Solo Hans

telecinco.es 23/09/2009 08:11

Hoy ando confuso, no porque tenga dudas sobre lo que veo (afortunadamente lo tengo bastante claro) sino que ayer estuve tomando notas y no debiera haberlo hecho. No suelo tomar notas casi nunca, lo cual echo de menos cuando se trata de poner un entrecomillado, por eso pongo pocos y a veces no son todo lo precisos que debieran ser.

Es que no me gusta mucho tomar notas para facilitar el funcionamiento del propio filtro de mi memoria, el cual se encarga de decidir en el momento de ponerme a escribir aquello que cuento o no. En definitiva, no soy un narrador, sino que compongo estos escritos con retazos de mi memoria, sensaciones, impresiones personales basadas siempre en horas de observación. Por eso cuando me señalan a veces que me he dejado cosas sin contar pienso siempre que por algo será, aparte de que no puedo referir todo lo sucedido en la casa porque nadie llegaría hasta el final de estos escritos. Ni yo mismo, i think.

Pero ayer me sorprendí tomando notas, probablemente para ayudarme a jerarquizar la información que recibimos, mucho más rica y variada de lo que muchos parecen apreciar, según lo ve este gato entusiasta. Por eso compondré hoy una especie de bodegón con aquellas cosas que fui ayer recogiendo en mi Moleskine. Cuando llevamos casi veinte días observando han pasado tantas cosas que uno no sabe si pedir asesoramiento al abogado de Lis, a la bestia que lleva dentro Gonzalo o a ese ratón orejudo marido de Rosita, la muñeca de Rebe. Esto es lo más, señoras y señores. Aunque igual lo más sensato es pedir que me dejen la 'fregoneta' de Ángel y emprender la huida. Dicen que una retirada a tiempo es una victoria, pero la carne es débil (que se lo digan a Tosqui) y nos retiene delante de la ventanita aún en días como el de ayer, bastante aciagos.

Hablando de Toscano, mi primera nota dice que en apenas un par de días ha pasado de chico discreto y luchador a caradura aprovechado. Ni tanto ni tan calvo, pero ciertamente está cuidando poco su propia imagen diciendo las cosas que dice, e incluso con ciertas actitudes, pequeños detalles que no dejan de desconcertar. Igual le vemos haciendo bici estática, lo cual choca bastante, como mostrando más bien poca sensibilidad con Tatiana, o nervioso ante la eventualidad de que aquí fuera estén siendo mejor valorados aquellos a los que él ha dado la espalda hasta ahora.

Me parece genial que en su afán de superación logre montar en bici, por el contrario, me parece inmaduro y poco centrado cuando dice cosas como que él tiene el apoyo de todos los que van en silla de ruedas. "Si yo estuviera fuera apoyaría a la persona que está en la misma situación que yo", dice Toscano. La respuesta en ese momento de Melanie fue proverbial: "Yo cuento con el voto de todos los que caminan de pie". Es lo menos que se le puede decir a quien no para con la cantinela de que está dispuesto a aprovecharse de su situación. Sobre las maniobras de despiste en torno a sus nominaciones de esta semana solo decir que está empezando a parecerme excesivo el cachondeo. Ayer igual decía que estaba deseando salir nominado con Arturo, como sugería a los 'bonitos' que a lo mejor contaban con su voto para igualar las fuerzas en la casa.

Pero la respuesta de anoche a Tatiana es lo que más le retrata como un muchacho inmaduro y no muy centrado. Le estaba metiendo mano y ella lo rechazó diciéndole que no le gustaba eso. Su respuesta fue: "Pues si te gusto yo vas a tener que acostumbrarte". Al rato ella lloraba ante la incomprensión de Nagore o Juan, que casi le habían afeado la conducta, poniéndose del lado de Toscano. Vamos a ver, de acuerdo que estos días atrás le ha dejado ir demasiado lejos, lo cual no quita para que si ahora ha decidido echar el freno a él no le queda otra que aguantarse. Ajo y agua, que se dice.

No me sorprende la actitud de esa Tatiana que siente una rabia inmensa al ver a Arturo e Indhira, que a pesar de discutir cada día sobre donde está la línea que pueden sobrepasar o no, está claro que se tienen un gran cariño mutuo. A la ruso andaluza no le he apreciado ninguna muestra de auténtico cariño hacia Toscano. Se ha restregado contra él y ha dejado que le comiera la oreja varios días seguidos, pero nunca la he visto hablando de Toscano, ya fuera delante de sus compañeros o en el confe, con cariño de verdad.

Le molesta a Toscano la presunta prepotencia de Arturo cuando dice que no se irá. El fecundador de Guadalix sabe hacer pasar su inflado ego por pensamiento positivo. "Si piensas que no vas a irte no te irás", dice Arturo. Hombre, ciencia exacta no es, pero hay quien ha basado toda una filosofía en una actitud de ese tipo. Yo lo aplico cada vez que llego a mi casa en coche para convencerme de que encontraré una plaza de aparcamiento a la puerta. El día que se cumple me quedo convencido del poder del pensamiento positivo, pero cuando no miro a otro lado y disimulo.

En el enfrentamiento entre los dos grupos de la casa 11, Hans cada vez lo tiene más claro. Se ha pasado sus primeros días en esa casa observando, y ahora analiza la situación con meridiana claridad. Empiezo a vislumbrar que puede ser una gozada tenerle de narrador ahí dentro, al menos eso parecen revelar los confesionarios que empezamos a ver suyos. Y esto es algo que siempre me ha gustado mucho. Le veo sensato y clarividente, algo inédito hasta ahora. E inaudito en esa casa esta temporada. De momento es el único que me está atrapando y está conquistando mis simpatías. Solo Hans. Hans solo.

Lástima que luego hablando con Milá parezca una loca mala, pero eso de momento no lo ha visto ninguno de sus compañeros. Ayer, charlando con los 'bonitos', hacía un análisis certero: "En cuanto aparece el correveidile enseguida aparecen las otras dos". Lo cual traducido quiere decir que Nagore y Melanie van besando por donde pisa Juan, genialmente apodado por Hans como el 'correveidile'. Mucho más certero fue un análisis suyo en el 'confe', donde afirmaba que veía a la gente amedrentada o asustada. Absolutamente.

No es extraño que sea así. Por un lado tenemos la 'indefensión aprendida' de la que hablamos días atrás. Aún no se han dado plena cuenta de que pueden reaccionar e intentar cambiar la situación, como nos recordaba ayer jolinchimpun (menudos nicks se ven por aquí). Que no es preciso callar cuando grita Nagore. Que pueden tirar de la palanca del poder, sin necesidad de esperar a que vengan refuerzos. Tampoco les ayuda lo sucedido el pasado jueves. La expulsión del concursante más polémico les ha debido dejar necesariamente impresionados, a consecuencia de lo cual se muestran más contenidos ahora, temerosos de que cualquier roce pueda causar una reacción violenta en alguno de ellos, y las fatales consecuencias de que esto pasara.

La bestia de Gonzalo (ahora dice que no existe, en una campaña de lavado de imagen personal sin precedentes) les ha paralizado incluso después de abandonar la casa. Solo Nagore se permite gritarles, incluso a los propios. Casi se come a Toscano por meter al tostador (la tostadera, según Rebeca) una rebanada de pan con un poco de mantequilla. Alucinante, ¿que no? Y lo que es peor, nadie le contestó. Pero, efectivamente, será alguien de la casa espía quien tendrá que tirar de esa palanca para lograr girar de verdad la situación, o tal vez un reserva.

Una situación penosa en muchos aspectos. No cometeré el error de exagerar, pero verles contar los macarrones y pesar hasta el gramo toda la comida para repartirla con precisión de relojero me parece sonrojante. Coincido totalmente con Hans, una vez más, en que esa situación provoca una mezcla de vergüenza e indignación. Además, sienta un precedente, porque cuando dejen de tener problemas de suministro y anden con la nevera llena, quien sabe si no seguirán controlando las cantidades de ese modo por pura inercia. Yo veo eso y creo que me piro de allí sin 'fregoneta' ni nada. Si hace falta salto el muro del jardín.

De momento, parece muy probable que deban andar a pan y agua una semana más, y ahora casi sin reservas de ningún tipo. Llevan un desfase de una hora y un minuto, a pesar de que algún día se han aproximado bastante, quedando a tan solo tres, cinco o cuatro minutos. Pero también han tenido más de treinta, por un descuido de Tati y Melanie. Esta última comentaba si debían pedir que les dijeran el culpable de haber perdido la prueba, sin darse cuenta de que sería ella misma una de las más perjudicadas de conocerse esa información. Si a Juan 'correveidile' le quitan de contar lentejas para la repartición diaria lo va a pasar mal. No quiero ni pensar (o sí) en que no haya nominaciones la próxima semana y tampoco tengan nada de comida. ¿Juan sin contabilizar nada? Igual no lo supera.

La mezquindad del correveidile este es inagotable. Tengo entre mis notas que dice no comprender por qué Arturo tiene que presidir la mesa. "Como si fuera el jefe", añade Juan. Solo faltaba que se pelearan por la posición en la mesa a la hora de comer. Intento no ser cruel ni demasiado despectivo con ninguno de ellos, pero este tipo tiene la habilidad de sacarme un poco de mis casillas. Creo que desde Carlos H. 'casper' no había tenido esta sensación tan deprimente. ¿Qué habré hecho yo para merecer esto?

En la casa espía sigue interesándome solamente Ángel. Como Hans, este concursante sabe leer bastante bien el concurso, mostrando una capacidad para mirar las cosas con cierto distanciamiento que en el caso del dueño de la 'fregoneta' tiene una explicación clara. Es que realmente lo está viendo en la distancia, con un cristal de por medio. El mérito real lo tiene Hans, a quien no le ha salpicado la mezquindad de la 'pandilla basura' ni aún le veo afectado por la 'indefensión aprendida' del resto, entre otras cosas porque no estaba en la casa en fechas anteriores.

De Ángel destacaré apenas dos notas rescatadas entre bastantes otras de diferente tipo. Primera, que su apuesta sobre el expulsado puede ser por Siscu. Ayer, al menos, le parecía que podía ser este quien salga de la casa mañana, lo cual es muy posible que le haga ganador y candidato a pasar a la otra casa. Y luego algo que viene a abundar en mi teoría sobre su mala conciencia y el remordimiento ante el trato dado en esa casa a Lis.

Ayer decía lamentar que su no novia y él no hubieran tenido un premio por haber conseguido salvaguardar su secreto. Ángel no dice nada nuevo, o al menos nada que no se haya dicho aquí por activa y por pasiva. La única excusa que habría tenido Lis de cara a sus compañeros es una compensación a su descubrimiento. Caso de no haberla, como así fue, se entiende como una traición, lo cual realmente no es otra cosa que respetar el juego planteado. Pactar o amañar el resultado de ese juego es lo que el DRAE llama, precisamente, tongo. Eso es lo que parecían pretender Laura y compañía, y por eso este gato justiciero preferiría que no siguiera en el juego alguien que no ha sabido respetar sus reglas.

Hasta aquí este bodegón. Mañana hacemos otro.

[Dejo cartelera, con Hans en el papel protagónico. Recuerda que puedes ver en esta web el resumen de 30 minutos, emitido en La 7, además del de 15 minutos, que se emite dentro de Sálvame. Y también puedes ya solicitar tu sitio en el plató de Gran Hermano, rellenando un simple formulario.]