El piloto de helicóptero de Kobe Bryant sufrió desorientación espacial antes del accidente

  • El piloto habría violado las normas de vuelo al penetrar en las nubes

  • La trayectoria antes del accidente apunta a una desorientación espacial

  • Se desconoce si el piloto estaba presionado por completar el viaje

El piloto a los mandos del helicóptero de Kobe Bryant cuando se produjo el accidente que acabó con su vida, con la de su hija Gianna, de 13 años, y la de otros seis pasajeros, probablemente se desorientó mientras volaba a través de las nubes, algo para lo que no estaba autorizado. Así lo han anunciado este martes desde la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) en un informe que trata de esclarecer las causas del siniestro.

El piloto, Ara Zobayan, ascendió a 4.000 pies en un giro hacia la izquierda cada vez más cerrado para después descender rápidamente antes de estrellarse contra las colinas de Calabasas, en California. Esta es una maniobra compatible con una "desorientación espacial" con visibilidad limitada, aseguran los responsables de este informe. Zobayan se habría desorientado por una mala lectura de los instrumentos de vuelo, sin embargo la NTSB apunta también que el piloto habría violado las normas de vuelo al entrar en las nubes.

"Cuando un piloto percibe erróneamente la altitud y la aceleración se conoce como ilusión somatográfica y puede causar desorientación espacial", apuntan en el informe. "Cuando se vuela un avión y hay una falta de referencias visuales externas, el oído interno puede darnos una falsa sensación de orientación porque el oído interno no puede distinguir entre aceleraciones e inclinación"; complementaron las autoridades.

Los pilotos pueden confundir la altitud y la velocidad de un avión o un helicóptero cuando no pueden ver el entorno que los rodea. Pero ahora la junta debe investigar el motivo por el cual Zobayan decidió penetrar en las nubes cuando no podía hacerlo. "La junta discutirá si el piloto se enfrentó a presión para completar el vuelo, ¿cuáles eran las instrucciones de la empresa?, ¿se obligó a sí mismo y qué acciones podrían haber tomado para evitar volar hacia las nubes?", afirmaron los responsables de la Junta en rueda de prensa.

La viuda de Bryant, Vanessa, había culpado ya al piloto del accidente, además de a la empresa propietaria del aparato, en el mismo sentido que los familiares del resto de víctimas. Dichas empresarias propietarias habían culpado a los controladores de tráfico aéreo por la tragedia.

Los investigadores del accidente confirmaron que el helicóptero no contaba con un dispositivo conocido como TAWS, un sistema de alerta y detección del terreno que advierte al piloto cuando está demasiado cerca del suelo. Este dispositivo no es obligatorio pero la NTSB ha recomendado que cambie la ley para que sea de instalación obligatoria en todos los helicópteros.