Esta es una de las ventanas de la redacción de Sálvame. Alguno de sus trabajadores ha infraututilizado de forma espantosa un bote de nieve navideña para escribir esta críptica y extraña consigna donde todo el mundo pudiese verla (bueno, todo el mundo que atraviese la entrada de Telecinco mirando hacia arriba, que seguramente seremos únicamente los responsables de información meteorológica y yo, que hago mucho lo de mirar a cualquier sitio en vez de hacia adelante). ¿Es un grito de atención de un redactor que lleva ocho días metido preparando alguna nueva e interesantísima noticia sobre Mayte Zaldívar o Raquel Bollo, personajes que a saber por qué han vuelto de un limbo informativo en el que estaban bastante mejor que aquí? En Telecinco se respira el miedo porque si esto se extiende y lo que ha comenzado como una pintada acabe con una oleada de suicidios como la que asola desde hace un tiempo a la empresa France Telecom.
Yo de todos modos me he tirado toda la mañana haciendo un práctico gráfico que he presentado, como todo buen trabajador, con el PowerPoint ante Paolo Vasile y los accionistas mayoritarios de la cadena y que demuestra que los intentos no son descartables, pero la muerte es poco probable:
-Es un primer piso. Excepto casos muy particulares, a lo máximo que nos enfrentamos será a la baja por posibles fracturas óseas.
-Cuatro meses de baja -respondieron los accionistas mirándose entre sí-. Casi mejor que se suiciden.
Y esta es la serie de cosas que han puesto por nuestro lugar de trabajo para que esto no acabe como la empresa francesa y todos los empleados estén contentos y felices:
Espero que uno de ellos llegue a nuestra redacción. Esa nieve que veis no es de flus-flus, es algo más parecido al algodón. Si lo tocas, se intuye una superficie blandita y casi textil. Tengo el firme convencimiento de que como un día les llueva encima a los árboles crecerán hierbitas como en los experimentos que hacíamos con lentejas y algodón en clase de ciencias.
También es para contentar al personal, pero no todo el mundo está feliz. Atención: este dato puede resultar sorprendente, pero yo no estoy a favor de que Karmele vaya a Eurovisión. Es que no le veo la gracia. Tampoco se la vi en su día a Chikilicuatre. Esto de enviar a gente que canta mal y hace una performance en Eurovisión a modo de gracieta posmoderna no lo entiendo muy bien. Eurovisión, ese festival que aquí nos parece tan chorribobo y apolillado, es un evento todavía en bastantes países -civilizados, no de los nuevos- de Europa y además hace felices a miles de abuelitas y jóvenes homosexuales de toda España. ¿Por qué cagarnos en ellos y en su ilusión con un acto de ironía pedante? Para eso, hagámoslo con todo: reventemos el misógino concurso de Miss España enviando a una coja cegata y sin brazos y estropeemos la anticuada y ultracatólica Navidad regalando a nuestros seres queridos una cajita de nuestras heces envueltas en papel de periódico. Podemos incluso enviar como presidente de la Comisión Europea a Pozí la próxima vez que nos toque a nosotros. Si queremos enseñar al mundo que España es un país divertidísimo que no se toma absolutamente nada en serio, no lo hagamos de forma cobarde en concursos de canción ligera. Empecemos mejor la casa por el tejado.
De todos modos creo que al final Karmele no irá a Eurovisión por no sé qué cláusula que se ha sacado de la manga TVE que exige la explotación exclusiva de las actuaciones del representante. No echemos campanas al vuelo, aún pueden decidir que envían a Ramonchu o algo así.
Al final lo mejor va a ser hacer como France Telecom: en los nuevos edificios que la empresa está construyendo las ventanas no pueden abrirse, no hay ningún tipo de balcón y tampoco hay pasarelas que estén a suficiente nivel como para que nadie pueda estamparse desde ellas. En resumen, el perfecto edificio antisuidicios. ¡VIVA FRANCIA!
La expulsión de Indhira ha llenado el buzón de contacto de telecinco.es de mensajes tan geniales que no puedo hacer más que compartir este con vosotros. Viene directito de las oficinas de la Real Academia de la Lengua:
Nombre: ****** Apellido: ******* Email: ***********@hotmail.com Mensaje: como expectador exigo la readmision de indhira nosotros votamos i no emos votado para echarla no es una agresion tirar un vaso de agua ademas aida nizar hizo lo mismo ni se le amonesto i menos fue expulsada no icisteis nada,inma de otra edicon le pego una torta a bayron i no dijreron nada ni tampoco la expulsaron pork epxulsasteis a inhndhira quando su caso fue mucho menos.si readmision yaaaaaa
Resulta que ahora los espectadores de una cadena privada vienen exigiendo derechos, tócate el nabo. Esto debe de ser por lo que no hacen más realities de televoto en TVE, porque si en las privadas nos vienen con estos humitos imaginaos en la televisión pública.
Además, ¿no ven que Indhira, según sus propias palabras, está feliz como unas pascuas en su casa? Menudo amor le tienen. Y para finalizar y hablando de plañideras: Enrique del Pozo ha salido al paso del rumor de un futbolista que iba a ocupar meses ha la portada de Zero diciendo que él salió durante cuatro años con un futbolista. Cuando ocurrió el escándalo de un cura diciendo que algunos jóvenes incitaban a los tocamientos, dijo que a él le había pasado lo propio. Me encanta que Enrique siempre vaya pegadito a la actualidad, pero se le olvida que el tema estrella de hoy es el secuestro de tres cooperantes en Mauritania: ¿cuánto tardará en decir que a él también le secuestraron cuando iba en una caravana solidaria?
