El vuelo procedente de Kuala Lumpur llegó a la capital italiana a las 6.10 y el cuerpo de Simoncelli fue recibido por el presidente del CONI (Comité Olímpico Italiano), Gianni Petrucci, informa 'gazzetta.it'.
Según Petrucci, el padre del piloto, muy consternado y al borde de las lágrimas, no encontraba las palabras al aterrizar en Italia. "El domingo ya nos dimos cuenta de lo mucho que se quería a este chico. Era un niño siempre tranquilo y atento. Ahora estamos aquí para demostrarle el cariño que le teníamos. Ahora sólo hay que rezar y que Dios le tenga en su gloria", apuntó.
El féretro de Simoncelli, que fue escoltado por múltiples trabajadores del aeropuerto, se quedó en el depósito de Fiumicino, donde pusieron una bandera italiana, algunas fotos del piloto, su dorsal, el '58', y la frase 'Ciao, Sic'.
Su padre, Paolo Simoncelli, quiso dar las gracias a la prensa presente. "Gracias, Marco siempre ha estado disponible para todos vosotros, espero que hagan lo mismo. Muchas gracias a todos", comentó al tiempo que se volvía a los aficionados y decía: "Un beso a todos".
La capilla ardiente se instalará en Coriano, municipio donde residía, esta noche. Durante el día de hoy será privada y este miércoles se abrirá al público en el Teatro Comunal. El funeral será el jueves.
Por otra parte, Valentino Rossi se mostró muy afectado. "Marco era un grande y nunca le olvidaré. En estos momentos no he pensando en nada. Hablé con Paolo, nos abrazamos. Tengo muchos recuerdos porque hemos pasado muchos días juntos, entrenando y dedicando el tiempo al motor, nuestra pasión.
'Il Dottore' también quiso negar los rumores sobre una eventual retirada. "Yo no he dicho nada de eso", sentenció a pesar de lo afectado que está. "Sabemos que algo así es una cosa que puede suceder", finalizó.