¡Cóctel de noticias!

telecinco.es 07/04/2010 17:31

Cada vez que paso por delante de esta imagen en el pasillo me cago vivo de miedo:

Los carteles del pasillo suelen inspirar alegría. Los de celebridades como Ana Rosa, Mercedes Milá y Jorge Javier transmiten un halo de confianza y transparencia. Los de series como Aída Aídao La que se avecina La que se avecinadan una idea de diversión y serenidad. Los de ídolos como Miguel Ángel Silvestre, Amaia Salamanca o Carolina Cerezuela quieren aportar sensualidad y belleza al pasillo.

Pero este otro de Blanca Portillo y José Coronado aporta otro mensaje: "te vamos a aplastar, apestosa cucaracha gonorreica".

Y tras esta inspiradísima introducción voy a contar el resto de la jornada por puntos. Del uno al seis:

1. Había mucha celebridad flamenca por Telecinco hoy. Uno diría que estaba en la Semana Santa de Sevilla más que en el extrarradio de Madrid. Para empezar, Isaac, el ex novio de Falete, se fumaba un cigarrillito a las afueras del plató de Ana Rosa a eso de las dos y media de la tarde. Sé lo que estáis pensando: este es un dato que puede cambiar nuestra percepción del mundo tal y como lo conocemos.

2. Juan el Golosina hablaba animadísimamente con Sergio Dalma a las afueras del plató de Pasapalabra. ¿Qué se decían? Pues no lo sé, porque yo no soy un cotilla. Y porque cuando me paré como haciéndome el despistado para oír lo que decían me miraron mal, pensando que pretendía algo sucio. Así que me fui.

3. Hoy iba a buscar el lector de tarjetas al mueble de los aparatitos de la redacción cuando me crucé con una compañera que llevaba un cd con la imagen de una jovencita calva. Me acerqué a preguntarle si era algo de una campaña de la lucha contra el cáncer de mama o algo así. Y me dice:

-No es una chica con cáncer, es Rafa Mora.

Miré con atención y efectivamente lo era.

4. En el comedor había nuevo ganado bovino de Mujeres y hombres y viceversa. Un montón de pretendientes machos hacían cola en la caja para acceder con sus bandejas y se preguntaban unos a otros:

-Ahí hay pan. ¿Se podrá coger?

Me entraron ganas de responder que no, que las decenas de bollitos de pan dispuestos en cestas estaban puramente de exposición.

5. Para entrar en el comedor, los co-dependientes pretendientes sólo tienen que decir su nombre en la caja. ¡Menudo morro! Me sorprendió comprobar que tenían nombres normales, como Rubén, Nacho o Christian. Bueno, Christian no es un nombre muy normal. Pero no quiero decir nada por si tengo a muchos Christians entre mis lectores.

6. Se ve que lo de nombres dignos de coristas trasnochadas y de divas del anuncio por palabras es terreno exclusivo de las mujeres en este programa, y para ejemplos están Jenni o Britany, que se reventarían de la tristeza si tuviesen nombres normales como Lola o Juana. Y otro más para la lista: Samira. Samira, que es natural de Málaga, estaba comiendo hoy en el comedor con las gafas de sol puestas. Es posible que tenga un problema de fotofobia, un orzuelo en el ojo o algún padecimiento de corte parecido, naturalmente. Pero si ninguna de esas desgracias era el motivo de llevar gafas de sol en un establecimiento cerrado (y sería extraño, porque entonces no debería estar en un plató lleno de focos) sólo queda una conclusión al respecto: QUE ES UNA HORTERA.