El menor que confesó el crimen de Zamora le desfiguró la cara y le rompió el cráneo a su víctima

Leticia Rosino, de 32 años, fue sorprendida por su agresor cuando paseaba como cada tarde. El adolescente, internado desde ayer en un centro de menores de Zambrana, Zamora, la abordó y comenzó a golpearla con piedras en la cabeza, Ella intentó huir por dos veces. A la tercera. el asesino confeso acabó con su vida.

La Fiscalía de Menores considera que actuó con alevosía y ensañamiento. El juez le acusa de asesinato porque planeó la muerte de la joven y se ensañó con ella. Presuntamente, le desfiguró la cara y le rompió el cráneo.

La autopsia tendrá que decir también si la violó o si al menos lo intentó. Él lo niega, pero la ropa interior de la víctima apareció tirada junto al cuerpo.

El menor inicialmente acusó a su padre del crimen. Un pastor de Castrogonzalo, un pueblo de 500 habitantes, que quedó en libertad sin cargos, después de que su hijo comenzara a caer en una contradicción tras otra.