España llora la pérdida de uno de sus iconos espirituales

telecinco.es 10/06/2009 01:30

Operación Triunfo empieza a dar un poco por el saco.

Un saco que, por brillante, dinámico y por estar lleno de deliciosos caramelitos podridos no se puede dejar de mirar. Pero es que el que le escribe las frases a Jesús Vázquez o bien es memo o bien cree que somos memos nosotros. Recordemos cómo empezó la gala de ayer, con un ejemplo parecido a lo que podrían ser tan ricamente las primeras frases del guión de Jesús Vázquez.

JESÚS VÁZQUEZ

¡Buenas noches amiguitos! La gala del miércoles pasado fue terrible

porque un cachorrito de caniche fue accidentalmente atropellado

cuando sacamos el coche del expulsado al escenario. Esperemos que

hoy la gala se desarrolle en paz porque, por favor, no queremos que

este programa se recuerde por un caniche ensangrentado dando sus

últimos alaridos sobre el suelo de este plató, así que olvidemos el

tema y centrémonos en lo importante de este programa: LA MÚSICA.

Pero antes de ellos, vamos a recordar las imágenes ralentizadas del perrito

desmembrado, que no nos gusta nada volver a emitir, y vamos a

preguntar qué opinan de este atropello a Risto, Noemí, Ramón, Coco

y el dueño del caniche.

Y tal y pascual. Cosas que hemos aprendido en la apertura de la gala de hoy, viendo como los chicos cantaban Gloria (que mucho mejor versionó la llorada Laura Branigan):

1. Angel Capel debería ser puesto a disposición judicial por hacer de la experiencia televisiva una auténtica tortura. Encender la televisión se ha convertido en un acto peligroso para la vida: es probable que, de repente, aparezca él cantando. Eso debería considerarse agresión.

2. Gala tras gala alguien intenta convertir a la en principio Brenda Mau en TODO UN HOMBRE HECHO Y DERECHO y hoy ha ganado muchísimos puntos.

3. Diana estaba tan hermosa que parecía un ángel recién llegado de una nube de elfitos.

Repsol regaló a los chicos unas preciosas motos para niños de cuatro años. Como era obvio, a todos les importó un carajo y ni las miraron. Las motos podían ser tal vez un homenaje al Especial Lesbianas que el departamento de estilismo quiso celebrar al principio de esta gala y que continuó bien presente cuando Silvia y Alba Lucía hicieron una actuación aburridísima de una canción aburridísima de por sí, Mercy, de esa pesada llamada Piffia.

Hay algo que me encanta de Operación Triunfo y es la manera que tienen de terminar las canciones con un golpe y los triunfitos levantando la mano y mirando a cámara. Algo así como: CHIMPÓN. Es algo que causa sensación y sulibeya a niños y abuelos en las verbenas de toda España.

Después salieron a cantar Ángel y Patricia, momento que aproveché para apagar la televisión y hacerme unas hamburguesas de pavo. Las hamburguesas de pavo están muy ricas, no engordan mucho y se pueden condimentar con mostaza, que tampoco engorda, y se da uno un atracón así, tan panchamente. La actuación de Ángel y Patricia también me dejó tiempo para mirar fijamente y sin parpadear a un bote de lacasitos que tengo debajo de una lampara y que, cuando les da la luz directamente, brillan y forman una amalgama de colores que me fascina. Cuando puse la tele de nuevo me debí equivocar de canal porque había dos amigotes borrachos cantando Human de The Killers inventándose todo el rato la letra así con un inglés como de Coslada.

Y al final volvieron a hacer lo de CHIMPÓN, tócate las narices.

"Nuestros concursantes han hecho estupendamente su canción", dice Jesús Vázquez de repente. Eso quiere decir que no me había equivocado de canal, sino que esos dos eran Mario y Jon. Jon, menos mal que a ti no te pueden nominar (hasta hoy, visto lo visto). Da gracias al cielo.

Los responsables de Hoy no me puedo levantar se comprometieron a meter a un triunfito en el reparto de su obra. Pero se ve han disfrutado tantísimo con la audición de todos ellos que no pueden decidirse por ninguno. Vamos, se han quedado tan absolutamente maravillados con tanto talento que les ha explotado la cabeza de puro síndrome de Sthendal y no saben a quién escoger.

Diana ha salido a cantar una canción y voy a intentar explicar por qué me gusta Diana, aparte de porque sea guapa y delgada y sepa hablar: porque es CUQUI. ¿Qué digo cuqui?. Diana es RE-CUQUI y canta ULTRA-CUQUI. Esto quiere decir que no tiene una voz que vaya a cambiar la historia de la música pero es agradable escucharla, resulta elegante en el escenario y cada vez que aparece entre toda esa pandilla de zotes que es la Generación 2009 de Operación Triunfo ilumina la gala. Verla nominada a la pobre después de que seis concursantes, en fila india, saliesen a estropear otras canciones y a hacerlo mil veces peor que ella me llena de desesperanza y hace que pierda mi fe en la humanidad y en la democracia.

No deberían permitir que España tenga derecho a voto. Debería decidirlo todo YO.

Pero bueno, todas esas chorradas de gente cantando y creyendo que va a llegar a algo en el mundo es completamente secundario: llegó el momento en que Noemí Galera iba a explicar qué ocurrió en la pasada gala, en la que según Risto se recibieron órdenes por el pinganillo para no nominar a Jon. Noemí soltó una serie de cosas aburridas que ya había explicado antes y después, por si sonase todo muy creíble de por sí, lo remataron pasando a publicidad precipitadamente justo cuando va a hablar Risto.

Una vez en American Idol, la jurado Paula Abdul (una de mis personas favoritas del mundo, ex estrella del pop de los noventa, borracha profesional y que supuestamente se tiró a un finalista durante el concurso hace un par de ediciones) metió la gamba hasta el fondo mientras explicaba, mientras leía su guión, qué le habían parecido las dos canciones de uno de los concursantes que la escuchaba desde el escenario. "La primera me gustó", dijo, "pero la segunda menos". Resulta que la primera, efectivamente, había estado muy bien. Pero la segunda todavía no la había cantado. Y ella dijo: "ah, ¿no? Pues yo pensé que habías cantado dos veces". Y todos estallaron en un ataque de risa.

Y nunca más se volvió a saber.

Eso es bastante más profesional que pisotearse explicaciones entre sí. ¡Como si nos importara! El criterio del público, probablemente, va a ser mucho peor que el que sigan los mandamases en un supuesto tongo. A mí, con tal de que se peleen, me parece todo bien. Y si los mandamases decidiesen que a Diana no se la puede nominar, benditos ellos. Pero anda que Jon... Madre del amor hermoso.

Todo lo que pasó después no importa porque Diana, snif, se ha ido y nuestros corazones se han quedado sin luz. En cualquier caso vi una cosa muy rara: Cristina cantaba Nothing's gonna stop us now y otro concursante, Rafa, le hacía los coros. Qué cosa más rara. Pero en fin, que Diana se ha ido como era de esperar. Qué vergüenza de país.

Menos mal que la semana que viene se va Jon.