Concursantes falsos y con suplemento

telecinco.es 02/10/2014 09:08

Hay concursantes de verdad y concursantes falsos. Unos pretenden ganar seduciendo a la audiencia mostrando cómo son y los otros fingen ser lo que no son y solamente piensan en hacer buenos vídeos. Los concursantes falsos miran continuamente a cámara y condicionan sus actos a lo que el espectador verá en ellos. Hace unos días decía este gato escamado: “Lo que toca ahora es meterse en el jacuzzi o en la ducha, hacer como si estuvieran manteniendo relaciones y dedicar el polvo mirando fijamente a cámara. Infalible”. Pues bien, anoche Omar y Paula tenían su primera coyunda en la ducha. Según propia confesión miraron a cámara y un rato más tarde Omar dedicaba el polvo. “Por España”, dijo, acompañando sus palabras de una gran sonrisa.

Poco después, estaban en el jacuzzi los dos falsos concursantes junto a Luis y Hugo. Al parecer, este último les había sorprendido en plena faena en la ducha. Luis les recomendaba que no lo contasen a los demás porque podían molestarse. Paula preguntó: “¿Solo lo sabéis vosotros?”, y al unísono le contestaron que ellos y toda España. Fue entonces cuando Omar remataba la faena con la dedicatoria esperada. No me sorprendió porque pienso desde hace días que son falsos concursantes que están actuando ante la cámara. También lo demuestra esto que decía Paula: "Ya me estoy imaginando el vídeo de lo que ha pasado esta noche". Muy fuerte todo.

Con este tipo de concursantes este formato se acaba. Gran Hermano es una simulación de realidad donde el espectador debe creer lo que ve. Difícil me lo ponen gente que dedica sus actos más íntimos a las cámaras. Es como cuando uno está metido en una película y de repente se cuela un micrófono en plano por un fallo de realización. En ese momento reparas que estás viendo una ficción y son desperdiciados los esfuerzos de actores y director por hacerte partícipe de lo que pasa, emocionando o haciendo sonreír al espectador.

Uno sabe que los concursantes son conscientes de que se les está viendo y es parte del juego que piensen en el espectador y sus posibles reacciones ante sus actos. Xamy se preocupa por la imagen que está proyectando en la audiencia y por eso está arrepentida de su puntapié a la cama del otro día. Eso hace que ande desde hace un par de días expresando su arrepentimiento, contando por activa y por pasiva que eso estuvo mal aunque no está dispuesta a pedir perdón por el fondo de todo lo que dijo ese día. Le preocupa lo que la audiencia piensa, precisamente porque actuó con naturalidad, siendo ella misma en todo momento.

Cosa bien distinta es lo de quien mide sus actos y planea un guion donde la víspera de la gala debe llegar el primer polvo, habiendo expresado previamente reticencia a que la pobre abuela pueda ver tal cosa. Decía Paula que nunca lo haría porque a su abuela le podía dar un infarto. Preocupación de la que ya se ha olvidado al parecer. Haría bien Paula en dejar de mencionar a su abuela. Lo digo por el bien de ambas. Lo pienso desde el primer día: no me creo la relación de Paula y Omar. Es más, no me los creo como concursantes. Creo que no se diferencian mucho de Feroz y Flor, expulsados en GH 12 por tener una actitud parecida, solo que en aquel caso aún más escandalosa.

Ayer descubrimos que también hay concursantes con suplemento. Nos lo descubrió Vitín, decidido a hablar con Yoli para expresarle todas esas reticencias ya comentadas durante los días previos con Omar, Paula y algún otro compañero. La conversación tuvo un punto divertido, porque descubrimos a Vitín utilizando un lenguaje que no se corresponde. Era como si estuviera hablando de otra cosa en lugar de sentimientos cuando se refiere al perfil o el suplemento. La conversación duró más de media hora, con continuas interrupciones de compañeros que necesitaban entrar en el dormitorio. Debió parecerles poco pues por la noche siguieron con el tema después de haber socializado algo privado que bien podía haber quedado entre ellos.

¿Cuál fue el reproche de Vitín a Yoli? Pues él se siente engañado porque cuando el otro día le preguntó si había alguien de la casa que le llamase especialmente la atención la respuesta fue negativa. “Alguien te gusta, nos hemos dado cuenta la gente”, decía Vitín. Se refería a Jonathan, que el día anterior daba calabazas a Yoli aunque tal vez ella no llegó a enterarse. Las cocineras van a poder cocinar crema de calabaza para todos porque están empezando a tener excedente de producción en la casa. A ver si Vitín puede pasar la bola, porque si el martes era el primo quien le repartía a Yoli, ayer esta hacía lo propio con el madrileño. Añado el 'Un, dos, tres... responda otra vez' a la lista de programas de televisión que esta edición parece estar homenajeando.

Vitín fue dando a cada minuto nuevas razones para pensar que no se puede caer más bajo. De momento, comenzó diciendo: “Soy tan bueno que no me gusta hacer sufrir a nadie”. Cosas así dejan sin palabras al más pintado. Siguió luego diciendo que en la casa nadie se correspondía con su perfil, como si fuera el jefe de personal de una empresa en busca de cubrir cierto puesto de trabajo. “Ya dije en el ‘confe’ que ninguna de vosotras erais mi perfil para nada, pero si había alguien que tenía que destacar algo eras tú”. Solo con esto hubiera merecido que Yoli le hubiera dado puerta acabando la conversación. De manera que viene a decir que ninguna chica le llama la atención, pero teniendo que elegir, si acaso, se decantaría por Yoli. Menos amable y más desconsiderado imposible.

Llegó Vitín a reprocharle que se había dejado crecer la barba porque un día le había dicho Yoli que le quedaba bien. No soporto que la gente presuma de la edad que tiene, como hace este chico contrastando sus supuestamente experimentados 30 años a los 20 de Yoli. Ahora bien, escuchando sus argumentos es que directamente me parece que en su caso la edad cronológica no se corresponde con la mental. Parece un crío de 10 años. “Para mí, lo único que pido en esta casa es que no se me mienta”, decía Vitín. Pero vamos a ver, ¿por qué diablos va a tener Yoli obligación de decirle quién le gusta o quién no?

Yoli lo dijo con tanta claridad como acierto: “Eres un picado”. Pues sí, aunque yo diría más: se muere de celos y envidia porque ya no le pone la pierna encima a él y sí lo hace con Jonathan, e incluso con Hugo. Si el día anterior era Yoli quien reclamaba el cariño de Jonathan, ayer fue Vitín quien hacía lo mismo con Yoli. La diferencia es que ella amenazaba con aflojar su cariño hacia el primo y Vitín hablaba de suprimir los suplementos. Se refería a dosis extraordinarias de cariño, y de hecho por la noche cambiaba el término “suplementos” por “extras”. Su oficio de comercial le hace hablar de sentimientos como si fuera un quiosquero de prensa o un vendedor de automóviles.

Lo de menos es el lenguaje utilizado, en este caso es más preocupante que ese lenguaje enmascare acusaciones que pintan muy mal. No quisiera parecer exagerado, pero todo el tiempo me pareció entender que Vitín pretendía sugerir que Yoli es una fresca porque duerme hoy con uno y mañana con otro. “Yo con mis amigas no duermo”, decía. Pues bien, Yoli sí, ¿pasa algo? Por la noche discutieron largamente de esto, con participación de Omar e incluso de Loli, que está de oyente en esa casa, lo cual demostró anoche ocupando un palco junto a Mayka, como esos dos abuelos de humor ácido del ‘Muppet show’. En un par de ocasiones las hermanas intervinieron desde la privilegiada butaca donde ellas siguen el espectáculo. También he de decir que no prestan mucha atención, por lo cual apenas se enteran de lo que está pasando alrededor y hasta les ha costado más de una semana aprenderse el nombre de algunos compañeros.

“Voy a estar más distante contigo, no te voy a dar besos ni abrazos”, advertía Vitín. Hasta ahí no muy distinto de lo que le había dicho Yoli a Jonathan el día anterior. Ahora bien, de nuevo había una diferencia fundamental. Porque Vitín acompañaba su advertencia a una amenaza en toda regla. Si en tres meses Yoli no se lía con nadie en la casa pensará que no le ha engañado, pero si en cuatro días está con algún chico entonces tendrá claro que mintió a su pregunta. De manera que no da opción a que la chica no tenga las cosas claras hoy y las pueda tener mañana.

Vitín se esmeró ayer en cavar su propia tumba virtual como concursante de Gran Hermano 15. Creo que llegó a cavar tanto como para que en ese hoyo pueda haber sitio para él y su amigo Omar, aunque este y Paula tienen su propia fosa común en la zona reservada a los concursantes falsos, como contaba antes. Todo su planteamiento es un despropósito enorme. Alguien debería preguntarle si considera que su amigo Omar hubiera dicho que era Paula la chica que destacaba para él, utilizando su propio lenguaje. Porque muchos vemos claro que se lio con ella porque le tocó el culo una noche y hubiera entrado igual al trapo con cualquier otra, incluso la propia Yoli. ¿O acaso no piensa que Paula es también una fresca por tardar tres días en formar pareja en la casa? Lo mismo es aplicable para su amigo y compañero en el concurso, que el otro día decía a Paula "eres el amor de mi vida", pero ayer confesaba que no está enamorado de ella. Solo de las cámaras, añado yo.

Ese tufo machista que desprende Vitín, detectado también en Omar, no sería más que una parte de su personalidad si no estuviese perjudicando a Yoli como lo está haciendo. Ayer la fue dejando mal durante horas, hablando primero con Fran (que se cubrió de gloria también) y luego con el resto del grupo, para terminar algo alterado con Alejandra poco antes de recuperar la conversación con la propia Yoli. El mensaje a lanzar es que va de cama en cama, tonteando con unos y otros hasta que termine decidiendo con quién se queda. No creo que sea así, y aun si lo fuera no encuentro nada malo en ello. Yoli no ha hecho absolutamente nada para que Vitín pudiera ilusionarse. Evidentemente, no cuento lo de dejarse barba de dos días. Ridiculeces las mínimas. Gracias.

Si todo esto ha sido una maniobra de Vitín para intentar forzar la nominación a las primas, sospecho que le ha salido el tiro por la culata. No sé si habrá podido influir en los planes nominatorios de alguien en la casa, pero tengo claro que Yoli suma puntos entre la audiencia de forma inversamente proporcional a cómo los está perdiendo Vitín. Dije ayer que este concursante tiene perfil (como a él le gusta decir) de manipulador y lo mantengo. Por eso creo que, fuera o no su intención primera, ayer aprovechó para intentar perjudicar todo lo posible a Yoli. Ya fuera por ser víspera de nominaciones o como consecuencia de estar despechado al creerse desplazado por Jonathan en la carrera por la conquista de la prima rubia. O sea, por estrategia o por celos.

No seré yo quien de consejos a nadie, pero hubiera ganado muchos enteros un Vitín que se confiesa ante Yoli con generosidad, sin acusaciones ni amenazas. Nos hubiera conquistado si se pone delante de ella y le dice “tú me gustas y estoy sufriendo un poco porque sospecho que puedes terminar enrollada con el primo”, y aún así le desea que haga lo que dicte su corazón, le da un abrazo e incluso le pudo decir que seguirá dejándose barba de dos días por si ella se lo piensa mejor. Luego podría haber evitado los comentarios a los demás, y en caso de contar algo sería siempre para defender a Yoli, evitando a toda costa comentarios machistas que la puedan dejar en mal lugar. Así sí, ¿ves? Así sí.

Ni siquiera pido que le hubiese confesado a Yoli su nominación del jueves pasado. Pero tampoco hubiera estado mal que en lugar de dejarla a ella por mentirosa reconociera que no tuvo los reflejos para defenderla ante lo decidido que estaba Omar a darle sus puntos. Ya sé que no está obligado a hacerlo porque eso es parte del juego, pero manda narices que luego se atreva a hablar de mentiras.

De forma que el deporte preferido ayer en Guadalix fue machacar a Yoli y hacerle creer lo que no es. Suerte que ella se mantuvo en sus trece y siguió manteniendo hasta el final que ella duerme con sus amigos, incluso teniendo pareja, lo cual pareció escandalizar a Omar, e incluso a la Omaíta adivina, que no adivinó una mierda de todo lo que iba a suceder ayer. Omar pronunció una frase que hacía al menos dos décadas que no escuchaba: “Se confunde la libertad con el libertinaje”. Solo eso ya da idea de lo cromañón que es el personaje. Al final la más moderna y evolucionada va a ser la del pañuelo.

La noche fue intensa, mucho más que las precedentes. Tras el juicio a Yoli vino un nuevo episodio en la guerra particular que mantiene Xamy con Mayka. No pudimos verlo, pero algo nos enteramos porque Xamy encontró dentro de la casa alguien a quien intentar contárselo. “Yo pertenezco a otro planeta”, decía Azahara, y no le faltaba razón. Más que otro planeta sucede que mientras todos llevaban horas en el jardín ella permanecía sola tumbada en la cama. Y cuando Xamy fue con su rollo primero sugirió que se cambiase de habitación, para no coincidir con Mayka, luego la mandó a que se hiciera un té y no paró de insistir en que era el ‘súper’ a quien le debía de contar sus rollos, dicho de manera un poco más delicada. Le faltó decir que la dejase un poquito en paz.

Moleskine del gato

Apuesto a que Vitín compraría esta camiseta con la leyenda “La que no folle que no entretenga”. Al final, creo que es la conclusión más acertada a su postura, según demostró ayer.

El día que en Guadalix se volvió a cocinar un bizcocho (¡qué recuerdos!) terminó con cálculos de nominaciones. Tras el polvo dedicado, Hugo dejaba de mimetizarse con el mobiliario mostrando que tiene en la cabeza todo un nominator. ¡Menuda sorpresa! Luis no quería nominar esta vez a Azahara y tampoco le vi muy dispuesto a darle puntos a las primas. Omar y Paula, sin embargo, las tienen en su principal punto de mira, aunque ella dudaba entre Xamy y los primos para su otra nominación. En su teoría, ambas nominaciones son baldías porque Xamy sale fija y los primos seguro que no. Ya veremos.

Esta noche tenemos una fiesta. Se trata de la gala donde nominarán por segunda vez y, además, entrará el repuesto del Papirrín. No sé si será chico o chica, puede incluso que una pareja. Será Mercedes Milá quien nos habrá de sorprender, como es costumbre y debe ser. No hay que perdérselo.