Irma Soriano humillada, despreciada, ignorada y pisoteada

Irma llora

Analizar ‘realities’ es para el gato tan satisfactorio como formar parte de ellos para sus concursantes. El placer de ver frente al de ser visto.

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Irma ha sido humillada. No podemos permitir que esto suceda. La afrenta ha sido materializada a modo de pisotón o puntapié, la propia protagonista no sabe precisar. Si esto fuera un atestado policial habría de ser obligada a elegir una cosa u otra, pero como no lo es debe ser que da igual. Solo ella se ha enterado de lo sucedido, pero aun así se ha sentido humillada públicamente. Bueno, se ha enterado ella y toda la audiencia que sigue el programa y vio ayer el resumen de la tira diaria que emite Divinity. Lo recomiendo. ¿Cómo no iba a llorar en el ‘confe’? Lo raro es que no haya reclamado la atención de los psicólogos. ¿Qué digo psicólogos? Igual debería ser atendida por abogados. La humillación del pisotón, o lo que diablos fuera, viene precedida del desprecio. Irma se ha visto ignorada. ¿No es para llorar?

El responsable de todas estas afrentas a la presentadora es Toño Sanchís. Ya lo dije ayer: morralla, chusma, quincalla, desecho. O sea, escoria, ¿por qué no decirlo? Un personaje marginal que ha usurpado su sitio en el mundo de la fama a otros más ilustres. Otra afrenta. El principal pecado de Toño ha sido en este caso el pisotón o puntapié a Irma. Juego sucio por debajo de la mesa. Tejemanejes ocultos, pura corrupción. ¿Por qué lo hizo? Es muy sencillo de explicar. Voy a ello, oye.

En la mesa se hablaba de un programa televisivo exitoso emitido por otro canal. Ella mencionó el canal, competencia directa de esta casa. Debe ser que Toño se cree dueño de Telecinco, intentando evitar que Irma haga publicidad de la competencia. ¿Dónde ha quedado la libertad de expresión? Irma la reclama para poder mencionar canales y marcas. La Declaración Universal de los Derechos Humanos debería recoger el derecho a mencionar marcas comerciales en la tele. Eso haría este mundo más justo.

A este hecho que relato Irma le añade que Toño la desprecia con el látigo de su ignorancia. Antes se dirigía en privado a ella con frases embaucadoras de oscuras intenciones, como: “¿Qué tal estás, bombón?”. Sin embargo, en la casa la ignora, ya no le importa si está bien o no, ya no la llama bombón. Es para entrar en una profunda depresión, ¿no me digas que no? Por eso Irma, mi Irma, nuestra Irma, la dulce Irma, llora desconsolada en el ‘confe’. Tiene derecho a mencionar el canal de la competencia porque lo arrancó ella con sus propias manos y su esfuerzo. Y ni se le caló, ni nada. La historia de esa cadena no hubiera sido la misma sin ella. Todo habría sido más triste. Si cabe.

Irma

Bueno, ahora analicemos con un poco de cordura este episodio, a mi juicio importante para entender lo que está pasando en esa casa. De todo lo dicho, lo único que no le perdono a Toño Sanchís es que llame “bombón” a Irma. Ni a Irma ni a nadie. Por ahí no paso. Todo lo demás es una fruslería al lado de ese “bombón”, que tan clavado parece tener Irma Soriano. En realidad, es todo una tontería de dimensiones cósmicas. Pura demagogia de una Irma Soriano sobreactuada que no arrancó ningún canal de televisión porque el programa que presentó había tenido antes otros dos presentadores. A saber: Mayra Gómez Kemp y Ramón García (sin capa). Ese canal, que yo no mencionaré porque no me da la gana, lo arrancó Miguel Ángel Nieto y un mensaje del rey. Partiendo de este detalle sin importancia, todo lo demás es un auténtico despropósito.

Si Irma hubiera estado atenta a la lectura de las normas de esa casa sabría que no deben decir marcas comerciales. Es una medida para la que otros concursantes de distintas ediciones han encontrado una solución absurda, que no termina de solucionar el problema. La solución consiste en decir la marca parcialmente. De esa manera cierta tienda de ropa se convierte en “Bers”, una gran superficie es “Merca” y el fabricante de teléfonos de la manzana mordida es “Ap”. Cualquier espectador que viva conectado a este mundo sabrá identificar fácilmente las marcas detrás de estos nombres acortados. Por tanto, están haciendo la misma publicidad que si dijeran el nombre completo. No entro a valorar la regla, solo recuerdo que los concursantes no pueden decir marcas, de igual modo que la cerveza de la propia Irma en esa cena lleva una pegatina tapando su nombre.

Irma apela a la libertad de expresión para poder hacer publicidad. O sea, le debe parecer razonable que el equipo del programa se deje los cuernos poniendo etiquetas que tapan la marca de todo, pero ella pueda hacer lo que le venga en gana. El toque de Toño bajo la mesa advierte a Irma de que no debe hacer publicidad, mucho menos de la competencia. Hablar de humillación es manipular demasiado. Otra cosa hubiera sido que hubiera reconvenido su actitud de forma pública. Pero, ¡por el amor de Dios! si solamente le da con el pie para que deje de nombrar el canal de la competencia. En infinidad de ocasiones he visto a concursantes advirtiendo a otro que no se pueden decir marcas. Si Irma fuera tan seguidora del programa como presume ser lo habría visto también. Pero claro, la primera noche ya dejó claro que es mentira cuando preguntó dónde estaba el otro baño. “Tiene que haber otro más grande”, decía contrariada. Diecisiete ediciones convencionales, cuatro VIP (antes de la presente), un reencuentro, una revuelta y mil batallas libradas en esa casa. Pero Irma no sabe que solo hay un baño. Siempre fue así.

De forma que solo Irma se entera del toque bajo la mesa de Toño, a pesar de lo cual se considera humillada. ¿Humillada? ¡Por lo más sagrado! Partiendo de esto no me puedo creer todo lo demás. Hasta pongo en duda que la llamara “bombón”. Sobre el supuesto desprecio de la ignorancia decir que cuando esto sucede llevaban apenas 24 horas en la casa. Me parece precipitado que nadie pueda valorar eso en otro concursante. Pocas horas y demasiadas emociones, me parece a mí. Otra cosa es que la señorita Soriano (así la llamaba Hermida y no puedo evitar que esto venga siempre a mi memoria), por lo que fuera, quiera acuchillar a Sanchís y tenga urgencia en hacerlo cuanto antes. Ella sabrá por qué.

Bebé

Esta es la misma Irma que ayer acunaba un trozo de manta como si sujetase entre sus brazos un bebé. La misma que calienta agua y se la lleva a Terelu para que esta pueda desmaquillarse a gusto. La que no ha parado de hacer la pelota a la Campos desde que entrase el pasado martes. Le debía urgir comenzar ella misma la operación limpieza de la que hablé ayer. Cuando veo que algunos plantean el dilema del marginado no puedo evitar pensar que es idéntico argumento al utilizado desde siempre ante cualquier marginación. ¿Están marginando a Toño y Alejandro o se marginan ellos mismos? Suena demasiado a algo conocido y repetido miles de veces. Son ellos los que se marginan, no se integran en la sociedad, quieren seguir sus costumbres sin adaptarse a las que ven a su alrededor. Son consignas que llevo escuchando desde que era niño.

A pequeña escala y considerando que esto es un programa televisivo de entretenimiento, cosa que a veces se olvida (yo el primero), el planteamiento respecto a la situación de Toño y Alejandro (con Tutto en medio, de cuerpo presente) es ese mismo. Pensé que no quedaba duda cuando el martes los dos líderes elegidos por Terelu elegían componentes para sus respectivos equipos. Sergio elegía para el equipo negro a Marco, Tutto, Aly y Elettra. Irma formaba el equipo blanco con Alonso, Ivonne, Aless, Daniela y Emma (un componente más). Quedaban Toño y Alejandro, que no habían sido elegidos por nadie. Una vez el ‘súper’ prohibió que se echase a suertes a qué equipo iba cada uno de estos dos apestados, Sergio dio el nombre de Toño. Correspondientemente, Alejandro iba al otro equipo. Está claro: no se marginaron ellos.

Ayer Ivonne y Alonso quisieron avisar a Toño de que posiblemente lo nominarán hoy. Actuaron de forma diferente. Ivonne esperó a que empezase la fiesta para intentar aguársela un poco a Toño. La razón esgrimida en un principio fue por lo de fuera. O sea, que Ivonne estaba dispuesta a nominar a Toño como un castigo por su situación personal fuera del concurso. Es como si Toño la nominase a ella para vengar el sufrimiento de Pepe Navarro y esposa. Cuando Toño le sugirió algo así cambió de repente sus razones, reconociendo que no estaba bien lo que le había dicho. Digo yo que lo malo no es decirlo sino pensarlo. Entonces la razón era porque es un rival fuerte.

Toño dio una respuesta adecuada a Ivonne, y mostró un gran fair play. “Hemos trabajado juntos muchas veces. ¿Has tenido alguna vez una queja sobre mí?”, preguntó Toño varias veces. También lo hizo para acabar la conversación, lo cual remató con su personal “rock & roll”, una sonrisa y un beso a Ivonne. En las preguntas de la acción propuesta por el programa durante la fiesta, Alonso coincidía con Ivonne al anunciar a Toño que posiblemente le nominará por ser su gran rival. Nunca entenderé esta manía de enseñar las cartas en el juego adelantando al contrincante las nominaciones propias. La diferencia respecto a Ivonne es que Alonso lo hizo en público, delante de todo el grupo. Con esto posiblemente persiguiera un efecto arrastre. Es una forma de asegurarse el tiro.

Alienación

No está tan mal jugado por parte de Alonso, aunque me parece un recurso tramposo que no respeta al rival y adultera el propio juego. Pero no digo que sea ilícito. La muestra del efecto arrastre del que hablo se vio poco después. Algunos se subían al carro de Alonso, e incluso Ivonne volvía a replantearse el que había sido su primer argumento hablando con Toño. Aless ya lo había dicho por la tarde, piensa nominar a Toño porque se lleva muy bien con Belén Esteban y tiene muy buen rollo con su hija, de la que no quiere hablar porque es una menor, pero ya la ha mencionado. Mi superconsejito del día a Gibaja es que si no quiere hablar de alguien no hable.

Ir contra los fuertes no es mala estrategia. Dar razones de fuera y avisar a sus nominados es una gran torpeza. Toño también se equivocó ayer. Lo hizo al preguntar a Alonso en la acción propuesta para la fiesta. Como bien dijo este, preguntó sobre sí mismo, lo cual no tocaba. Creo que acierta Alonso cuando dice que Toño ha ido a lavar su imagen y con preguntas como esa sobre si le ha decepcionado o sigue siendo el mismo que conocía parece confirmarlo. También se equivoca con tanto gabinete de crisis con Abad y Tutto, aunque suelen terminar siendo los ratos más divertidos como espectador. Están dando argumentos a los que dicen que son ellos quienes se marginan.

Moleskine del gato

En el juego nocturno, consistente en que cada uno contase su vida en un minuto y se sometiese a las preguntas de cuatro compañeros, destacó Alejandro preguntando a Toño. “¿Te gusta la Navidad? ¿Has decorado el Belén?”, preguntó el músico.

Alonso se rebela contra Terelu. Tras el episodio de Marco preguntando hasta cuándo permanecerá en la casa (lo cual viene a ser un “¿tú cuándo te ibas?”) vino Alonso a cuestionar la pasividad del grupo en la prueba, provocando la respuesta de Irma, líder del grupo blanco y escudera de Terelu. Alonso se negó a emplatar cuando Terelu se lo mandó. “Me niego”, dijo Caparrós, y a la Campos se le debió quedar cara de boniato. De fondo se escuchó a Daniela decir “Bonito, ¿no?”. A Terelu le crecen los palmeros.

Irma y Terelu se burlan de Elettra porque dice que va al ginecólogo todos los meses. “Por si le pegan algo, ¡toma! al ginecólogo cada quince días”, decía Irma, a lo que Terelu respondía: “Claro, porque es muy sana, no deber usar protección y por eso va tanto al ginecólogo”. De arpía a arpía, y tiro porque me toca.

Daniela estuvo ayer “alineando” a Irma. Me decepcionó porque esperaba que terminase haciendo un paralelo. Viéndola a ella primero y luego a Ivonne hubiera dicho que practicaban sexo tántrico, pero va a ser que no. Por cierto, Daniela es el nombre oficial de Alexandra en este programa. Para expulsarla habrá que votar poniendo Daniela, y no Alexandra. Por tanto, este gato desconfiado ha decidido que seguirá llamándola Daniela.

Y me voy, que vuelvo a quedarme sopa como Alonso (hoy sí va la foto).

Sopa