Julio Iglesias, eternamente joven con 80 años: sus retoques desde su primer 'lifting' con 34

Julio Iglesias cumple 80 años el próximo 23 de septiembre. Que nuestro artista más internacional y el cantante latino más exitoso de la historia se convierta en octogenario es todo un acontecimiento y una gran ocasión para recordar su intensa vida y prolífica carrera musical.

Las televisiones ya preparan homenajes de todo tipo, entre ellos el especial que ha anunciado Telecinco, Julio Iglesias, 80 años de éxitos, en el que rostros de todos los ámbitos como José María Aznar, José Mota o Carlos Latre analizarán la importancia de su figura.

Sin embargo, dicen que el intérprete de Hey o La vida sigue igual no quiere celebrar su cumpleaños públicamente ni participar en entrevistas de forma visible. El cantante lleva cuatro años alejado del foco mediático. Se despidió de los escenarios en 2019, con 76 y desde entonces se muestra reacio a volver a dejarse ver.

Aunque se dijo que la intención del artista era celebrar sus 80 años con vuelta a los escenarios, y Pilar Eyre aseguró que podría ser el artista que estrenara el nuevo estadio Santiago Bernabéu -un guiño a su primera etapa como futbolista frustrada por un accidente de tráfico-, no hay noticias de que vayamos a volver a ver a Julio Iglesias frente a una cámara.

El motivo, según han explicado esta mañana en Es Radio, no serían sus siempre comentados problemas de salud, ya desmentidos, sino su conocida “coquetería”. No le gusta envejecer y prefiere mantenerse en el anonimato antes que dejar que su público vea los lógicos estragos de la edad en su físico. Es por ello que el artista madrileño ha declinado todas las propuestas de entrevistas televisivas que le han hecho en estos últimos tiempos.

“De momento y hasta nueva orden, Julio Iglesias no quiere aparecer ni hablar", señala la periodista Beatriz Cortázar. "Está bien pero es muy profesional con su imagen y no se encuentra como le gustaría encontrarse. Es coquetería llevada a lo profesional, no frivolidad. Él ha supervisado siempre sus portadas, fotografías y entrevistas. Anunció en Madrid que se retiraba y está siendo fiel a su palabra", añade la colaboradora tras hablar con su entorno.

En estos años de parón profesional, en los que vive entre sus casas de Miami, Bahamas y República Dominicana, junto a su mujer, la modelo holandesa Miranda Rynsburger, la única excepción que hizo para dejarse ver fue el pasado 31 de mayo, cuando compartió una fotografía reciente para desmentir los últimos rumores sobre su deterioro de salud. Lo hizo con una imagen, no sabemos si retocada, en la que lucía un bigote en un guiño al que llevaba su padre, el fallecido doctor Dr. Iglesias Puga, alias ‘Papuchi’.

También le vimos hace unos años, en sus últimos conciertos antes de retirarse, en imágenes lejanas sobre el escenario en las que no se apreciaba realmente su rostro:

Como le ocurre a muchos otros famosos con "espíritu de Peter Pan", Julio Iglesias prefiere que el público tenga el recuerdo de él de joven, cuando enamoró a su primera mujer, Isabel Preysler, y decían que su fama y atractivo físico le habían llevado a conquistar a más de 3.000 mujeres, un mito que él desmintió con humor. “Chico, yo con 3.000 mujeres. Toda leyenda siempre está más cerca de la mentira que de la verdad. Lo bonito es que te quieran de verdad”, bromeó.

Lo que el cantante no puede negar es que la importancia que siempre ha dado a su imagen le ha llevado a recurrir a la cirugía estética para luchar contra el paso del tiempo.

De hecho, Julio Iglesias fue uno de los primeros famosos españoles que se sometió a un lifting en los años 70, con solo 34 años, cuando la cirugía estética comenzaba a ponerse de moda en nuestro país, según ha recordado hoy el Dr. José Manuel Gómez Villar, de la clínica Livet, al programa Así es la vida, donde ha hecho un repaso por todos los retoques estéticos que se habría hecho Julio Iglesias a lo largo de su vida.

Según este experto cirujano plástico, por cuyo centro han pasado muchos famosos, Julio Iglesias se habría hecho su primer lifting en 1977, siete años después de su boda con Isabel Preysler.

El padre de Chábeli, Julio José y Enrique sufrió por entonces un caída en un concierto en Cádiz, por el que tuvieron que coserle el labio. Asesorado por su padre, viajó a Estados Unidos para que le hicieran una reconstrucción y aprovechó su paso por el quirófano para estirarse la piel por primera vez.

Quedó satisfecho con este primer contacto con la cirugía estética y decidió hacerse un nuevo lifting seis años después, al cumplir los 40. Entonces, un cirujano de Miami, donde ya estaba instalado, le dijo que para esta segunda intervención debía estar un año prescindiendo de una de sus grandes aficiones, tomar el sol. Julio Iglesias no quería renunciar a su característico moreno y buscó un segundo cirujano en París, donde finalmente le realizaron el lifting.

El Dr. Gómez Villar recuerda la rinoplastia (operación de nariz) que Julio Iglesias se hizo en 1987, aprovechando que pasaba por el quirófano para quitarse una cicatriz en la sien. Su entonces mánager, el fallecido Alfredo Fraile, le dijo después de una serie de conciertos que tenía la mirada cansada. Es entonces cuando aprovechó para retocarse el contorno de ojos, una intervención que “le afectó al nervio óptico y le dejó durante un tiempo sin ver bien, con una mirada de ojos saltones”, cuenta el doctor. “Aquellos cabrones me hicieron un trabajo de mierda”, dijo el propio Julio Iglesias en declaraciones al suplemento Sette del diario italiano El Corriere della Sera.

Por último, en los últimos 40 años, Julio Iglesias se habría hecho retoques esporádicos para “relajar los músculos, sobre todo en la parte de la frente y el entrecejo, o corregir las arrugas (‘patas de gallo’) que se acentúan en la gente que abusa del sol.” En definitiva, pequeños retoques o rellenos para “recuperar el volumen facial que se pierde al envejecer o perder peso”, como ha sido también el caso de Julio Iglesias en estos últimos años. “Si te haces un liftin con 40 años, lo normal es tener que repetirlo con 50 o 60”, añade Gómez Villar.

El experto recuerda la importancia de no abusar de la cirugía estética. “Los retoques estéticos ayudan pero hay que saber envejecer con dignidad, y llevar los años lo mejor posible, tanto por fuera como por dentro, la parte psicológica es muy importante”.

El repaso del doctor por el antes y después de Julio Iglesias ha llevado a la presentadora de Así es la vida y sus colaboradores a confesar los retoques estéticos que ellos también se han hecho. Sandra Barneda ha revelado que, pese a su miedo al quirófano, decidió pasar por él para quitarse “las bolsas (ojeras) que tenía en los ojos por una tendencia genética”.

Antonio Montero ha reconocido haberse hecho un injerto capilar, al igual que José Antonio Avilés, y Suso Álvarez, ha recordado la intervención que se hizo hace unos años para quitarse las bolas de Bichat y resaltar sus pómulos.