Las claves del undécimo capítulo de 'El accidente', a análisis

María, a José y Lucía: “Joao lo sabe todo, me va matar y necesito que me ayudéis”

Tras descubrir que Joao sabía todo lo que había hecho con José Espada a sus espaldas y estaba dispuesta a matarla, María huyó de la finca. Sin saber dónde ir y qué hacer, se presentó en casa de José Espada y Lucía para pedirles ayuda. Lucía se negó, pero José sabía que tenía una misión importante que cumplir si quería salvar la vida de su hijo Samuel, secuestrado por Joao. Por eso, encerró a Lucía en la terraza para que no fuera con ellos y, antes de marcharse con María, cogió una pistola que tenía escondida en la casa.

José Espada, dispuesto a matar a María para salvar a su hijo

Lejos del pueblo, José deja el coche y le pide a María que se baje para ir a buscar otro coche. No es cierto, lo que Espada intenta es llevar a la que había sido su amante a un lugar alejado para matarla, tal y como Joao le había ordenado si quería salvar la vida de su hijo Samuel. Solos, con María de rodillas y de espaldas y él apuntándole a la cabeza, José no fue capaz de apretar el gatillo.

María, a José: “Te utilicé para llevar a cabo mi plan, pero luego me enamoré y se jodió todo”

José, al no ser capaz de matar a María, decide ayudarla a escapar de Joao y la lleva hasta una terminal de autobuses para que se marche lejos del pueblo. Antes, ella le confiesa que le había utilizado: “No quiero que te sientas culpable de nada porque tú no tienes la culpa de nada. Todo lo que ha pasado ha sido culpa mía, todo lo malo que nos ha pasado ha sido culpa mía. Antes de conocerte en aquel bar ya te había visto, fui yo la que le dijo a Joao que te contratara, porque eras perfecto para lo que yo quería hacer, porque tú eras la única persona que no temblaba ante mi marido. Tu ambición, todo, eras la única persona que me podía ayudar a salir de la mierda de vida que tengo. Yo te utilicé, pero te juro que me enamoré de ti y ahí se jodió todo”.

El inspector Sánchez cae en la trampa de Joao y no logra interceptar su droga

El inspector Sánchez y Nacho descubrieron que el negocio de Paul Bresson y Joao Ferreira estaba a punto de culminarse, pero gracias a las cámaras que tenían instaladas en casa del cacique portugués descubrieron todos sus pasos... o eso creían. Tras un despliegue total por parte de todos los departamentos de policía implicados en el tema, Ramón se dio cuenta de que todo había sido una trampa para despistarles y la carga con toda la droga estaba muy lejos de sus manos…

Samuel podría morir, pero Joao no le permite a Lucía llevarlo al hospital

Cuando Lucía estaba dispuesta a denunciar ante la policía que Joao tenía secuestrado a su hijo, recibía una llamada de Lula para decirle que Samuel estaba muy malito y necesitaba su medicina. Si no le ponía adrenalina el ataque de Samuel podría ir a más y morir. Pero eso no bastaba, lo más recomendable era ir a un hospital, pero Joao no se lo permitió. Le advirtió que solo saldrían de su casa si José cumplía con su parte del trato, un trato del que Lucía no era consciente y que la enfadó muchísimo más con su aún marido. A la vez, se dio cuenta de que siempre que tenía un problema quien realmente estaba a su lado no era José, si no su hermano Juan.

Juan le confiesa su amor a Lucía: “Estoy enamorado de ti desde el primer día que te vi”

Encerrado en casa de Joao con Samuel enfermo, Juan no pudo aguantar más y le contó a Lucía todo lo que sentía por ella: “Estoy enamorado de ti. Estoy enamorado de ti desde el primer día que te vi en el instituto, llevabas un vestido blanco con un bordado azul con una flor y el pelo suelto. Necesitaba decírtelo. Yo pensaba que se me pasaría, que sería una cosa como de adolescente, pero al contrario, pienso en ti todos los días, hasta sueño contigo a veces, bueno, muchas veces, no lo puedo evitar”.

José, a Joao: “¿Mato a María o no la mato? ¿Qué hago? ¡No te oigo! ¡Dime qué quieres que haga”

José había dejado a María en una terminal del autobús para que se fuera lejos del pueblo pero al saber que Samuel se había puesto enfermo y Joao no dejaba a Lucía y Juan que le llevaran al hospital, dio media vuelta e hizo que María bajara del bus. La llevó a un hostal y desde ahí llamó a Joao para decirle que iba a hacer lo que le había pedido: matarla para poder salvar a su hijo. Con María amordazada y atada a una silla José le demostró a Joao que por su hijo era capaz de todo. El cacique portugués le pidió a Lula que fuera a buscarles y trajera a María de vuelta, viva, pero no fue posible. Cuando llegó se encontró con José ensangrentado y a María en el suelo con un charco de sangre a su alrededor pero… ¿quién la había matado? ¿José? Con Espada detenido por el inspector Sánchez y Nacho y María muerta, Joao liberó por fin a Samuel.

¿Quieres saber qué va a pasar? En este avance tienes pistas sobre lo que sucederá en el próximo capítulo.