Brilló la luz del ganador Iván

telecinco.es 23/01/2009 08:17

Poco confiado en su victoria, Iván Madrazo rompía una puerta de papel que le conduciría al abismo de un viaje hacia el exterior de la casa. El viaje que debían hacer anoche y en el que la audiencia votante decidía el orden de salida. Primero salió Almudena, la tercera clasificada, y después un Iván que atendiendo al porcentaje del 69,8% de los votos que fueron destinados a él lograba la mayor victoria desde el triunfo del gran Pepe Herrero en la séptima edición. Además, el urogallo que anoche cantó antes de llegar el alba, hace historia colocándose en el puesto número siete del ránking mundial, es decir, el suyo es el séptimo porcentaje más alto para un ganador en una final con tres o más finalistas. Y el número trece (fuera supersticiones) del ránking mundial general, incluyendo las finales a dos. Tengamos en cuenta que estamos hablando de 154 finales en la historia de este programa en todo el mundo.

Y es que anoche brilló la luz de Iván, no solamente por lo deslumbrantes que resultan los datos sino porque demostró en la entrevista con Mercedes Milá las razones por las que este concursante le ha robado el corazón a tanta gente. Su sonrisa franca y adorable era anoche todo un reflejo de su alma, esa que dice haber limpiado en Gran Hermano y yo siempre vi reluciente. Fue de la sonrisa a la emoción, y hasta casi parecía que iba a llorar cuando Mercedes le dijo que no entendía cómo alguien podía haberle roto el corazón, haciendo referencia a su vida sentimental previa a su paso por la casa de . Ese estudio de , testigo de tantas cosas durante los últimos años, fue anoche un hervidero de sentimientos y emociones. En todas las ediciones no se ha vivido nada igual en ese plató. Absolutamente brutal y apasionante.

Fue una noche de sorpresas en la que se perdían al menos dos tradiciones: que el ganador tuviera la posibilidad de disfrutar de su triunfo en una casa solitaria y que pudiera celebrarlo con al menos un compañero en el momento de conocer la decisión del público votante. También resultaba una innovación la presencia en el mismo plató de una notaria que daba fe del proceso de votaciones telefónicas. Por fin vimos al notario, una añeja reclamación de muchos seguidores del programa. Pero más sorpresa fue para este gato feliz ver como casi todos los concursantes felicitaban al ganador a su entrada en plató. Liz, Palomares, Germán, Eva, Gisela, Carlos H., Raquel, Nany, Li, Gema, Mirentxu, Loli, Ana, Julito y después sus dos compañeros de encierro en solitario durante la última semana, la cría Almudena y Orlando, segundo clasificado. Adivinen quién se escondió a la hora de felicitar al ganador. Pues sí, Carlitos se debió meter debajo del sofá de ex concursantes.

Con nueve ediciones a sus espaldas, anoche culminó la que ha sido para muchos una de las más apasionantes. Nunca sabremos cuántos votos estaban ayer en juego pero imagino que más de los imaginables. El sueño se cumplió, aunque no fuera gratis, y el pirata Iván tuvo su merecido triunfo en una final inédita en la que los tres se tienen aprecio verdadero, algo que nunca antes había sucedido. En la tercera edición, Kiko, Patricia y Javito tenían una buena relación, pero no es lo mismo y, además, este último le dejó bien claro a su compañera que nunca podría convivir con ella. En el resto de ediciones mucho menos, una razón más por la que a la décima fue la vencida también en este aspecto. No en vano, Iván hizo parte de su entrevista con su mano cogida a la de Orlando, que vio cómo se frustraba su sueño al tiempo que su amigo obtenía el propio.

Se acabó, por fin, el mito de que todos piensen lo mismo sobre Iván, como le dijo Loli una semana antes, ya que antes de la resolución de esta historia tanto Liz, como Germán, Eva, o Raquel preferían ver a Iván ganador. Gisela no se decantaba por ninguno de los dos últimos finalistas, con lo cual evitaba posicionarse en contra del modelo cántabro, y Palomares sonreía divino como siempre. Si a estos le sumamos a Orlando y Almudena, me salen siete concursantes, que junto al propio Iván hacen casi la mitad de los concursantes de esta edición. Hay mayorías hechas de la nada, como queda claro. Por tanto, Iván no gana fuera de la casa arrastrando el lastre de no haber conseguido ser querido dentro, ya que todos hemos visto en estos cuatro meses muestras inmensas de cariño, tanto suyas como hacia él. Posiblemente las mayores nunca vistas en esa casa, y Almudena tiene mucho que ver en ello.

La excusa del debate de hoy, que tendrá a los concursantes como grandes protagonistas, como ha de ser, sirvió para justificar unas entrevistas más bien cortas, incluso la del ganador. Chiqui protagonizó un enfrentamiento con Ana y Eva, que no fueron capaces de entender lo ofensivo de sus palabras, ya que mientras la primera decía que por su estatura había tenido una "patente de corso" que le permitía hacer o decir cualquier cosa que no se habría permitido a los demás, la otra argumentaba que sus compañeros y amigos se habían reído de ella y no con ella. Ambas cosas me parecen auténticas majaderías que no se corresponden ni de refilón con aquello que este gato ha observado durante tantas y tantas horas en los últimos cuatro meses. La cartagenera solo obtuvo el 7,4% de los votos, acusando el efecto del voto útil que provocó una concentración de los mismos en Iván, con el fin de asegurar su triunfo.

Orlando tuvo una entrevista pareja con lo que supuso su paso por la casa, un camino de rosas según fue definido por Almudena. Nany no quiso amargarle la noche ya de por si algo incómoda para quien se quedó a las puertas del triunfo, y además tan alejado del mismo al recibir tan solo el 22,2% de los votos. No le contaron al feriante valenciano los supuestos escarceos de Nany una vez fuera de la casa, y estoy convencido de que le hubiera resultado indiferente. Orlando estuvo como siempre, a caballo entre la corrección y la tendencia a sobrevalorarse en detrimento de los otros. Por ejemplo, su interpretación de la buena relación que tuvo en la casa con Iván fue que había sido porque él se lleva bien con todo el mundo, a pesar de haberse tenido que callar cosas para no enfadarle. En ningún momento tuvo la generosidad de reconocer al otro mérito alguno a ese respecto, lo cual me pareció bastante feo por su parte.

En esa olla a presión que era anoche el estudio de Gran Hermano en Telecinco, llegaba el momento de la entrevista a Iván, y en este punto debo hacer una rectificación sobre algo que dije en mi escrito de ayer. No tenía yo mucha confianza en Iván y su retórica, a menudo tendente a entrar en bucle (que diría , otro triunfador de esta edición que junto a , , y han hecho la importante labor de minutistas, que tan útil nos ha resultado a muchos). Sorprendentemente, Iván estuvo anoche contenido, aunque también es cierto que fue bien sujetado por Milá y volvió a meterse a la mayoría de la audiencia en el bolsillo. Si Palomares y Julito fueron los escobas oficiales en la casa, anoche Iván demostró una imprevista maestría para barrerles a todos con un verbo preciso y demoledor.

No sé si esta semana en la que han estado tan solos le ha servido para ir imaginando mentalmente cómo afrontaría la entrevista de anoche, o la seguridad que pude observar en él es producto de haber mantenido la integridad en todo momento, sin tener nada de lo que avergonzarse ni casi arrepentirse, si bien pidió perdón un par de veces. Los carteles que le colgaron de prepotente, poco humilde o incapaz de pedir perdón, se los quitó ayer de un zarpazo. No tuvo ningún problema en afrontar lo que ha sido su paso por este programa, si bien tuvo la generosidad (el de egoista fue otro de los carteles que injustificadamente le colgaron) de aclarar que tras la entrevista de ayer, que tendrá su continuidad en el debate de esta noche, para él quedan todos los temas zanjados, no guardando ningún resquemor hacia ninguno de los que fueron sus compañeros. Esto tiene un singular valor teniendo en cuenta que muchos de ellos se lo hicieron pasar muy mal en muchos momentos, especialmente ese Carlos H. que ayer estuvo correcto y coherente, manteniendo su propósito expresado el día de su expulsión de enterrar el hacha de guerra.

En definitiva, Iván demostró ser aún más brillante anoche de lo que algunos esperábamos. Su luz propia brilló como nunca, y siguiendo el símil en lugar de proyectar sombras sobre los que tenía alrededor les hizo brillar igualmente. Personalmente agradezco a los concursantes de lo que hemos dado en llamar 'fila cero' que mantuvieran casi todos un comportamiento ejemplar, permitiendo que la final fuera la fiesta que debe ser. Y, cómo no, al equipo que hace este programa ese enorme regalo que nos sirvieron con una sucesión de vídeos con una calidad espectacular. Es un lujo y un orgullo que en el programa de nuestros amores, este que hace posible tenernos emocionados durante más de cuatro horas, con el que reímos, nos enfurecemos, lloramos y tantas cosas más, trabaje el mejor equipo del mundo. Son simplemente únicos, los mejores entre los mejores, y no podía terminar esta temporada sin rendirles este tributo. Del primero al último se merecen un reconocimiento, y personalmente lo quiero personalizar en las personas que hacen los vídeos de las galas y ese diario de las tardes que es absolutamente inmejorable.

Termina aquí un Gran Hermano sin complejos, en el que algunos concursantes fueron auténticos a rabiar. Un GH en familia, porque la sensación que se queda en esta hora final es haber estado con amigos, con nuestra gente. Esta vez sí tengo totalmente claro que Iván es uno de los nuestros, pero no solamente él. Son tan nuestros que algo de nosotros cambia esta noche también. Personalmente empecé esta edición con el temor de siempre hacia la posibilidad de encontrarnos con un casting no tan bueno, y termino con la sensación de haber vivido algo tan único que posiblemente sea la que mejor me lo hizo pasar. Y no me cabe duda sobre que nunca antes tantos habíamos sentido tanto.

No tengo palabras de agradecimiento suficientes para una Mercedes Milá que es desde hace mucho una de las nuestras, y anoche hizo de embajadora de esta gatera llevándole a Iván una muestra, un adelanto para que sepa lo mucho que se le ha apoyado desde aquí. Desde hasta , del primero al último. Y no solamente a Iván sino también a un Orlando que tuvo entre nosotros un lujo de defensa en o , entre otros muchos. Y es que tenemos un lujo de comunidad, ya lo creo que sí.

Anoche ganó el gran protagonista de esta edición. El amo del jacuzzi, el urogallo que canta en la madrugada, el ave nocturna de inhalador y papel higiénico en el bolsillo que en realidad resultó ser rara avis. El concursante virgen, el de las charlas de la madrugada revestidas de una ensoñación lúdica y sensorial. El sensible. El afable, sencillo, bondadoso y honrado, amante del "vive y deja vivir". El imperfecto, testarudo y exasperante monologuista que entra en bucle con facilidad. Iván Madrazo es un perdedor que tiene tan asumida su derrota que la afronta como un reto, haciendo un desplante a la mala fortuna, dejando en ridículo a los que huyen de los problemas. El gigante puede ser ahora tan fuerte como un roble, frágil y quebradizo dentro de un rato. Entró con rictus y mirada triste en la casa, sin haber terminado de superar la ruptura con una mujer a la que probablemente sigue amando, y sale con una mirada limpia y una sonrisa. ¿No es maravilloso este programa? El perdedor se convirtió esta vez en ganador, y su sueño era anoche el de muchos.

Esta noche tenemos una nueva cita en el programa especial donde se terminarán de desatar algunos enredos y los finalistas terminarán de dar cuenta de lo que ha sido su paso por la casa. Es otro regalo que viviremos de forma muy especial. Por tanto, en principio, tenemos una cita dentro de unas horas y el lunes que viene acudiremos de nuevo a esta cita para comentar ese debate y poner el punto final con la última anotación de dos cifras en esta temporada. Esto quiere decir que si sumamos la anotación publicada en nuestra antigua casa al mismo tiempo que saludábamos en esta, en total hemos sumado cien artículos durante la temporada. Vamos pues a por el 100 de esta edición 10.

[Pido paciencia y mis disculpas si el servidor se cae de nuevo hoy. Por otro lado, dejo la última de la temporada, con un Iván más que nunca. También os recuerdo que hasta el último día de este mes de enero se puede votar a este blog o a cualquiera de los existentes en esta casa en la elección del mejor blog, cuyo ranking se puede consultar aquí.]