Un Mundial, el de 2002, del que todos los españoles recordarán para siempre el 'robo' del árbitro egipcio Al Ghandour a la selección española. Un 21 de junio de 2002 que se convirtió en uno de los días más aciagos en la historia del fútbol español. Ronaldo con ocho goles, dos de ellos en la final ante Alemania, fue el jugador más destacado de todo el torneo.
La primera parte respiró igualdad entre ambos equipos. Brasil no se encontraba cómoda en el terreno de juego pero sin embargo dispuso de las mejores ocasiones. Voeller montó un entramado defensivo casi imposible de penetrar para los de Scolari. Alemania optó por el juego por las bandas y los balones aéreos, Kahn y el larguero evitaron los goles de Brasil.
En la segunda parte, Brasil fue a por el partido y dispuso de las mejores ocasiones. Fue en el minuto 66 cuando Ronaldo Nazario abrió el marcador tras aprovechar un despeje de Kahn tras un potente disparo de Ronaldo. Tras el gol, Alemania aumentó las ocasiones en ataque pero un nuevo mazazo iba a llegar con el segundo tanto de Ronaldo en el minuto 78.
El marcador ya no se volvería a mover. Brasil cumplía los pronósticos y se proclamaba campeona del Mundo por quinta vez en la historia. La magia brasileña se impuso a la rocosidad de la selección alemana gracias a un Ronaldo que se convirtió en el héroe de Brasil.