¡Con qué emoción me enfrentaba esta mañana a la rueda de prensa que los concursantes de Operación Trunfo 2008 al completo daban en el plató de Está Pasando! Les he llamado cucarachas, sabandijas, horteras, tecnocharis, barriobajeros, fontaneros y homosexuales. ¿Alguna vez habrán leído esta humilde esquina del gigantesco mundo virtual? ¿Me mirarían mal, me insultarían, me tirarían un zapato a la cabeza o me molerían a palos hasta matarme? Con emoción, intriga y dolor de barriga, me dirigí en este fin de semana al plató propiedad actualmente de Paqui Peña, siempre buscando la noticia, siempre abordando al personaje.
En Telecinco saben cómo tener contenta a la gente en una rueda de prensa: había una mesa dispuesta con jamón serrano, palitos de pan con aceite de oliva como los que ponen en el comedor, queso, croquetas, tortilla, unas cosas de hojaldre que tenían como tofu y dos minipepinillos encima (bueno, o algo así), y también coca cola, vino y cerveza.
En el plató de Está Pasando se amontonaban un montón de medios, por ejemplo, Está Pasando. También había gente con pinta de ser periodistas de algún sitio como: Bravo, Superpop, SuperMinnie y TopMusic. Los concursantes no finalistas, o sea, esos que no cuentan para nada, fueron los primeros en entrar y en posar ante la pantalla gigante del programa. Entre ellos destacaba Reke, con un tupé color pollo y las piernas depiladas, seguramente por consejo de algún desalmado metrosexual.
Reke, si me lees: di NO a tu estilista. No es nada contra ti, nada más lejos de la realidad.
Los finalistas llegaron después, como absolutas estrellas. Era la primera vez que veía a Virginia así de cerca, ¡ay, qué ilusión! Porque la había visto ya en el plató de OT, pero como a cinco kilómetros. Virginia es sumamente elegante y brilla entre todos los concursantes de esta edición por motivos más que obvios. Virginia también brilla por su intelecto y esto es un hecho probado y no un peloteo. La comparación entre sus respuestas y las del resto lo deja claro.
Hubo un momento en el que un avispado periodista pidió a los tres finalistas que dijesen quién quería que ganase, excluyéndose a sí mismos.
-Chipper -dijo Pablo.
-Pufla* -dijo Chipper. (*traducción: "Pablo").
Virginia, en su inmensa clase, sólo acertó a soltar una carcajadita cuando le pasaron el micrófono para que ella respondiese. Y más ancha que pancha soltó:
-LOS DOS.
Y eso es ser espontánea y demostrar que te pasas por el forro las opiniones de esos seres que te rodean.
Una vez terminada la rueda de prensa, los señores de Gestmusic se llevaron a los tres finalistas prácticamente metidos en una red y a toda prisa. Imagínense si alguien les hace una foto y es publicada en alguna web que no sea Portalmix: EL FIN DEL MUNDO. A los demás, sin embargo, los dejaron sueltos por allí, permitiéndoles relacionarse con todo el mundo. Traducción: "no interesan". Y así, los triunfitos y los mortales compartimos vasitos de Coca Cola y pinchitos de espárragos con pan (una combinación insólita, al menos para El Pasillero).
Mientras tanto, algunos medios, como por ejemplo Está Pasando, pedían a los triunfitos un saludo para el programa. Tania S. y Anabel (que por cierto parece una mujer sumamente simpática y hermosa) se hacían con una remesa de lonchas de jamón. Empezó a sonar una versión de Fever e Iván aprovechó para frotarse contra la pantalla del programa. Reke, que repito, se había convertido en un personaje completamente secundario para dar todo el protagonismo a su tupé, charlaba sentado en los sofás con una mujer que le entrevistaba.
Por cierto, seguro que ya sabéis, estimados lectores, que este fin de semana se celebra el Summercase, cuya afluencia de público peligra gravemente al coincidir con una firma de los triunfitos en un Carrefour de Alcobendas a las 8. Muchas voces fiables aseguran de todos modos que, aprovechando su estancia en Madrid, es muy posible que Reke y Manu sean teloneros de Primal Scream, una vez probada su talento para el rock tras su revisitación de Smells like teen spirit de Nirvana. Smells like teen spirit Habrá que estar atentos.