Las dudas por resolver en el asesinato de Gabriel Cruz
Informativos Telecinco
13/03/201814:54 h.Sobra explicar porqué al caso del asesinato de Gabriel Cruzo lo han bautizado como Operación Nemo. Una operación con muchísimas preguntas todavía sin respuesta. Por ejemplo, ¿cómo es posible que durante los 12 días de búsqueda no inspeccionaran la finca de Rodalquilar de donde Ana Julia sacó el cadáver de Gabriel?
Tampoco está claro cómo metió, supuestamente, Ana Julia al pequeño en su coche en Las Hortichuelas: ¿lo forzó o entró él de forma voluntaria?, ¿a qué hora ocurrió eso exactamente?, ¿justo después de que el niño abandonara la casa de su abuela?, ¿qué excusa puso ella, también, para salir?, ¿cuánto tiempo permaneció fuera cometiendo, presuntamente, el crimen?, ¿por qué le quitó la camiseta interior?, ¿hubo premeditación? Y sobre todo, ¿por qué pudo haberlo hecho?
Cada día que pasa, cobran más fuerza los celos enfermizos que Ana Julia sentía del niño. Pero, si hay una pregunta que nos desgarra el alma es ¿cómo es capaz un padre de aguantar tanto tiempo viviendo con la principal sospechosa de la muerte de su hijo? Sólo hay una respuesta: porque tenía la esperanza de volver a verlo con vida.