Un coche quedó atrapado este pasado lunes tras producirse un desprendimiento de tierra en la carretera LV-9124 a su paso por Castell de Mur en la provincia de Lleida.
Las víctimas Jordi y Ana, naturales de Sant Esteve de Sarga y padres del alcalde de la localidad catalana, situada a 15 kilómetros del lugar donde se produjo el desprendimiento.
Los Mossos d'Esquadra se desplazaron hasta el lugar para tratar de rescatar los cuerpos, aunque las tareas del dispositivo de emergencias se vieron agravadas por el terreno inestable en la zona, informó el Servei Català de Trànsit en un comunicado, quedando suspendidas hasta hoy.
La recuperación de los cadáveres se está complicando por la situación en la que quedó la carretera, que ha quedado cortada al tráfico entre los kilómetros 2,5 y 6, en ambos sentidos de la marcha, y la previsión es que se mantenga cortada las próximas horas.
El Servei Català de Trànsit (SCT) recomienda a los vecinos que no se acerquen a la zona por el riesgo de nuevos desprendimientos.
El temporal se cobra otra vida
Este pasado lunes era localizado el cuerpo de un hombre de 51 años que desapareció la localidad barcelonesa de Gironella cuando salió a pasear con sus perros. Los servicios de emergencia hallaron su cadáver cerca del río Llobregat. Además, se busca a una cuarta en la desembocadura del Ebro: un pescador que salió a faenar el domingo.