Primeras impresiones

telecinco.es 15/04/2021 08:00

A contraluz, sin poder apreciar bien los matices por la urgencia, quiero hoy recuperar la vieja costumbre de desgranar mis primeras impresiones, que son más bien segundas, sobre los protagonistas de esta edición. A mi favor, he conocido a una buena parte del casting una vez supe que serían concursantes. Es buena elección mezclar personajes famosos con otros solamente conocidos por una parte de la audiencia. No se puede decir que sean anónimos, pero tampoco son populares para la mayoría, lo cual hace que lo vea como una edición mixta, digamos que protagonizada por distintas categorías de famosos. Por tanto, de la mayoría no tenía una opinión previa, y eso hace que las impresiones sean más desprejuiciadas, aunque también comporta un mayor riesgo.

Antes de ir a esto que ya he anunciado me gustaría recuperar algo visto en el programa nocturno del martes y que no tuve ocasión de comentar ayer. Lara vino a llamar “dictador” a Carlos, algo que no sienta bien a nadie. La concursante se excusó luego diciendo que no había dicho eso exactamente. En realidad, dijo que había tenido una reacción de dictador, lo cual viene a ser lo mismo. No es la primera opinión más bien negativa sobre Carlos. Nada más llegar a la isla del pirata Morgan (el lugar antes conocido como cayo Paloma) Antonio llamaba “mandamás”, “intenso” y “protagonista” al que había sido su compañero en el barco encallado. ¿Están justificadas estas opiniones sobre Carlos? Por lo visto, entiendo que la mayoría coincide en verle como un buen superviviente, pero también como un entrometido que quiere manejar el cotarro a su antojo.

El comentario de Lara sobre Carlos venía después de que este hubiera abroncado al grupo porque no había quedado líquido de un coco. Había propuesto dejarlo para dar sabor a la comida, lo cual no es mala idea. Sin embargo, Alexia había avisado de que cambiaba su ración de comida por beber agua de coco. No parece ningún abuso la propuesta, por lo que Carlos debió entenderlo evitando montar un numerito. Pocas cosas hay peores en un reality como intentar manejar al resto desde una posición de injustificada superioridad. Es de las peores cosas, pero también de las más comunes. No se tiene suficientemente en cuenta que dar demasiadas lecciones al compañero está casi siempre penalizado por la audiencia.

A favor de Carlos cuenta que las opiniones escuchadas sobre su persona vienen de dos concursantes polémicos, posiblemente de los más conflictivos de esta edición. A Antonio se le han visto enseguida las costuras del disfraz de cordero. Y Lara ya ha tenido enganchones con Sylvia (también conflictiva) o Carlos, sin que nada haga pensar que no va a seguir polemizando con otros compañeros de aventura. Con todo, Carlos está igualmente enseñando la patita y parece demasiado empeñado en ser el superviviente total, el más preparado, el más listo, quien demuestra tener más recursos. Sin embargo, la pesca parece cosa de Palito, y no parece que su aportación como chef a la alimentación del grupo sea merecedora de premio, por el momento. Mezclar jalapeños de lata con un arroz casi crudo y caracoles también crudos parece algo que se le ocurriría hasta a un niño de primaria, por no decir a un chimpancé.

Que Carlos se tomase como una ofensa la definición de sus modos como dictatoriales es fácil de entender. No es plato de buen gusto que digan algo así de uno. Pero también se corresponde con ese tipo de personalidad arrogante y excesivamente confiado en sus capacidades que le moleste cualquier crítica, por nimia que sea. Suelen sentirse profundamente ofendidos al observar que su entorno no reconoce lo mucho que está haciendo por el grupo. Consideran que estar agradecido debería anular cualquier análisis de la realidad. Por consiguiente, esperan adulación en lugar de crítica. Puedo equivocarme, pero creo que Carlos es de esos.

La misión de los robos que llevaron a cabo con inusitado entusiasmo Melyssa y Sylvia va a traer cola. Melyssa bajó incluso del barco encallado con una sartén llena de lentejas (o eso parecía), es decir, no tuvo ningún reparo en quitarles lo más básico. Y eso que exclamó: “me ha tocado esto a mí, que soy buena persona”. Pues si llega a ser mala se lleva hasta el timón del barco. A pesar de las críticas a Sylvia, creo que fue más fuerte lo de Melyssa. Quitarles cuchillos y la sartén es casi condenarles a morir por inanición. Ya sé que la cosa no llegará a mayores, pero lo cierto es que las dos ladronas ocasionales fueron a hacer daño.

Y voy ya con mis anunciadas primeras impresiones de supervivientes y encallados. Cuando estemos llegando al fin de la edición volveré a leer lo escrito hoy para comprobar hasta qué punto sigo pensando lo mismo o he cambiado mi visión sobre algunos de los protagonistas de esta aventura. Vamos con ello.

Antonio: Intenta sustituir esfuerzo por simpatía y, de momento, le va resultando la estrategia. Se me antoja un personaje esencial porque sus opiniones sobre los demás me parecen invectivas tan certeras como brillantes.

Sylvia: Altiva y malhumorada, parece una presencia incómoda para más de uno, lo cual es muy valioso. Junto a Antonio y Lara formarían el club de los díscolos. Y, por mí, cuanto más díscolos mejor.

Alexia: La sensación de fragilidad que transmite puede terminar convirtiéndose en su mejor arma si la sabe utilizar. De momento ha demostrado personalidad, eclipsada de momento por la arrolladora fuerza de algunos compañeros.

Tom: La historia de su tonteo con Melyssa tiene un recorrido tan corto que ya me empieza a desmotivar. Contribuye a que tenga escaso interés por ver como sigue la historia que ella me parezca inmensamente más interesante y lista.

Olga: Lo que le da interés en el concurso puede condenarla a ser eliminada del mismo pronto. Demasiado poco ha esperado para empezar a hablar de los hijos y la ex de su pareja. Me temo que está tirando piedras contra su tejado.

Carlos: Ha tenido suficiente espacio en el escrito de hoy para que se sepa mi opinión sobre él. Coincido con Lara en que sus modos pueden parecer en ocasiones dictatoriales. Responde tanto al perfil de gran superviviente, candidato al triunfo, que ya me está empezando a cansar.

Marta: Debería evitar aparecer como fiel escudera de Olga. También olvidarse de dar contenido a fuerza de entrevistar a los compañeros. La veo dotada para la supervivencia y trabajadora. Sería una pena que esas tentaciones le hicieran perder lo que gana por otro lado.

Palito: Podría valer para ella lo escrito para Alexia. Puede necesitar la eliminación de algunos compañeros para que emerja su personalidad. Espero poder verlo.

Lara: “Eres follonera, ¿no?”, le preguntó sin complejos Sylvia el primer día en el barco. Lo extraño es que le pudiera ofender la pregunta cuando es su principal interés. También le vendría bien que no fuera el único.

Melyssa: Si a su capacidad de resistencia y buena forma física le acompaña la inteligencia que empiezo a vislumbrar puede convertirse en la más grata sorpresa de la edición. De momento me interesa todo de ella, salvo sus evidentes tonteos con Tom.

Omar: Puede estar equivocadamente confiado en sus capacidades. Su comunión con el entorno playero como surfista poco o nada tiene que ver con la vida de náufrago. Me temo que lo suyo no pase de ser un intento de líder.

Lola: Perseverante y ambiciosa, ahora hace falta que acompañe esas dotes con esfuerzo y suerte. No es un disparate la posibilidad de que vuelva a pegársela a su pareja delante de las cámaras. Lo malo es que se esté planteando elegir para ello a Gianmarco.

Valeria: Bregada en mil batallas, autentica experta en realities y monstruo televisivo. Me da la impresión de que se las sabe todas. Tanto que ya pueden empezar a temerla como contrincante.

Agustín: Coincido con Antonio en que está manteniendo su personaje. Añadiría que se trata de un personaje acartonado y con escasísima naturalidad. Veremos si se termina despojando de él.

Alejandro: Si confirma su lado más intuitivo y perspicaz puede convertirse en una mosca cojonera ideal. Le veo con fuerza, capacidad de resistencia… y poco más.

Gianmarco: Otra vez él. Igual que siempre, para bien o para mal. O sea, mirado por su ejército de fans será para bien, pero no es mi caso.

Moleskine del gato

En la gala de esta noche sabremos el nombre del primer expulsado (guiño, guiño). Pensar que los propios concursantes van a suponer que el elegido volverá a casa es estar demasiado alejado de la realidad. Lo mismo respecto a la audiencia. Puedo ya confirmar que no será así. El elegido tampoco va a ir al barco encallado, lo cual provocaría excesivo tráfico entre habitantes de un lado y otro. Bastante tenemos con que los domingos haya uno haciendo el trayecto contrario. El menos votado irá esta noche a playa Destierro. Ahí comenzara el relato desde la tercera ubicación de esta edición. Por tanto, desde mañana habrá náufragos en la playa del pirata Morgan, en el barco encallado y en esa nueva playa totalmente deshabitada. Además de la expulsión (más guiño, guiño) la gala de esta noche trae nuevo juego de recompensa y de líder, así como una nueva ronda de nominaciones. Me gusta este menú.

Así que hoy tenemos una fiesta. ¡Bravo!

Encuesta