Llega el 'Escuadrón feroz'
El 'Escuadrón feroz' ha aterrizado en Guadalix. Así se han hecho llamar los concursantes Óscar, Yago y (¡cómo no!) Julio 'el feroz'. El apodo de este último da nombre al primer grupo formalmente constituido en la casa, el cual no oculta en absoluto su primer y principal objetivo: pactar las nominaciones.
Algunos concursantes entran un poquito resabiados, por lo cual se dan situaciones como que tras dos días de estancia en la casa ya comiencen a pensar en nominaciones. Por extraño que parezca es así, y ayer a los mencionados no les costaba casi nada hacer una lista con quienes desean poner a tiro. El disparador del 'Escuadrón feroz' actuará, de momento, contra Dámaso, Joaquín y Anup. Al menos así lo interpreta este gato descodificador de torpes claves. Cada uno de los objetivos fue enunciado con un símil entendible para ellos, lo cual me hace pensar que no puede ser tan complicado. "Música, leer/escribir y un país lejano", dijo el supuesto líder del grupo, el boxeador que tan contentas tiene a las chicas de la otra casa, como contaré unas líneas más abajo.
"Música" podría ser Dámaso o Jhota, si bien sobre este último habían dicho en algún otro momento del día que pensaban podía estar de su lado. Por tanto, está claro que se referían al folclórico ex seminarista. No hay duda alguna de que cuando hablan de "un país lejano" se están refiriendo a Anup. La clave "leer y escribir" es la que me ofrece mayores dudas, aunque posiblemente se estén refiriendo a Joaquín. No me preguntéis por qué pero es en quien pensé primero, aunque también podría ser Eduardo.
Según Yago, si los tres dan sus tres puntos al mismo compañero no hay quien lo salve. Óscar, un poco más espabilado, pregunta si no es la audiencia quien decide, pero su compañero y Julio no andan con tantos remilgos y creen que tienen el poder absoluto. No contentos con hacer su primera lista llegaron incluso a ampliarla con un cuarto nombre, entre sus próximos objetivos. Esta vez fue fácil de entender porque hablaban de más música, o sea de Jhota.
Las razones de sus elecciones están más o menos claras. Dámaso, Jhota o Anup porque ni tienen el pelo medio rapado ni son adictos al gimnasio. Ellos son así y están dispuestos a acabar con los de una raza diferente. Los vigoréxicos hormonados (no es una expresión, Julio decía ayer sin ningún pudor que al salir de la casa volvería a meterse lo mismo que antes de entrar) desearían quedarse solos y eliminar a los distintos. Lógica elección de los más diferentes: el coplero que no ha pisado nunca un gimnasio (ayer se sentaba en uno de los bancos de gimnasia diciendo "mamá, mira, voy a hacer deporte, qué cosa más rara") o el indio que dice tener un "supermercado en África" (¿cómo?). Por eso no es extraño que luego vayan a por el 'retroreagetonero' de gorras con cuatro tallas más o a por el 'nerd' sordo que aún acude al logopeda.
Joaquín es una excepción a medias. Este también es carne de gimnasio pero tiene diez años más que los del escuadrón, además de otro tipo de vida. A decir verdad, es el único cuyas razones veo sobradas porque se está revelando en tan poco tiempo como un 'metemierda' profesional. Puedo equivocarme pero le veo teniendo problemas con todos sus compañeros. Ayer mismo, de ser yo Edu o Anup hubiera tenido que hacer serios esfuerzos para no ser borde con este buscavidas, como él mismo se define.
Si bien el grupo de los guapos musculados es el más claramente definido en estos momentos no es el único. Chari, Jhota y Dámaso han hecho algo así como una promesa de no nominación. No se quieren nominar entre ellos, lo cual es un pacto en positivo no muy distinto del otro. Digamos que estos también están pensando en nominaciones, por extraño que parezca. Lo vivido durante el largo día de ayer en ambas casas demuestra que para muchos no son tan pocos días para empezar a tener claro a quién se quiere nominar y/o a quién no.
Dámaso dentro de su anacronismo algo cateto parece de los más claros y ausente de dobleces. Empiezo a tener claro que es tal y como le estamos viendo. De momento, sus modos algo amanerados y sus gustos demodé no están acompañados por pusilanimidad alguna. A los dos compañeros con quienes firmaba ayer su particular pacto les decía: "Aquí hay chulitos, y a mí los chulitos me tocan el rabito". Solo con esto gana bastantes enteros en mi bolsa personal, situándose en el 'ibex 5' del gato, compuesto en este momento por Anup, Eduardo, Julia, Terry y este coplero no tan bobo.
Por terminar el repaso a los habitantes de la casa del futuro (imperfecto), Anup y Eduardo están más cerca de los del pacto positivo que de los musculitos. Es algo bastante obvio, entre otras cosas porque son víctimas propiciatorias de estos y, además, pasan mucho más tiempo con aquellos. Digamos que su relación con Jhota o Dámaso se basa en el respeto, cosa que no se puede decir de Óscar, por poner un ejemplo. Ayer no paró de burlarse de Dámaso, pidiéndole canciones con bastante sorna y riendo abiertamente cuando el 'coplero pepero' le dedicaba cariñosos piropos. Creo que solamente me queda Marcelo, el cual ni siquiera tiene hasta el día de hoy entidad de mueble en esa nívea casa.
En cuanto a la casa vulgaris, Laura (esa concursante que parece un descarte de Las joyas de la corona) está dispuesta a nominar a Catha, entre otras cosas porque piensa que esta hará lo propio con ella. Patricia, por su lado, cree que la nominará Mireia porque ambas son opuestas.
Ellas están aplicando unos razonamientos inversos. Más que planificar sus nominaciones andan viéndolas venir, adivinando las enemistades que hayan podido empezar a granjearse. De todos modos, la reunión de anoche apunta ya afinidades entre las concursantes. En el jardín, aguantando el frío que ha venido de repente en Madrid, estaban Mireia, Marta, Terry y Julia. Tomo nota.
Lo que une las dos alas de la casa es la convicción de que Chari y Rubén son pareja. Ella ya ni siquiera se molesta en negarlo, más bien lo confirma al expresar su temor por lo que pueda pasar mañana al haberse descubierto el pastel. Si no entendí mal en la gala de presentación, Mercedes sugirió que de como fueran las cosas dependía el momento del reencuentro entre los dos. O sea, que previsiblemente tardarán en volverse a ver, o incluso puede que no lo vuelvan a hacer nunca en esa casa de la sierra madrileña.
En la reunión mentada las presentes le hicieron un traje a Julio. Su tocaya Julia no traga al boxeador, y las demás no le llevaron la contraria sin llegar a ser tan contundentes. Su actitud en la 'sala negra' resulta ofensiva para ellas. "Que si tócame el pecho, tócame el culo, tócame la pipa que son todas parecidas pero no iguales", cuenta la 'princesa del váter'. Las chicas se plantean la posibilidad de que ellas hicieran lo mismo en los encuentros. No quiero ni pensar en el infarto que le podría dar a más de uno.
Anup es quien ha atado cabos con mayor facilidad. Su relato de la situación es totalmente acertado. Según el 'indio loco' Chari y Rubén son pareja, por eso a ella le han dejado sola con chicos y a él solo con chicas. Además, se apoya en el hecho de que ella no tenga maleta y en una salida de la concursante durante el primer día de convivencia. Salida interpretada como para hacerse las pruebas médicas y firmar el contrato, porque ella no estaba previsto que entrara en la casa, todo lo contrario que su novio. Pleno al quince, sí señor.
Poco que reseñar de la fiesta que celebró el 33 cumpleaños de Yago, salvo que solo la hubo en la casa de los chicos, el interesado cenó a oscuras con Patricia (según su elección) y las chicas de la otra casa le hicieron un pastel. Eso sí, no quisieron quedarse sin kiwis por hacer el pastel, que vienen muy bien para ir al baño. Quizá lo que más interesante me resultó fue escuchar a Eduardo contando con cierto detalle su problema auditivo. Tiene solamente un 5 por ciento de audición pero con los audífonos llega hasta el 80. Curioso que el oído izquierdo no capte los agudos (el sonido del triángulo, por ejemplo) y con el derecho sí. Eso sí, con dos copitas se pone a bailar y lo peta.
No me resisto a terminar con un par de pinceladas de ayer basadas en cosas que me hicieron gracia. Voy de menor a mayor. Anup habla de Hamilton (el de la Fórmula 1), al que dice odiar, y afirma: "Si pudiega pinchag sus guedag" (si pudiera pinchar sus ruedas). Con ese acento de imitador de película casi cualquier cosa queda graciosa. Jhota habla de cómo taparse al salir de la ducha para no ser captado por las cámaras, aunque recuerda que eso no sale porque en todo caso lo pixelan, pero en lugar de esta expresión lo dice a su manera: "Le ponen el grumo ese". ¿El grumo? Por humanidad, ¡qué forma de decirlo! Y, por último, Dámaso anuncia que ha lavado sus calzoncillos por fin: "Estoy súper a gusto. Es lo mejor que he hecho hasta ahora". Acabáramos.
[Espero que hoy se resuelvan los problemas de los blogs y sea posible comentar. Siento las molestias, de corazón].