El grupo de Belén sigue dando guerra

telecinco.es 24/02/2015 09:27

Tras las expulsiones de Sandoval y el torero, el grupo de Belén no ha tirado la toalla y aún espera resurgir de sus cenizas, cual ave Fénix. La táctica para ello es intentar dividir al contrario. No sé si han descartado del todo captar a Coman, quien sigue con problemas para definirse, esperando interpretar la decisión de la audiencia cada jueves para ir decidiendo su estrategia. La campaña contra Coman sigue su curso, y ahora le acusan poco menos que de ser un pulpo con las chicas, y a estas unas consentidoras. Ese es el nivel.

El otro objetivo de Belén es Chari, a la que ayer recordaba su expulsión disciplinaria en otro reality donde había concursantes de varios programas y Chari entró junto a Rubén. Lo de sacar los trapos sucios del pasado supongo que solo vale para los demás, porque dudo mucho que Belén dejara pasar así como así algo parecido sobre su propia persona. Se montaría la mundial, el acabose, la ‘repanpanocha’ en bicicleta. ¿Cuál puede ser el próximo objetivo de Belén? Creo que pueden intentar debilitar al enemigo captando a alguno de sus miembros. Una vez visto que Ares vuelve a deshacerse en elogios a Belén, y con la tranquilidad de tenerla medio en el bote, ahora pueden ir a por Santi, que esta madrugada parecía la mejor amiga de Ylenia.

Es fácil malinterpretar las actitudes de Aguasantas por algo que explicaba ella misma ayer. No le gustan los conflictos, huye de ellos como de la peste, y eso la hace aparecer como poco comprometida. Hasta ahora no le hemos visto ninguna deslealtad, por lo que peca más por omisión que por acción. Anoche Ángela apuntaba a la posibilidad de que intentasen captar a Santi y se equilibrasen de nuevo los grupos. Si la expulsada fuera Ares y no Belén, asestarían un duro golpe al grupo poniéndola de su lado y, de nuevo, serían mayoría. Tres contra dos (Ángela y Chari), más un Coman que solo el destino sabe hacia donde tiraría.

Ayer tuvo Aguasantas un detalle de sinceridad muy apreciable, que me dejó bastante frío. En el salón discutía Belén con Chari, mientras que Ares charlaba con Santi en el jardín. Ambas están pendientes de lo que pasa dentro, pero siguen con lo suyo. En un momento dado, Ares dice: “Deberíamos ayudarlas”, y la respuesta de Santi sorprende por su sinceridad y contundencia: “Amiga… no te he ayudado a ti..." Esto enlaza con lo que ella misma cuenta sobre su tendencia a evitar los conflictos. Para vivir tranquilo es posiblemente una buena opción. Sin embargo, como concursante de Gran Hermano no es la mejor de las opciones. Nada da tantos réditos como aprovechar bien un conflicto. Santi todavía tiene tiempo para dar un golpe en la mesa y demostrar que puede hacer una excepción a una postura vital que tiene tan asumida. Tanto que no duda en sincerarse sobre ello con su amiga.

La bronca de la casa, que afectaba principalmente a Belén y Chari, era una de tantas discusiones bizantinas que no conducen a nada. Una más de esas situaciones curiosas en las que Belén da una extraordinaria importancia a algo, haciendo un mundo de lo accesorio, para al final acusar a los demás de estar exagerando la transcendencia de una tontería. Lo hizo la gloriosa madrugada de las ‘cocretas’, por poner un ejemplo cercano y conocido. La pregunta de Ares tenía su carga maliciosa, pero en un tono de chanza y buen rollo, sin abandonar la sonrisa en ningún momento.

No hubiera sido para tanto si Belén no hace un mundo, aunque luego se quejase precisamente de esto. A Belén no se le puede decir nada. Hágase la prueba y dígase a Belén que no se le puede decir nada. Entonces ella demostrará sin darse cuenta que es cierto. La siguiente prueba sería quejarse delante de Belén de que grita mucho, pero nadie se atreve a decírselo por miedo ya que no se le puede decir nada. Es posible que entre entonces en la madre de todos los bucles, un vórtice que la mantenga suspendida en el aire mientras, por supuesto, responde gritando que a ella sí se le pueden decir las cosas. ¿Vale?

Chari dijo que alguna gente tenía miedo a Belén. No quiso precisar ni siquiera si se refería a dentro o fuera de la casa, a pesar de que se lo pidió Belén, a quien no sentó ni medio bien el comentario. Es tan cierto y tan evidente lo que dice Chari que casi da reparo explicarlo, más aún intentar ejemplificar sobre ello. No obstante, me resisto a dejar de recordar a su principal escudero ahora mismo, la ‘miniyo’ que Belén considera una pequeña reproducción de sí misma, en las primeras semanas de encierro. Entonces se disculpaba con Olvido en el jardín, y más tarde afirmaba que no se atrevía a contárselo a Belén por miedo.

No solo Chari habla de miedo, aunque ayer nadie se atrevió a sincerarse con Belén reconociendo las cosas como son. Ares y Santi ya estaban en el salón y esta última lo dejaba caer: “Yo miedo no, pero siempre he dicho que te tengo respeto”. Estaba botando la pelota, pero Belén seguía en su bucle sin hacer caso de nada. Hubiera ganado puntos Ylenia si le habla claro a Belén. Con su silencio no hace otra cosa que darle la razón a Chari, pero esto Belén no lo sabe.

Ylenia es ese tipo de concursante que no para de presumir de decir todo a la cara, como si esto fuera algo bueno en sí mismo. En su caso, ya no es cuestión de que sea bueno o malo, evitable o inevitable, es que simplemente es incierto. Donde Ylenia se desahoga es en el confesionario, y está en su derecho de hacerlo. Allí se muestra más choni y más macarra que nunca, salvo cuando toca machacar a Coman, uno de sus ejercicios recurrentes preferidos. Se las calla delante de sus compañeros y las suelta en el ‘confe’. No es mala costumbre, pero muy distante de lo que ella misma presume.

Que Ylenia acuse a casi todos los demás de estar haciendo un papelón en la casa no tiene otra explicación que esté presuponiendo en los demás aquello que ella misma hace. Ayer seguía vanagloriándose de haber sido tan lista como para descubrir el engaño del cubo de la prueba. Una prueba que está perdida por su culpa, aunque posiblemente también lo hubiera estado por acumulación de errores. Hemos visto a Belén e Ylenia deshaciendo fragmentos de cubo sin poder hacerlo, y no se puede justificar con el desconocimiento de las reglas porque Belén lo ha seguido haciendo una vez había sido advertida de ello.

De entre los errores de prueba, nada tan fuerte como que ayer Belén decidiese sentarse sin haber sacado los dos cincos. Tenían que mantenerse todos de pie hasta que sacasen dos cincos en los dados. Según lo fueran consiguiendo se irían sentando, teniendo cuidado dónde lo hacían porque en caso de volver a levantarse tendrían que volver a sacar los dos cincos para poder sentarse de nuevo. Belén hizo caso omiso y tras varios intentos se sentaba, dejando estupefactos a algunos de sus compañeros.

Sobre las misiones del cubo, ignoro si habrá alguna más, después de los dos éxitos del pasado jueves y el fracaso del domingo. En el relato que vimos ayer de lo sucedido en torno a esto faltó lo que hizo Ylenia durante los minutos que pasan desde que se levanta para reunirse con Fede hasta que vuelve al salón. Efectivamente, Fede se quita el micro porque va a entrar en la ducha tras salir del cubo, pero si el ‘súper’ le advierte que se ponga el micro es porque siguió hablando tras quitárselo. Eso es lo que me gustaría saber. ¿Qué dijo Fede sin tener el micrófono puesto?

A falta de ver lo que pasó entre Ylenia y Fede, solo sabemos que algo dijo este sin micrófono, por lo que fue advertido por el ‘súper’. Son hechos, no conjeturas ni actos de fe. Si se quiere que haga un acto de fe puedo hacerlo. Supongamos que Fede no le dijo nada a Ylenia, está claro que ella se convenció de que lo del cubo era mentira justo en ese momento. Ya dije ayer que ya fuera por un gesto o una palabra de Fede. Luego lo justifica diciendo que lo ha visto en la cara de Ares, pero el que sonreía sin saber qué decir era Fede.

Respecto al argumento de que estando todavía dentro ya habían dudado basta con recordar lo que pasó el jueves pasado para darse cuenta de que siempre dudan. Es imposible que en esa casa no se hagan conjeturas sobre una cosa y la contraria, manejando todo tipo de posibilidades, hasta las más disparatadas. Sin ir más lejos, el domingo Santi parecía muy convencida de que hay otra casa. Pensaba eso después de que Ares le contase que les había dado la comida a ciegas Olvido. ¿Así que otra casa? Les duró poco la conjetura, aunque si existiese tal cosa dirían luego que lo habían adivinado.

El jueves todos dudaron. Escucharon risas, lo cual les hizo sospechar. Incluso Belén llegó a decir que igual estaban comiendo caviar y marisco. ¿Es la Esteban una nueva pitonisa? ¿Peligra el negocio de Sandro Rey? Evidentemente no, solo que cuando se manejan mil y una conjeturas siempre hay alguna con la que se acierta. Lo del domingo no fue nada diferente a lo que había pasado el jueves. Los que no entraron al cubo hacen todo tipo de suposiciones. Hacía falta que al salir los de dentro parecieran creíbles. No creo que sea disparatado pensar que, tras haber acreditado Ares y Chari su capacidad para el engaño (“me da miedo que mientan tan bien”, llegó a decir Fede después), fue Fede quien falló esta vez. Como decía ayer, basta con ver su desgana y su desidia sin fin para comprobar cuál de los tres fue el que menos en serio se tomó esa prueba.

Ángela merece un premio a la paciencia. Y se lo deberían dar ya mismo. Si Ylenia nos habla a muchos como a Ángela creo que la cosa iba a terminar fatal. No comprendo el desprecio con el que Ylenia se dirige así a algunos de sus compañeros. Si miramos sus ‘confes’ y evitamos fijarnos en sus tics y esa peculiar entonación suya, comprobaremos que parece estar permanentemente amargada y peleada con el mundo. Fede está cada día más manejado por ella, lo cual explicaría que se haya apuntado al intento de derribo de Ángela. Si lo que pretendían era sacarla de quicio lo llevan ‘clarinete’.

No lleva razón Fede cuando cree que Ángela quiere sugerir que él no ha hecho bien la labor en la cocina por recomendar que se encarguen de esa labor tres personas, en lugar de una. Lo que pretende Ángela es repartir el trabajo no solamente para mejorar el resultado sino para reducir el esfuerzo. Cualquier cosa mejor que ver a gente tocándose el área genital a dos manos durante todo el día. Sería el caso de Ylenia. Por eso sobra el gesto de Fede enseñando la cocina limpia y recogida tras haber cocinado junto a su chica, solamente dos personas. Estoy convencido de que si eso mismo lo dice Belén en lugar de Ángela hubieran dado palmas con las orejas.

Moleskine del gato

Anoche hubo actualización de los porcentajes ciegos. Raquel Sánchez Silva nos dio a conocer los nuevos, donde aparte de que el más votado aparece a la derecha en lugar de en la izquierda, las diferencias se van acortando poco a poco. Las cosas están así: 57,9 %, 34,9 % y 7,2 %.

El jueves Fede defendió boicotear la prueba (cosa que terminó haciendo) argumentando que tenían comida de sobra, en lo cual le apoyó Ylenia, pero ayer esta misma concursante afirmaba que pasarán hambre si no la pasan. ¿En qué quedamos?

Y dejo cartelera, con Ángela en su papel de cocinera del presidente, en este caso de Guadalix.

[Cartel por Montse Juanilla]