La razón de las dudas y reservas que tiene Adara sobre Rodri

Adara

Analizar ‘realities’ es para el gato tan satisfactorio como formar parte de ellos para sus concursantes. El placer de ver frente al de ser visto.

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Los tres primeros días de edición han transcurrido con parsimonia, como si los concursantes dejasen pasar el tiempo esperando el momento para mostrar lo mejor y lo peor de sí mismos. Ha sido a partir del primer debate de la temporada cuando todo ha dado un vuelco espectacular. La madrugada ha sido puro Gran Hermano, de los que hacen afición. Una larguísima madrugada que cuando comienzo a escribir estas líneas todavía no ha terminado. Todo lo anterior pierde importancia ante el meneo habido esta madrugada, por lo que empezaré dando un repaso por mi memoria anterior, para ir lo más pronto posible a todo lo sucedido más recientemente.

Entre lugares comunes, contradicciones y extrañas supersticiones hemos visto bandearse a los habitantes de la casa durante los primeros días. No ha faltado el “en esta casa todo se magnifica”, ni la autoafirmación de superioridad que conllevan cosas del tipo “nunca hubo una edición como esta”, o “somos el mejor grupo de todas las ediciones”. “Hemos congeniado todos muy bien” es otro de los clásicos, junto al temible “quiero que el grupo esté siempre unido”. Esto último lo decía Fer ante el asombro de Bárbara. “Tú eres muy inteligente y sabes que eso es imposible”, le respondió. Anoche Fer despotricaba contra su amigo Cris, con quien acudió a los castings. Poco le ha durado el deseo de unión eterna. Pero esto lo comentaré más adelante.

Hay una extraña tentación al lugar común en esa casa. Diría que cuanto más irritante y peregrino más fácil es que salga a relucir, tarde o temprano. Desde el “todos somos especiales”, a “estamos aquí por algo”, pasando por “soy amigo de mis amigos” o, entre los varones, ese “me visto por los pies” que debería ser erradicado por obsoleto y reaccionario. Por no hablar de cuando acuden a explicar su personalidad diciendo “tengo mucho carácter”. A ver, carácter tenemos todos, otra cosa es tener comúnmente buen o mal carácter. El más dado al lugar común creo que es Miguel, aunque posiblemente porque en él todo es exceso.

Miguel es capaz de decir una cosa y la contraria sin despeinar su bisoñé. La incontinencia verbal hace que como espectador haya pasado por la fase de detestarlo profundamente y desear que una pequeña desgracia obligase a buscarle un sustituto. El paso siguiente fue pedir que no le echemos todavía porque, pasado el hartazgo primero, reconozco en él un concursante valioso, capaz de liarla parda a la mínima. Anoche hizo lo posible porque todo se liase, y fue colaborador necesario para que esto sucediese. Necesitamos liantes como él, y además es imperativo ver evolucionar la rata que lleva en la cabeza, con la que duerme y se ducha, sin que haya dado muestras de resbalar por su frente todavía. No deseo que eso pase, pero no puedo negar que es una de las posibilidades con las que he podido soñar estos días.

Miguel oculta su edad y dice que por ello le echaran muchos más años de los que tiene, pero la realidad es otra bien distinta. Cuando sale el tema, Rodrigo apuesta que tiene 32, Pol que 30 y Bea da en el clavo de los 31 que realmente tiene. Bea da en el clavo con mucha frecuencia, por lo que tiendo a pensar que no puede ser pura casualidad. Es lista y está entre los que menos me molestan, lo cual no hubiera podido prever al final de la primera gala. Ya le dijo Bea a Miguel que ocultaba algo. Siendo un poco observador hubiera sido fácil colegir que era cierto, viendo lo rápido que intentó pasar a otro tema. Si miras al suelo y haces un comentario peregrino te delatas.

Candela

Mirar al suelo y decir “tiene purpurina el suelo, ¿no?”, es lo que hizo Miguel cuando Alain le preguntó por eso que tenía en su pelo. No creo que fuera la etiqueta con el precio del bisoñé, pero algo raro debió ver. “Es una crema, que me tengo que quitar el jueves”, contestó Miguel. El francés no quedó convencido y quiso insistir en el tema. El repentino cambio de conversación de Miguel le delató. Ya antes había sido Candelas la que observó algo raro en el nacimiento del pelo de Miguel. Tan sencillo que en su particular caso no nace del cuero cabelludo. También dijo lo de la crema, y hasta hizo la cobra para evitar que su compañera le tocase el pelo. Momento de tensión en la cumbre, amigos.

Tengo la teoría de que más de uno sospecha que algo raro pasa con su pelo. Después del episodio con Alain se puso un pañuelo en la frente, tapando su nacimiento. Blanco y en botella, como la supuesta crema. Por no hablar de bromas supuestamente inocentes, como la de Fer ante el comienzo de la primera fiesta, el pasado jueves. “Vamos a tener una fiesta que se te va a caer el pelo”, le dijo, posiblemente aludiendo a su bisoñé de forma claramente gratuita. Y Pol vino a decir, curiosamente también al pobre Miguel: “¿Tú sabes lo que mola follar y que te toquen la calvicie?”. Por lo más sagrado, dejad de hablarle a Miguel de esas cosas. Por cierto, cuando Alain descubrió algo raro en el pelo de su compañero, este acababa de afirmar: “Tengo mucho pelo, gracias a Dios”. Lo que no dijo es que fuera suyo.

En realidad, creo que Miguel no es calvo, solo tiene una frente despejada y se afeita la parte central de su cabeza para poder pegar el bisoñé. Tan sencillo como esto. También creo que aprovecha esa peculiaridad convencido de lo impactante que puede resultar. Lo fue en su vídeo de presentación, y más lo va a ser el día que decida levantar la tapa de la lata de atún y mostrar la realidad. Juega con ello, como Noelia con su virginidad, o Adara con su cara bonita. En su derecho están. Y no le falta razón a Miguel, porque impactante es lo suyo. La prueba es lo mucho que estamos hablando de ello.

Otra cosa es el tema de las supersticiones, en lo cual Bárbara ha superado a todos los demás. Dice que se deben llevar siempre tatuajes impares. Eso obliga a hacerse primero un solo tatuaje, pero luego deben ir de dos en dos siempre. No explica por qué, y lo más curioso es que cuando le preguntan cuántos lleva ella responde que veintitantos. A ver, para conseguir que sean siempre impares se debe llevar bien la cuenta. ¿Qué es eso de veintitantos? No sé si prefiero la superstición del tatuaje, la cual constato que no me afecta, o la de barrer.

Sin ningún matiz, dice Bárbara que barrer da mala suerte. Así, sin más. No es que dé mala suerte barrer por la mañana, o de izquierda a derecha, o más de una vez al día. Nada de eso. Barrer da mala suerte y ya. Ergo, ella no barre. Y, por supuesto, tampoco le deja barrer a la persona que trabaja en la limpieza de su casa. Es tan peregrino todo que me sorprendió especialmente la reacción de una de las chicas. No podría asegurarlo, pero creo que fue Candelas la que respondió de inmediato: “Pues me lo vas a pegar”. ¡Toma, claro! Cualquier superstición que nos evite una labor en el hogar es susceptible de ser adoptada con urgencia. Detesto quitar el polvo y planchar. Por tanto, diré que da mala suerte hacer ambas cosas y así me lo evito desde ya (aunque debo confesar que solamente he planchado un pañuelo de tela y una camisa en mi vida, y ya con el pañuelo estaba cansadísimo).

Baño

Hasta Bárbara, como acabo de contar, ha destacado por algo estos primeros días. Quiero decir que está entre los menos protagonistas en este arranque de edición. Algún otro mejor que no hubiera dado tema de conversación alguno. Pienso en Álvaro, que junto a Pol y Rodri forman los “torpedos”. Primero dijeron que eran “los tres mosqueteros”, pero debieron pensar que eso estaba demasiado trillado. Lo de “torpedos” creo que es idea de Álvaro, lo cual no sé si es suficiente para considerarlo el ideólogo del grupo. Escuchando sus conversaciones de machitos tampoco es ningún honor. Cosifican a las mujeres haciendo una clasificación de las tipo A (Adara), B (Meri) y C (Bea). No llegaron a la Z porque el supuesto ideólogo tuvo piedad del padre de la merecedora de esa clasificación. No tengo palabras.

Los “torpedos” me recordaron a Suso y Muti el año pasado cuando Rodri animaba a que Pol lo intentase con una de las chicas. “¿La meto a esa?”, preguntó el “genéticamente perfecto” (¿?) y Rodri respondió: “Métele a varias”. Ese es el nivel. Aunque hablando de nivel, una advertencia del súper ayer por la mañana fue de lo más demoledora. Les decía que cuando pide que cambien las pilas de la batería de sus micrófonos las cogiesen del lote que pone “nuevas” y no del etiquetado como “usadas”. Luego supimos que Álvaro las había cogido usadas. El nivel, amigos, el nivel.

Anoche durante el debate tuvimos la primera bronca que podemos calificar como tal. Se enfrentaron Meri y Clara por un comentario de esta última sobre que Meri y su amiga Laura no se habían abierto a la relación con los demás. Este fue más o menos el reproche, que terminó en un agrio enfrentamiento con acusaciones mutuas de comportamiento chulesco e intimidatorio. Se equivocó Clara, y ella misma lo reconoció después, dolida porque Meri no había aceptado sus disculpas. Aprecié más chulería en Clara, lo cual unido a que fue su inconveniente comentario el que provocó todo creo que exime a Meri de disculpa alguna.

Antes de esto habíamos conocido dos roces sin mucha trascendencia. A Bárbara le molestó que Fer pidiera que se pusieran a ensayar sin mirar tanto el vídeo de la coreografía que han de hacer, porque si no era imposible que les entrara "en sus cabezas". No estuvo fino Fer, el que empezó pidiendo unión en el grupo y está contribuyendo como nadie a dinamitarlo. Lo arreglaron en el baño, justo antes de comenzar un indecente peloteo mutuo, más falso que la vida de las Campos en su docuserie. El otro pique fue entre Pablo y Adara. Pablo siguió dándole vueltas horas después a una broma aparentemente inocente de la exazafata, que le invitó a mover la cadera en la prueba de baile. ¡Oh, gran ofensa! Visto lo visto, Adara se mostró dispuesta a no gastarle más bromas, lo cual incrementó el enfado de Pablo. Vaya usted a saber por qué.

Pero el ambiente se caldeó de verdad con el juego del “too much” propuesto durante el debate. Consiste en algo tan sencillo como pedir que cada uno elija el concursante más amigo o afín (emoji del dedo hacia arriba), el polo opuesto (emoji del rayo) y aquel por quien siente más atracción (emoji del corazón). Luego se trata de ver las coincidencias resultantes. Hicieron sus elecciones por separado, chicas y chicos, y estas fueron las decisiones de los 17 (siempre en el orden explicado: dedo arriba, rayo y corazón):

Bea > Adara / Álvaro / Rodri

Montse > Pablo / Candelas / Alain

Meri > Laura / Álvaro / Cris

Laura > Meri / Álvaro / Alain

Alain > Cris / Clara / Álvaro

Pol > Álvaro / Pablo / Miguel

Rodri > Pol / Candelas / Adara

Miguel > Clara / Cris / Pol

Fer > Candelas / Bárbara / Cris

Clara > Miguel / Cris / Alain

Noelia > Adara / Meri / Alain

Candelas > Fer / Álvaro / Alain

Adara > Bea / Pablo / Rodri

Bárbara > Pablo / Fer / Alain

Álvaro > Rodri / Candelas / Miguel

Cris > Alain / Álvaro / Meri

Pablo > Cris / Bea / Montse

Bea

No nos engañemos, la coincidencia interesante es la del corazón, tal vez también la del rayo. En el primer caso, coincidieron Pol-Miguel, Rodrigo-Adara y Meri-Cris. En el segundo Fer-Bárbara y Candelas-Álvaro. El juego resultó ser una auténtica genialidad porque provocó la madrugada que ya he descrito como puro Gran Hermano y podría llegar a calificar de épica. Hagamos recuento. Los chicos (particularmente Miguel) recriminaron a Pablo que después de haberle puesto el corazón a Montse lo quitase y se lo pusiese a él mismo. Lo curioso es que le acusan de ocultarse y hacer trampas los mismos que, en su mayoría, se dieron el corazón entre ellos, no sé si para no descubrir sus cartas o por evitar la humillación de no ser correspondidos. Por el contrario, todas las chicas fueron sinceras y le pusieron el corazón al chico que más les puede gustar.

Tan incoherente como el reproche de los chicos a Pablo fue el de Pol a Adara, que puso el corazón a Rodri. Pablo, Cris y Rodri fueron los únicos chicos que le pusieron el corazón a una chica. En el caso de Rodri, de forma recíproca a Adara. El “genéticamente perfecto” Pol vio su orgullo mancillado al no haber obtenido ni un solo corazón. Ninguna chica le había elegido, ni siquiera Adara, con quien debió tener algún momento de tonteo este fin de semana.

Llamativo que Adara no le dijera con claridad que no se lo puso porque no le gusta. En lugar de eso, le siguió dando esperanzas, tanto de palabra como particularmente mediante el lenguaje no verbal. Luego coincidía con Bea en que no le parece ni atractivo. Y gracioso que Pol tampoco le pusiera su corazón a Adara. ¿Qué reclama entonces? Ego herido del “Toro” (así le llaman los otros “Torpedos”), no obstante.

Sigo haciendo recuento de daños provocados por el juego de marras. Después de que Alain le dijera a Clara que le puso a ella el rayo, pero no tiene nada en contra de ella, apareció Candelas para sugerirle de algún modo que ella le puso el corazón al francés. No creo que Alain sea tan torpe de no captar las señales que le envió Candelas. Más bien me inclino a pensar que prefirió no darse por enterado. Por eso le aclaró que nunca se liaría con una chica que tuviera pareja. Mientras tanto, ella le contaba sobre sus deseos de cambiar de vida, vivir en una ciudad distinta, romper con su pasado. Le faltó decirle que incluía cambiar de novio. Y hacerle un croquis también.

La reacción de Candelas fue realmente sorprendente, porque por momentos parecía poseída, arremetiendo contra todo y contra todos. Alain le decía que se calmara porque en ese momento parecía una loca. La sensación de haber salido del frenopático era común en ella y otro concursante. Fer, el gran amigo de Cris, lanzaba sus diatribas contra él ofendido porque no le hubiera puesto a él ni el dedo hacia arriba ni el corazón. La rajada de Fer fue con Clara, a la que no costó nada subirse al carro de la crítica a Cris. “No le veo con juego limpio, va como una avispilla detrás de todos", decía ella. Más que “todos” debió decir “todas”, porque el pulpo Cris no ha dejado de abrazar y sobetear a casi todas las chicas desde el jueves. Por cierto, no le he visto con Noelia, ¿por qué será?

Cris es de abrazo alto, ya tú sabes. El caso es que Fer parecía otro, poseído por la rabia hacia su amigo de hace cinco años. Pronto empezó a airear trapos sucios. “Ya me la jugó en el casting”, decía, porque les preguntaron qué pasaría si solo entraba uno y mientras que Fer rechazaba la posibilidad resulta que Cris afirmaba que no se hundiría por ello, o algo así. Según Fer, su amigo le ha traicionado por estrategia. Fer le puso el corazón y él decidió darle el dedo arriba a Alain, incluso afirmó que su segunda opción era Pablo. Supongo que dejó pasar que le ponga el corazón a una chica, pero reclamaba al menos el dedo arriba.

Parte de razón puede tener Fer en que Cris juega a ganarse a aquellos que no tiene seguros, como le tiene a él. En definitiva, se están jugando que solo quede uno de los dos en la casa. También le doy en parte la razón a Cris, quien sugirió que Fer le había puesto el corazón (no el dedo hacia arriba) a Cris para no ponérselo a Adara, la chica que realmente le gusta. Fernando y Cris habían discutido en el ‘confe’ y no sé si hablaron finalmente más tarde. Sí les vi cruzarse en el baño sin mediar palabra.

Frases 001

Entre todas estas inopinadas reacciones descubrimos a una Laura fantástica, malmetiendo a Bea y Adara porque ambas pusieron el corazón a Rodri. Y no menos maravilloso Miguel contándole a Montse que alguien le había puesto a ella el corazón y lo había quitado después. La madrugada ha sido también importante para ir vislumbrando posibles grupos. Entre las chicas veo a Candelas unida a las amigas de Cornellà, Meri y Laura. En otro bando se estaría juntando un heterogéneo grupo formado por Clara, Bea, Adara y Noelia. Como satélites libres Montse y Bárbara, confirmando su papel de comparsas, hasta el momento.

Y llego al meollo que más apetecía comentar hoy, aunque debo hacerlo casi en modo telegráfico y algo críptico. Lo primero porque ya está quedando esto demasiado largo y lo segundo porque espero una conversación entre los dos protagonistas de los que voy a hablar para confirmar mi teoría. Cuando Adara se entera anoche de que Rodri también le ha puesto a ella el corazón dice que no entiende alguna cosa. El tonteo entre ambos ha sido evidente, especialmente durante la noche del sábado. Noche en la que hablaban en el dormitorio sobre atracción mutua y relaciones. La conversación me pareció especialmente abierta y sin demasiados frenos. Tanto es así, que Rodri hacía una sorprendente confesión.

Decía Rodri en conversación con Adara que sigue teniendo presente a su última exnovia. Y, así a bocajarro, decía que tenía el plan de intentar volver con ella según saliese de esa casa. Adara, a quien le gusta gustar y andar continuamente de tonteo, le caía esta información como un jarro de agua fría. Sobre todo teniendo en cuenta que Rodri no había reparado en tirarle la caña de forma evidente y diría que hasta exagerada. Tanta insinuación e interés no cuadra con los supuestos planes del concursante para un futuro no tan lejano. Tal vez por esto anoche Adara andaba contrariada y decía no entender alguna cosa. La mayor expectación anoche era ver si hablaban. Creo que no pasó, pero habrá de pasar en algún momento. Habrá que andar atento.

Moleskine del gato

Apunte breve de algo que me hizo sonreír. Andaba Pablo por el jardín como un león enjaulado y Álvaro aparece para preguntarle: "¿Has perdido las llaves del coche?". El sevillano con pinta de homeless tiene algún punto gracioso.