Mónica decide recoger velas, pero no le sale

telecinco.es 27/09/2018 09:29

“A ver si cambio la táctica, no sea que fuera se esté viendo algo diferente”, decía Mónica. Se ha dado cuenta de que puede estar teniendo la actitud equivocada y en la mañana de ayer compartía su inquietud con Makoke. A Mónica parece asaltarla un arrebato de prudencia, algo más propio de Makoke, quien no duda de que aquí fuera se están viendo las cosas de distinto modo. “No paro de decirlo en el confe”, afirma esta concursante. Por esa necesidad de prudencia y moderación, Mónica decide recoger velas. O sea, retirarse o contenerse, desistiendo de su propósito de dejar siempre en mal lugar a Miriam. Ese parecía hasta ahora su principal objetivo, diría incluso que su obsesión. Quiere cambiar de estrategia, pero no le sale.

Estaría bien que Mónica despistase ahora a sus compañeros y después de haberles arrastrado a marginar en grupo a Miriam decidiese destacar de la mayoría, declarándose contraria a su actitud. Vendría a ser como el capitán Araña, que embarca la gente y se queda en España. Este dicho popular tiene su origen en un personaje del siglo XVIII que se hizo popular por una astuta maniobra.

Un capitán de buque llamado Arana (nombre que el vulgo transformó en Araña) se ocupaba de los reclutamientos que el gobierno español hacía para enviar fuerzas a sus colonias en una de las ciudades de nuestro litoral. Cuando llegó el momento de embarcar, este siniestro personaje desapareció sorpresivamente. El capitán Araña embarcó a otros y él escapó, por lo que desde entonces el dicho popular le recuerda para definir tal actitud. “Dícese de los que exhortan a otros a hacer aquello mismo de que ellos huyen”, explica un tratado de refranes y modismos.

Viene a ser lo que tramaba ayer Mónica, aunque a lo largo del día se le fue olvidando el propósito y llegado el momento de la fiesta nocturna intentaba humillar y ridiculizar a Miriam con la complicidad de la frutipandi, grupo dominante en la casa. Lo que vemos aquí fuera es bien sencillo: Mónica aparenta tener cierta obsesión con Miriam, aunque intenta convencernos de que sucede lo contrario. Apenas he oído a Miriam hablar de Mónica. Lo ha evitado en buena medida desde que entró. No se puede decir lo mismo de Mónica, que ayer mismo contaba cómo hace meses pensó en un acercamiento.

Mónica se planteó hacer a Miriam una llamada porque es muy buena persona (Mónica, no Miriam) y debe ser que las buenas personas resuelven sus cosas hablando. Finalmente, decidió recoger velas también entonces porque tiene el alma podrida (Miriam, no Mónica). No me invento nada, lo contaba ayer en el jardín. Mónica quiere un vídeo de su némesis demostrando que no habla de ella. Es curioso eso de pretender no ver algo en un vídeo. Solo se me ocurre que la encierren en el ‘confe’ para ver la grabación de las 24 horas en directo durante los próximos cinco días, diez si quiere visionar por separado cada una de las dos señales.

No podremos disfrutar de la curiosa situación que se hubiera generado si Mónica hubiera hecho realidad el cambio anunciado, dejando al resto de compañeros embarcados en medio del fango que está suponiendo ver como siguen a machete contra Miriam, y van ampliando el cupo de víctimas con todo aquel que osa cualquier acercamiento a esta concursante. Ayer escenificaron un perdón al Koala que posiblemente no creyó nadie. Tony y Suso se mostraron molestos con él por haber dicho que no es parte de la mayoría. Por suerte, el Koala esta vez se mantuvo en sus trece. “Es que yo no soy parte de esa mayoría”, decía.

Es importante el matiz del Koala. No es que no se sienta parte de la frutipandi, sino que no lo es. No sé por qué se ofenden los que se ofenden si no está acusando a nadie de ello. No formar parte puede ser por propia elección o culpa de los demás, que se han mostrado refractarios a admitirle. El que margina siempre lo niega. Tony repetía ayer uno de sus mantras: “Nosotros no te hemos excluido, te has excluido tú”. El Koala, por su parte, repite que no se siente solo ni marginado, simplemente no es “parte de esa banda”. De nuevo un fino matiz: lo llama banda. El Koala empieza a darse cuenta de que no está atado a nada y puede escapar. Digo más, creo que empieza a darse cuenta de que merece la pena decir lo que piensa.

No es fácil apreciar la libertad que uno tiene y lo mucho que libera aprovecharla. Si el Koala dura algo más de tiempo tengo confianza en que lo consiga. De momento, a pesar de haber reculado con frecuencia acercándose a la frutipandi, lo cierto es que no se ha posicionado en la guerra Mónica-Miriam, ni ha participado de la caza contra esta última. No reconocer esto sería un error. Una vez se había marchado el Koala cerró Tony la conversación diciendo de este compañero que siempre se equivoca. Suso remató introduciendo el otro elemento discordante: “Peor es lo de Verdeliss”. El pecado de esta fue decir que trataban a Miriam de forma distinta a los demás, no permitiendo en ella cosas que sí se toleran al resto. El comentario le va a costar alguna que otra nominación.

Para demostrar que no se están portando mal con Miriam ni con el Koala lo mejor es dejarles sin su parte de comida. El martes fue el episodio del chocolate y ayer le tocó a una tortilla de patata. Esta vez fue el Koala quien se quedó sin probar la tortilla. Tampoco dejaron para Aramís. Como decía Miriam, los descuidos siempre van en la misma dirección. Algunos repitieron tortilla y para otros no hubo. El Koala estaba haciendo la prueba en el jardín y nadie tuvo el detalle de reservar su parte. Luego vino la ya habitual escenificación del arrepentimiento, algo que más de uno aprovecha para intentar desmarcarse del resto censurando lo sucedido. Hay muchos capitanes Araña en esa casa.

Aramís quiere que la nominen y así salir sin tener que pagar la sanción correspondiente. No sé si les hace un favor pidiendo ser nominada o todo lo contrario. Lo cierto es que hace algo prohibido en las normas del programa, por lo que propongo soluciones. Debería aplicarse a Aramís una sanción disciplinaria consistente en hacerla inmune. Es como lo de la huelga a la japonesa, que consiste en trabajar más en lugar de dejar de hacerlo. Lo que de normal vendría a ser un premio, ser inmune y que el resto de compañeros no puedan darle votos en las nominaciones, en este caso se convierte en castigo al ser precisamente lo pretendido por Aramís. ¡Asunto resuelto! Lo más curioso del caso es que quiere ser expulsada para luego volver a entrar repescada.

Prometo que no estoy de broma. Aramís es excéntrica en todo, por lo que tampoco me sorprendió tanto la confesión que hizo ayer hablando con Verdeliss. Le consiento casi todo, pero por ahí no paso. No debemos tolerar esta burla a la audiencia, por lo que se hace necesaria alguna reacción que evite tener esta noche unas nominaciones bastardeadas porque una concursante quiere ser nominada para darse un garbeo fuera de la casa y volver luego en la repesca (que ni siquiera sabemos si la habrá). Haz algo al respecto, súper.

Aramís se está equivocando demasiado. Ayer le negaba a Miriam que tras la gala del jueves pasado dijera haberse sentido decepcionada con Mónica. Consiento que recule el Koala porque le veo poco avezado y temeroso. Sin embargo, Aramís está de vuelta de todo y tiene más tablas que nadie. Me cuesta pensar que pueda no recordarlo. Está claro que evita enemistades, lo cual no es necesariamente malo, aunque no venga del todo bien para lo nuestro. Lo malo es que sea a costa de negar algo que hemos visto todos.

Isa se levanta y se va cuando Suso, con su delicadeza habitual y sin querer meter mierda, le pregunta si es más su ‘prototipo’ Omar o Asraf. “Me he negado a contestar porque si empiezo habría tenido que responder un montón de preguntas más”, decía después. Contrasta esta huida con lo contenta que parece y lo mucho que se está esforzando por sembrar el desconcierto y la duda respecto al tema.

Ayer lo llevaba al extremo diciendo que quiere pedir una hora sin cámaras. Andan Aurah, Techi e Isa casi a la pelea de quién es la primera. Aunque Techi niega que lo quiera, lo cierto es que ayer fue a preguntar cómo funcionaba la cosa. “No quiero una hora sin cámaras. ¿Con quién? ¿Para qué?”, le decía a su confidente Isa. Seré cortito, pero no entiendo por qué se interesa si no le interesa. O sea.

Isa dice que quiere una hora sin cámaras, pero no aclara con quién. Solo sonríe dando a todo un halo misterioso como de adolescente primeriza. “Pero eso no significa que vaya a pasar nada”, añade. Es todo tan artificioso como lo de Aurah y Suso, que me da vergüenza suficiente como para evitar hablar de ello. Ayer llegaron a escenificar un enfado definitivo, tras el que Suso daba autorización a Tony y Asraf para ligarse a Aurah. No tengo duda, esas veces que Aurah se tapa el micro (ayer le llamó el ‘súper’ la atención) o ella y Suso hablan bajo la manta, están planificando los próximos pasos del guion de su cutre carpeta.

El gato responde

Propuse ayer en Twitter motes frutícolas para la frutipandi y la respuesta fue abrumadora, lo cual debo agradecer de corazón. Hubo de todo, incluso quien se ofendió porque pusiéramos mote a una parte de la casa solamente. Aparte de que son casi todos, no se inquieten porque también hay para Miriam. Voy a intentar recoger algunas de las propuestas, aunque necesariamente quedarán muchas fuera.

@Tito_Soy dice que Asraf es un anacardo: “Siempre está en los surtidos, pero ¿a quién le interesa? La gente ni se suele saber su nombre”. Para @Loyle06, Makoke es aguacate, porque lleva el hueso por dentro. @ablunach cree que Mónica es un higo chumbo, o mejor chungo. El giro final de su propuesta es bueno. Es @felisamonterde quien hace extensiva mi propuesta y asigna a Miriam el papel de señorita cardo borriquero. @fatimaf01 cree que Darek es un mango maduro, lo cual no parece que precise explicación, aunque @Maripos022 duda entre esta opción y la del rábano.

Sigo con algunos otros. @MarisaVidilla_ pondría doña Carambola a Verdeliss, porque está ahí de ídem. @LadeIver23 ve a Asraf plátano o pepino, por aquello de “más alto que un pino y más tonto que un pepino”. @carmengkktua cree que Aramís es la fruta prohibida del paraíso. Y @Rebonit coincide con otros muchos en asignarle a Techi el papel de señorita nabo, sin que nadie explique por qué.

La cosa se extiende a las verduras cuando @JosekaSpencer recurre a lo más obvio y dice que Mónica es un repollo. Sin embargo, @Diariomujermult prefiere para ella el brócoli, la verdura más odiada por algunos niños y adultos. @amrl1961 ve a Ángel cebolla, si me tocas pica, y a Koala un buen pimiento de Padrón, parece dulce y a veces pica. @luna82561809 dice que Isa es un boniato. Y @SAMadrid8 tiene claro que Suso es el perejil que está en todas las comidas. Pero la opción más repetida para Suso es la de @kalimera76, que lo ve melón.

El broche perfecto lo pone @mariolaleni, para quien son todos unos membrillos.

Moleskine del gato

Escribe Aurah Ruiz (alguien en su nombre, evidentemente) en una de sus redes sociales: “Hola a todos!! Para los que no me conocéis, soy Nyan. Y para los que sí daros las gracias por apoyar a mi madre. A todos esos seguidores que nos han apoyado y siguen haciéndolo desde el minuto 1. Mil gracias. Soy muy pequeñito, pero estoy muy feliz y orgulloso de mi madre”. Al pie de este texto (que he corregido mínimamente) una foto del niño. Ya me cuesta admitir que Aurah cuente su vida en la casa si hay un menor de por medio. Pero con esto veo confirmado que se está utilizando claramente a un menor y su triste drama en provecho de la concursante. Más feo no lo hay.

Esta noche tenemos una fiesta con tintes de drama. Miriam o IsaMiriamIsa. Una de las dos se va a convertir en la primera expulsada de este GH VIP. Para las dos me parece demasiado pronto, aunque veo mucho más recorrido a Miriam. Con Isa se han quemado ya demasiados cartuchos: su madre, su novio y el sursuncorda. Su historia con Asraf es puro artificio, justo lo que menos necesita este programa. Si algo ha mantenido en alto la atención de todos durante estas dos primeras semanas ha sido el enfrentamiento entre Mónica y Miriam. Dejar fuera a una de las dos de forma tan precipitada se me antoja un suicidio, aunque como audiencia somos auténticos kamikazes. Pocas primeras expulsiones me han parecido tan emocionantes.

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