Noemí Salazar explica por qué siempre sale mareada de la ducha: su práctica que los expertos desaconsejan

Noemí Salazar ha preocupado a sus seguidores al revelar una cosa que le sucede siempre que sale de la ducha. La exconcursante de 'Gran Hermano VIP' ha grabado unos stories de Instagram en donde en uno de ellos aparecía la en cama tras contar que había tenido que tumbarse al sufrir un mareo después de salir de la ducha. Lo preocupante es que esto no es algo puntual. La exintegrante de 'Los Gipsy Kings' ha contado que siempre le pasa y ha explicado el curioso motivo.

Lo cierto es que no es coincidencia que esto le haya pasado a Noemí Salazar en este preciso instante. La influencer está atravesando un delicado momento, tal como ella misma ha contado anteriormente. Superada por un bajón anímico, la reciente operación de su madre, algunas preocupaciones en su negocio y el crear contenido constante en sus redes, todo esto le podría haber pasado factura a la influencer.

Pero para el caso de los mareos después de salir de la ducha hay algo más. La exconcursante de 'GH VIP' realiza una práctica habitual que los médicos desaconsejan porque implica riesgos. Noemí Salazar sale casi siempre mareada cuando se mete al remojo porque es incapaz de poner una temperatura equilibrada. "Me pongo el agua a cuarenta grados literal. No aprendo", ha confesado ahora.

Ese cambio tan brusco de temperatura al salir de la ducha es lo que le provoca el mareo. Y no es la única consecuencia que sufre al hacer esto. La exintegrante de 'Los Gipsy Kings' ha confesado también otro problema de salud añadido.

Según los médicos y, en concreto, la Clínica Dermatológica Internacional, esta práctica de ducharse con el agua muy caliente puede resultar dañina para nuestro organismo, especialmente en el cabello y la piel. Ellos marcan unas temperaturas óptimas para no correr riesgos: su recomendación para la piel oscila entre los 28 y 30 grados y para el cabello de 37,7 grados respectivamente.

Aunque se esté en época invernal, los expertos desaconsejan este hábito que tiene Noemí Salazar y que resulta muy común. La práctica de ducharse con el agua muy caliente puede contribuir a la sequedad cutánea, el aumento de picor e incluso la aparición de dermatitis, inflamación e irritación de la piel, lo que a la influencer le pasa en la planta de los pies, tal como ella misma ha contado.

Asimismo, tiene un efecto que favorece la aparición de rojeces faciales, sobre todo en pómulos, nariz y en el cuero cabelludo también tiene consecuencias. Sin embargo, la más grave es una bajada de tensión o mareos por el cambio drástico de temperaturas a la salida, que traiga consigo una caída y esto termine de una manera más grave por este tipo de imprudencias.