La laguna de Gallocanta, entre las provincias de Zaragoza y Teruel, ofrece durante estos meses un espectáculo único y fascinante: la época de invernada de las grullas. Las aves eligen este espacio protegido para hacer una parada en su travesía migratoria.
Llegan en octubre y prolongan su estancia hasta marzo. Este evento mágico atrae a muchos turistas que aprovechan los increíbles amaneceres y atardeceres para ver el delicado vuelo de estas aves. Sólo en las últimas semanas han pasado por este paraje más de 20.000 grullas.
La laguna cuenta con más de 220 especies de aves, entre las que destacan: buitres, águilas, grullas, abubillas y fochas. Gallocanta constituye el enclave más importante de aves acuáticas de Aragón y el segundo de la península ibérica después del Doñana.