finalidad favorable para la mondarinas, se habrían realizado fuera de cámaras.
Luego hay reencuentros que me imagino que habrán tenido lugar por no dejarles fuera de esta ecuación, como es el caso de Ariadna, Michael y Mary Joy, cuyo conflicto ha sido directamente inexistente.
Aunque para Ariadna volver a ver las imágenes en las que Michael bebía los vientos por la filipina le removieron dudas e inseguridades que parecen tambalear su reciente relación. Pero es lo que sucede cuando los cimientos se han basado en intereses y mentiras por parte del de Huelva...
Mientras, Marta se enfrentaba a Vero por comentarios e insultos vertidos durante su estancia en la casa, pero no creo que este asunto dé mucho de sí, ya que nunca existió una amistad entre ambas féminas.
Con quien Marta tiene nudos prácticamente imposibles de desatar es con Hugo, que comenzaron como simples piques dentro de la casa por los puntos que el aranés le regalaba en las nominaciones, pero que al parecer se agravaron y mucho fuera de la casa, llegando a protagonizar una auténtica disputa a nivel personal de la que Marta se niega a hablar con el momento.
Por otro lado, Cristian y Dani volvían a encontrarse cara a cara para volver a sacar a relucir el típico tú me dijiste, tú me hiciste… Y aunque he criticado con dureza ciertas bromas que salieron de boca del burgalés, he de reconocer que asombrosamente, Dani comienza a caerme bien.
Mientras María y Hugo empiezan a comportarse como una pareja en toda regla, regalándose besos y arrumacos en esta ocasión sin pudor y de cara a las cámaras.
Y Alessandro sigue en la línea que marcaba ayer desde el programa de Ana Rosa, vendiendo su indignación con la canaria y asegurando que los videos en los que Noemí se burlaba de que volviera a confiar en ella son los que más le han dolido de todo el concurso, incluso más que su affaire con Fael en Brasil…
El último en entrar en la casa fue Pepe, que tras participar de este reencuentro comentando desde plató, se dirigía hacia Guadalix para llevar a cabo una visita express.
Es lógico que Pepe haya rechazado entrar de nuevo en la casa tras haber ganado el maletín de los 300.000 euros, ya que una nueva convivencia con todos sus compañeros le supondría muchas más perdidas que ganancias.
Sería totalmente ridículo volver a partir desde cero y enfrentarse a muchos de sus compañeros, que no me cabe ninguna duda que aprovecharían la ocasión para ir a degüello a por el ganador de esta edición, y así quizás perder de un plumazo todo el apoyo del público que tanto le ha logrado conseguir durante 4 largos meses de reality.
Aunque muchos de los seguidores de Pepe y Pipi están empezando a moverse por la red para reclamar el reencuentro que más les interesa, y no querida Noemí, en esta ocasión no se trata de ti… Si no de una noche a solas de Sindia y Pepe en el apartamento después de que este haya conocido los verdaderos sentimientos que su Pipi tiene por él.
Y es que Sindia se perfila como la auténtica protagonista de esta Revuelta con multitud de frentes abiertos a los que deberá hacer frente con buen talante, ya que según las normas del programa, si las personas que se encuentran en el apartamento no ponen de su parte para dialogar y solucionar sus problemas, tanto ellos como los demás concursantes serán castigados por su indiferencia, en esta ocasión, cerrándoles la verja de la cocina…
Por último, quiero daros las gracias a todos aquellos que me acompañáis desde las redes sociales, entre las que ya sumamos un grupo de más de 400.000 seguidores.
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