La muerte de dos familiares separó a un padre y a una hija: "Nos hemos encerrado cada uno en nuestro mundo"
Cuando María era una niña murieron su tío y su abuelo con apenas unos días de diferencia
Tanto María como su padre, José María se encerraron en su mundo y dejaron de relacionarse
Una madre se rompe tras saber que su hijo biológico no quiere reencontrarse con ella: ''Nunca le abandoné, me lo quitaron''
Esta es la historia de la mala relación entre un padre y una hija, la historia de José María y María, y también de la profunda distancia que se ha abierto entre ambos. María nace hace 19 años en Sevilla y desde pequeña pasa la mayor parte del tiempo con su padre.
La relación entre ellos es muy buena porque, como su madre trabajaba por las tardes, ellos van a todas partes juntos. Aunque la relación es buenísima, María cree que el ojito derecho de su padre no es ella, si no su hermana: “No es que a María la quisiera menos, es que su otra hermana me necesitaba más”.
Poco a poco los celos de María van en aumento y la relación entre ellos se va complicando. Una llamada de su mujer lo cambia todo, han encontrado al cuñado de José María muerto en la cama, algo que la niña recibe con dolor porque estaba muy unido a su tío. Pocos días después desaparece también el abuelo de la niña que, horas más tarde, aparece muerto tras suicidarse.
El comportamiento de María da un giro de 180 grados. Deja de hablar con su familia, en especial con su padre, empieza a comer descontroladamente, se encierra en su habitación y en sí misma. José María, en todos estos años, ha sido incapaz de recuperar el trato con su niña, un trato que se ha ido enfriando hasta el punto de que la niña no quiere pasar tiempo a solas con él.
Ahora, José María viene hasta ‘Hay una cosa que te quiero decir’ para hablar con su hija y para recuperar esa relación que una vez tuvieron y que nunca ha dejado de desear: “Quiero recuperar nuestra relación pero multiplicada por diez, te echo de menos cariño mío”.