En esta vida hay quien nace con espíritu de señor y otros de vasallo. Entiéndanme bien, todos somos iguales pero unos más iguales que otros. No es tanto una cuestión de reparto de papeles como de intención. Por ejemplo, en la casa de Gran Hermano, Melania es 'señor' y Nicky 'vasallo'. La elección de los ejemplos no es baladí porque ambos se encuentran a gusto con su papel, libremente elegido. Otros ejercen con cordura el papel de señor no dado al vasallaje, como podría ser el caso de Pepe.
Este sociosistema es complicado dada la singularidad de algunos de sus elementos. Su composición (personas que lo forman) está elegida por un agente externo, aquello que damos en llamar 'la organización'. Su ambiente (natural y social) es un híbrido entre casa de la sierra y plató de televisión donde se entablan unas relaciones condicionadas por el juego. Y su estructura (relaciones entre sus miembros y entre éstos y objetos ambientales) está marcada por la conciencia de poca perdurabilidad, algo que está especialmente presente en esta edición de reencuentros puesto que su duración es en principio más limitada. Todo esto justifica, en alguna medida, que Melania diga aquello de que por ella dejaría que la casa se llenase de mierda y caos (no lo dice así pero es lo que sugiere) y cuando todo esté a punto de echarse a perder metería una excavadora y arrasaría con todo. Lo justifica diciendo que aquello es un decorado, y en parte es cierto. Sucede que todos sabemos la verdadera razón de su extraña tesis: no quiere dar un palo al agua.
Me recordó esta idea que vimos repetida en el resumen de ayer por boca de la propia Melania y dos de sus compañeros (Nicky y Ainhoa) a algo que escuché decir alguna vez al arquitecto Sainz de Oiza, autor de la torre BBVA de la Castellana (Madrid) o el Palacio de Festivales de Santander, entre otros. Según este arquitecto, estaría dispuesto a derribar cualquiera de sus obras si le garantizasen que podía edificar algo en su mismo sitio. La obra, una vez terminada, dejaba de tener interés para él. No deja de ser como esa sensación, de la que he hablado alguna vez, de fin de la emoción cuando uno ha comprado un objeto deseado. La emoción de la Pastorita, perra de Punset, cuando está a punto de serle servida la comida, que acaba cuando la tiene ya a su alcance. Esto pasa también en el amor y tantos otros ámbitos. También pienso una cosa: dado lo limitado del espacio, no hay mejor oportunidad que aprovechar un mismo lugar para ir edificando y derribando la obra después, casi como un banco de pruebas. De todas formas, no sé qué pensar de un arquitecto que se hizo fabricar un reloj cuyas manecillas giraban en el sentido levógiro (contrario a las agujas del reloj) y no el dextrógiro de toda la vida del señor.
Como digo, la intención de Melania es bastante más simple. Ella no quiere mover un dedo, ni limpiar ni cocinar, pero espera que otro lo haga por ella, aunque se invente cosas como aquello de la excavadora. Si no fueran otros quienes limpiasen y cocinasen su salud correría peligro por falta de higiene y/o inanición. Antes de pasar las excavadoras hay que subsistir evitando una infección por hacer sus necesidades en un cuarto de baño infecto que nadie haya limpiado, y conviene comer en periodos de seis a diez horas, aproximadamente, puesto que tras varias semanas de ayuno absoluto uno termina muriendo. Sin llegar a un final tan drástico, la gusa aprieta y eso solo se soluciona comiendo. Luego Melania lo que quiere es tener 'vasallos', o quizá sea más preciso decir que sabiendo de su existencia se pide el papel de 'señor'.
Lo peor no es que piense estas cosas, en definitiva ideas peregrinas tenemos todos alguna vez. Lo más grave es que lo diga. De acuerdo que ella prefiere no hacer nada, que ha ido allí a pasarlo bien y no está dispuesta a limpiar el cuarto de baño o cocinar, pero no hace falta vanagloriarse de ello. Menos cuando hay otros que lo hacen. Siempre he dicho que en una comunidad cada uno aporta una cosa, no todos tienen por qué fregar cacharros porque alguien puede ser más útil en cualquier otra labor, manual o intelectual. Pero lo de Melania pasa de castaño oscuro, y es así fundamentalmente porque ella solo aporta su veneno y mal humor. Aún recuerdo cómo criticaba a Arturo e Indhira por aislarse del grupo cuando ella y Piero están haciendo lo mismo ahora. Tengan la actividad que tengan los demás ellos dos están juntos, la mayoría de las veces literalmente tirados uno sobre otro, sin comunicarse verbalmente y casi sin moverse, como lagartos tendidos al sol.
Lástima que parezca olvidada la cantinela de "me quiero ir", con la que ha tenido la casa alerta desde el pasado viernes. Es como el cuento del pastorcito mentiroso, por lo que a estas alturas nadie le presta atención. Esto último es lo que le pirra a la de Morella. Es una persona dependiente de la atención que le prestan los demás, no puede vivir sin ser el centro de todo, algo que consigue de la forma que sea y caiga quien caiga. De hecho, lo está consiguiendo con este gato estúpido, razón por la cual cerraré este apartado de forma inmediata. Solamente decir que si esta pareja resultase inmune esta noche debería anotar las siguientes dos ideas: solamente hay cinco parejas, por lo cual nada más que dos no serán favoritas; y además, el tirón de la pareja lo pone Piero y no Melania, lo cual no termino de entender puesto que se trata de uno de los concursantes más prescindibles y anodinos de la historia de este programa.
La cantinela de Melania parece tanto para llamar la atención como el último invento de la marquesa destitulada. El domingo les propusieron un juego consistente en repartir flores y mensajes, acompañando todo con globos y piruletas. Esta modalidad de fiesta, acompañada por algo de alcohol, tenía por objeto celebrar el día de los enamorados. Para ello disponían de flores blancas (amistad), rosas (amor secreto) y rojas (pasión), pudiendo elegir entre las tres para regalar a sus compañeros. Beatriz terminó colgándose del cuello de Piero, preguntándole si entrará en su habitación alguna vez, y llorando finalmente. De todo lo cual entendimos la mayoría que estaba tirando la caña al italiano. Particularmente creo que ni estaba tan borracha como aparentaba ni mucho menos ha sentido un repentino amor por Piero. Es posible que recuerde como el italiano piropeaba a Mercedes Milá, diciendo que le gustaba mucho, y por eso entienda que tiene predilección por las mujeres maduras. No olvidemos que hoy hay gala y una pareja saldrá de la casa, probablemente la formada por ella e Inma.
La formación de grupos de la que hablé ayer ha unido al grupo de Pepe por una razón evidente y otra que no lo es tanto. Está claro que la prueba del baile ha terminado de condicionar los grupos, haciendo que se unan y conozcan más los integrantes de cada uno de ellos. La división está muy marcada por este hecho y anoche mismo veíamos jugando a las cartas o a los personajes precisamente a los componentes de ese grupo. A saber, estaban Pepe, Ainhoa, Bea, y alternativamente Nico o Nicky, que como dice el inventor del 'nominator' por los nombres podrían hacer un dúo cómico. Son precisamente los cuatro del mismo grupo más la omnipresente Michael Jackson 'legionaria', a quien veo cada vez más cerca de estos. El otro punto menos conocido que les une es que todos ellos tienen perro. Parecerá una tontería pero les he escuchado al menos dos veces hablar largamente de sus respectivos canes, y eso une mucho. Son dueños de perros Nico, Nicky, Ainhoa y Pepe (con el famoso Zidane, que visitó la casa en su edición).
El retrato de la casa anoche mismo es tremendamente sintomático. Por un lado teníamos a los mencionados jugando en torno a la mesa del salón, en uno de esos ratos que enganchan al 24 horas. De hecho, diría que me lo pasé mejor en ese rato (y otros de esta edición de reencuentros) que en todo GH XI. Detrás de estos, en los sofás del salón, Beatriz e Inma se arreglaban las uñas. Y en algún lugar indeterminado de la casa estaban Piero y Melania, que solamente aparecieron para irse a dormir. Está claro, ¿no? Raquel, a quien ayer califiqué como "basura espacial" pero era tan solo una exigencia del guión, estuvo ayer hablando bastante rato con Pepe. Me gustó ese instante porque demostró leer mejor el inglés que Pepe, concretamente intentaban descifrar el horóscopo de una revista en inglés que alguien ha metido en la casa, presumiblemente la propia Raquel. La otra demostración del poso cultural que atesora fue cuando definió el término procrastinación (postergar actividades o situaciones que deben atenderse), el cual ni siquiera era conocido por el madrileño.
Esta noche hay gala, o sea estamos de fiesta a partir de las diez de la noche o un poquito antes. Durante la gala veremos salir expulsada a una pareja e incorporarse otras dos a la convivencia. Tengo dicho que el juego de alianzas en esta edición será cambiante por el dinamismo que aporta el cambio de pareja semanal, a lo que ayudan las bajas producidas por las parejas que han abandonado voluntaria u obligatoriamente. Una pareja nueva entrará porque así es el juego cada semana, y otra en sustitución de Arturo e Indhira. No haré ninguna previsión esta vez ni intentaré adivinar quién viene esta noche. Seguro que nos sorprenden, en esto juego sobre seguro porque lo hacen siempre. Por los resultados de las últimas encuestas de este blog veo dos parejas con cierta ventaja en el juego, que son la formada por Bea y Nicky, así como la de Pepe y Raquel Lo. Dependiendo de quien entre en la casa su eventual dominio puede estar en cuestión. Esta noche lo vemos. Disfrutad de la gala.
[Dejo cartelera recuperada de la séptima edición, con Beatriz e Inma. Ya puedes ver aquí la entrevista íntegra de Milá a Arturo nada más ser expulsado. Puedes votar por tu pareja preferida para que sea inmune a la expulsión en esta página. Seguimos pidiendo tu apoyo para conseguir el premio Nobel de la Paz para la Fundación Vicente Ferrer, para lo cual puedes votar aquí].