De las torrijas a la leche frita: dulces típicos para comer en Semana Santa

  • La Semana Santa es tiempo de descanso, y también de tradición gastronómica, en la que destacan los dulces

  • Las torrijas, los buñuelos de Cuaresma o la leche frita son algunas de las recetas más conocidas

  • Preparar estos platos es muy sencillo y sus ingredientes son muy similares, con la canela como protagonista

La Semana Santa es tiempo de descanso y de vacaciones, pero también de tradición, y uno de los aspectos en que ésta se manifiesta es la gastronomía. Existen distintas recetas asociadas a estos días y muchas de ellas tienen lo dulce como protagonista principal. Torrijas, leche asada... ¿Cuáles son los dulces típicos para comer en Semana Santa?

Dulces típicos para comer en Semana Santa

Nada mejor que una receta dulce para congregar a toda la familia alrededor de la mesa y pasar un rato agradable. Si estos días de descanso están pensando en desempolvar el delantal y preparar alguna receta de Semana Santa, toma nota de algunos de los dulces típicos para comer en Semana Santa.

  • Torrijas con canela. La torrija es sin duda uno de los dulces más típicos de la Semana Santa, y su preparación es bastante sencilla. También lo son sus ingredientes: pan, azúcar, leche, canela, huevo y aceite de oliva bastan para preparar este postre. Deberás empapar las rebanadas de pan en la leche con azúcar y canela, y luego bañarlas en huevo antes de freírlas. Ya solo queda escurrirlas bien y espolvorearlas con más canela y azúcar. Se suelen servir frías.
  • Buñuelos de Cuaresma. Leche, mantequilla, corteza de limón, harina, canela, levadura, huevos y aceite de oliva son los ingredientes de esta receta que resulta algo más complicada que la anterior. Deberás calentar la leche con la mantequilla, la canela y la piel de limón. Antes de que rompa a hervir, retírala y cuélala cuando se enfríe un poco. A continuación deberás agregar harina, sal, azúcar y levadura y mezclarlo todo. Luego, haz lo mismo con los huevos. Esta masa, que debe quedar espesa y brillante, es la que usarás para crear los buñuelos y freírlos en abundante aceite. No olvides escurrirlos bien antes de pasarlos por azúcar.
  • Rosquillas de Cuaresma. Las rosquillas de Cuaresma se preparan con harina, azúcar, levadura, huevos, mantequilla, licor de anís, piel rallada de naranja, azúcar glas, aceite de oliva y sal. Deberás mezclar los huevos con el azúcar, el anís, la mantequilla reblandecida, ralladura de naranja, sal y levadura. Luego añade la harina hasta que la masa se despegue de las manos. Extiéndela y forma tiras de unos 8 cm de largo y medio centímetro de ancho. Con ellas formarás las cosquillas: fríelas y espolvoréalas con azúcar glas en el momento de servir, bien escurridas.
  • Leche frita. Necesitarás leche, azúcar, maicena, cáscara de naranja y de limón, canela, huevo, harina y aceite de oliva. Hierve una parte de la leche con las cortezas y una rama de canela para luego cocerla a fuego suave durante 5 minutos. Retírala y cuélala. Luego deberás mezclar maicena con otra porción de leche, agregar azúcar y añadir estar mezcla al cazo de leche caliente. Cocínalo todo durante 8 minutos a fuego suave sin dejar de mover. Ya solo falta añadir esta mezcla a una fuente cuadrada y dejarla enfriar. Guárdalo durante unas 4 horas en la nevera y corta la mezcla en cuadrados. Ahora, pasa los cuadrados por harina y por huevo, friéndolos en abundante aceite. Espolvoréalos en canela molida y azúcar, no sin antes escurrirlos bien.