Cerrada al público la playa de Borácay por culpa del turismo masivo
Informativos Telecinco
22/04/201818:47 h.Se avecina tormenta en algunas playas de Filipinas. Cientos de policías han sido destinados a Boracay, principal destino turístico del país para consumar el cierre decretado hace tres semanas por el presidente filipino. Rodrigo Duterte asegura que el lugar se ha convertido en un fosa séptica, así que desde el jueves y durante seis meses nadie podrá poner ni un pie en la arena. En ese tiempo se construirá un sistema de tratamiento de aguas residuales y se derribarán hoteles ilegales para minimizar el impacto medioambiental que había puesto a Boracay al límite.
Con la desaparición de los miles de turistas que atiborran la playa, en el sector temen que se esfumen a su vez 17.000 empleos. Filipinas siguen así el ejemplo de Taiandia, cuyas autoridades han cerrado durante seis meses la playa de Di Caprio, Maya, en la sislas Phi Phi. El lugar, en su día un paraíso escondido, sufría diariamente tsunamis humanos, más dañinos si cabe que el de 2004.
Visto la degradación medioambiental en las playas de Bali, en Indonesia, grupos ecologistas piden al gobierno de este país que tome nota. Pero aquí el reto es mayor si cabe: el maremoto es de plástico.