Arturo: "¿Quién eres tú para rechazar a un tipo como yo?"

telecinco.es 09/12/2009 08:20

La casa no es que esté aburrida exactamente, pero sus habitantes arrastran sus cuerpos sin fuerza cuando se acaban las doce horas diarias en las que combinan el ejercicio físico con no poderse sentar ni apoyar en ningún lado. Lástima que lo hayan hecho tantas veces, lo cual pone difícil superar la prueba. Hemos visto a Gerardo sentándose en el 'confe' de forma flagrante o, mucho más sutil, Carol apoyándose un largo rato en el frigorífico. Y esto son solamente un par de ejemplos.

Cuando pueden, por tanto, se dejan caer donde sea, principalmente en la cama. Antes de la medianoche de ayer veía a Carol quedándose casi sin nadie que le escuchase mientras hablaba de gustos culinarios. A ambos lados de su cama, Tatiana se quedaba dormida como un angelito, y Ángel hacía ímprobos esfuerzos por no cerrar los ojos. Es lo que tienen pruebas así, pensadas más para complacer a un patrocinador (o el trasfondo cruel de un guionista) que en el espectáculo. Craso error, a mi juicio. Claro que cuando a estos mismos guionistas se les ocurre una prueba interesante ni siquiera la vemos en ningún programa. ¿Alguien se habría enterado del 'tercer grado' a Gerardo de no haber sido porque lo hemos contado aquí? Si la semana pasada nuestros minutistas o nosotros mismos no nos hacemos eco de esa parte de la prueba es como si no hubiera existido. Ni un minuto ni medio mereció. Particularmente, no lo entiendo.

Por fortuna, no faltan cosas que comentar, entre otras cosas gracias a algunos de esos argumentos que tanto gustamos de sacarle el máximo provecho. Es conocida mi opinión sobre Ángel, sin que pueda decir que la he modificado desde mi último comentario sobre este habitante de la casa de Guadalix. A pesar de ello, siempre le he considerado un buen concursante, probablemente el mejor de esta edición. Su táctica de quedar siempre como un buen tipo, bienintencionado donde los haya, amigo de sus amigos, generoso con todos y juicioso en cualquier circunstancia, le está funcionando casi a la perfección. Si no fuera por algunos toca pelotas como el que esto suscribe, estaríamos ante el concursante modélico, de esos que hacen plantearse si no ha caducado esta fórmula porque alguien puede procurarse el premio a poco espabilado que sea. Basta con asumir un rol de concursante imbatible, en la convicción de que gustará a la gran masa de espectadores, muy en especial aquellos que suelen votar.

Confieso que en ocasiones me parece admirable como concursante, y yo mismo dudo si no será tan buen tipo como para no tener que fingir tan solo un poco. Su relación con Tati es tan especial, siempre cariñoso y comprensivo con ella. También con Gerardo parte del respeto, aunque le llame frikie y se sonroje a veces con él. Ha simpatizado también con Carol y antes lo hizo con Carolina. Su estancia primera en la denominada casa espía (la misma donde ahora moran) le hizo tener una especial relación con Saray y Laura. Además de todo esto, tuvo la suerte de caerle en gracia a Nagore, con quien apenas coincidió en la sala de expulsiones unos minutos. Y con su amiga Melanie casi llega a tener más que palabras.

Lo de su defensa de Rebeca siempre me llamó la atención. También que renegase de Hans sin razón aparente, al menos a mí se me escapa si reviso globalmente lo ocurrido estos meses. Y con Lis pasó de estar enamorándose de ella a repudiarla en vivo y en directo, tras una noche de cuchillos largos y la reacción airada (eufemismo irónico donde los haya) de Laura, ese día que la de Elche no sonreía. Salvo algún traspiés, el profeta del buen rollo se ha equivocado poco, por eso entiendo perfectamente dos cosas: primero, que una mayoría importante de espectadores le tengan como el gran favorito; y segundo, que él mismo tenga tan alto concepto de sí mismo como para hacerse algunas preguntas casi retóricas sobre el rechazo que hacia él puede experimentar alguno de sus compañeros.

Me refiero fundamentalmente a su siguiente frase: "No sé qué le puede caer mal de mí". Se refiere en la misma a Arturo, aunque bien podría ser aplicada a cualquier otro. ¿Cómo puede ser que caiga mal a nadie? es la pregunta. No hay ni un ápice de ironía, realmente pienso que dado su inteligente juego aún es extraño que un puñado de concursantes se haya dado cuenta de qué va Ángel. Junto a Arturo, podemos contar a Saray, Siscu o Pilarita. Igualmente pasó con Toscano, Indhira o Hans. También en parte una Laura a la que parece pesarle más un factor emotivo por encima de su valoración objetiva del personaje. Pensándolo bien, son bastantes los que perdieron la fe por el mesías zen. Estoy seguro de que cualquiera de ellos le contestaría a su pregunta con gusto y profusión de argumentos.

Pero claro, él lo está haciendo muy bien. Anoche mismo le volví a ver repitiendo su papel de víctima con la comida. Cocina para los demás y apenas prueba algunos de sus platos. Los demás no tienen medida y serán víctimas al tiempo que responsables si para la próxima semana no disponen de presupuesto. Se lamentarán entonces de haber comido tanto esta semana, en lugar de guardar ahora para lo que pueda venir. Los demás ponen su comida en bols de los grandes mientras él se sirve un bol pequeño y poco lleno. Lleva semanas insistiendo en este discurso y no me extraña nada que muchos se hayan dejado seducir por campaña tan cuidadosamente urdida. Por esto mismo, pienso a un tiempo que es rechazable de plano su visión intoxicadora de la realidad, planteada con el fin de aprovecharla en su favor; como llego a simpatizar con unas artes tan malas como efectivas. Es un extraordinario concursante, de eso no me cabe duda.

Arturo me parece mucho mejor concursante que Ángel, entre otras cosas porque no se oculta casi nunca. Ahora bien, algunas veces queda a semejante nivel que su compañero con frases imposibles y absurdas. La que he utilizado para el título de este escrito merece ser enmarcada y clasificada en el apartado de grandes idioteces en Gran Hermano. La frase de Arturo está dirigida a Carol y fue pronunciada la noche del domingo, después de que esta le dijese que no le gusta nada: "¿Quién eres tú para rechazar a un tipo como yo?". Ahí queda eso.

La frase anterior no da muestras de forma explícita de lo que pretende Arturo, aunque tampoco da idea de lo contrario. Este esclavo de su sexo (su hermana dice que es un enfermo, lo cual me parece un exceso) no se ha terminado de creer lo que le dijo Carol el domingo. O es eso, o bien simplemente piensa que ahora no le gusta pero ya le gustará. Dije un día de estos que él liga por agotamiento del contrario, sometiendo a la mujer elegida a un 'pressing' continuo y extenuante (sobre todo para la parte contraria). No sé bien qué pensar, aunque me inclino por esto último. También pudiera ser que siga pensando en la respuesta de Carol como el producto de una serie de condicionantes, fundamentalmente no querer quedar como la "pilingui de España", que ella mismo dijo cuando empezó a arrimar cebolleta (es una expresión) con Gerardo.

Pueden ser las dos tesis correctas. Por un lado piensa que Carol está muy presionada, no por él sino por las circunstancias. Por otra parte, posiblemente es cierto que piense eso de ella no es nadie para rechazar a un tipo como él, lo cual le motiva para seguir intentándolo hasta conseguir que caiga rendida ante sus encantos. La última opción es achacar todo esto al alcohol, aunque esto no me termina de cuadrar. Si pido sinceridad, ¿habría alguien entre quienes apoyáis a Arturo capaz de defender esta frase?, o (como dicen los abogados de las películas americanas) ¿no es menos cierto que si la hubiera pronunciado cualquier otro concursante lo estaríais poniendo de hoja perejil? Ya respondo yo, creo que todos diríamos lo mismo: este tío es un creído insoportable. Y un panoli, añado yo, aunque todo ello hace que me dé un poco de pena. Fíjate tú.

Arturo lo que espera es la llegada de las italianas, algo de lo que habla mucho con Siscu últimamente. Parece como si se hubiera enterado de algo que ha contado hace un par de días Alessia Marcuzzi, presentadora del Grande Fratello italiano (que está en su décima edición) en el informativo TG 5 de Canale 5. Según esta presentadora, va a comenzar un doble viaje al extranjero con dos concursantes de aquella edición. ¿Vendrán los/as dos a España? ¿Tal vez solamente uno/a? Como las dos últimas encuestas de esta semana han quedado en pocos días algo antiguas, plantearé durante un par de días la pregunta a nuestros amigos sobre quien preferiríais que fuera mandado a Italia en un presunto intercambio, sobre el que nuestro Gran Hermano no ha dicho esta boca es mía. Ojo, no haya confusión en los términos de esa encuesta, ya que no preguntamos por favoritos (ya la haremos) sino exclusivamente para escoger al concursante ideal para mandar de intercambio.

Mencionaba las dos últimas encuestas y, para quien no haya estado atento, resumo aquí cómo ha quedado la cosa. La opinión sobre si Gerardo tendrá más suerte a la hora de poder llegar a algo con Carol, lo cual parecía intentar tras el acercamiento en la fiesta del viernes, ha quedado muy igualada. El 51 por ciento opina que sí frente a un 49 que no. Mitad y mitad, por tanto. El propio Gerardo invita a que no nos animemos mucho a ese respecto, ya que ayer le contaba a Tatiana lo siguiente: "No me voy a tirar a la piscina si no hay agua. Lo que le falla es que es muy sosa y muy ñoña. Le falta sangre. Es como una niña pequeña". No es la primera vez que me veo reflejado en las palabras de Gerardo. Me lo tendré que hacer mirar. Unos días antes preguntábamos sobre las posibilidades entre Carol y Arturo, y un 56 por ciento las negaba. Es una mayoría exigua, pero lo es.

Quiero terminar hoy con una rectificación y haciéndome eco de una aclaración. En ambos casos el protagonista es Siscu, a quien ayer vimos fugazmente en el comienzo de su gran cogorza del domingo pasado. Pues bien, si antes puse la comparación de este personaje y uno de Vittorio de Sica, hoy quiero rectificar y reconocer mi tendencia a exagerar algunas veces, siempre en pos de subir un poquito el nivel. Pero lo justo es rebajar las expectativas puestas en este caso, porque Siscu más parece un personaje de película de Ozores que nada relacionado con el neorrealismo italiano. En realidad es como el del medio de Esteso y Pajares.

En cuanto a la aclaración, quiero agradecer a la docena de amigos que amablemente ocuparon ayer parte de su tiempo en explicarme que lo de "tonto de la 'cope'" no está referido a la cadena de radio de idéntico nombre (allí el más tonto ya se fue, como me decían en uno de esos mensajes) sino por el barrio de Sant Boi de Llobregat llamado 'Ciudad cooperativa'. Me perdí el día que explicaron esto, gracias a todos por molestarse en contármelo.

[Dejo cartelera, con Carol en 'Volver'. Mañana jueves, a las 12.30 horas, Indhira responde a vuestras preguntas en un nuevo encuentro digital (este encuentro ha sido aplazado hasta mañana, aunque la fecha inicial era el día de hoy). Recuerda que también puedes ver la entrevista íntegra que le hizo Mercedes Milá nada más ser expulsada. Y puedes seguir participando en el Test de Gran Hermano, donde podrás probar tu nivel de conocimientos sobre la historia del programa].