El conglomerado calefactor no pudo resistir las bajas temperaturas (- 170 grados Celsius) que se concentraban en la luna tras la puesta de Sol. Un contratiempo con el que no contaban el grupo de científicos y que apagó la actividad de la planta algodonosa de manera definitiva.
El calefactor mantenía la semilla caliente, pero se apagó después de que el módulo de aterrizaje Chang'e-4 se suspendiera para ahorrar energía. Al parecer, el 13 de enero la carga fue debilitándose y "Durante las 212,75 horas desde el encendido hasta el apagado, funcionó bien. Algunos de los resultados superaron nuestras expectativas", explicó Xie Gengxin, el diseñador y decano de este experimento en el Instituto de Tecnología Avanzada de la Universidad de Chongqing, responsable del experimento.
Por su parte, el equipo quiso aclarar que el experimento era fundamentalmente "de carácter divulgativo" ha aclarado Liu Hanlong, líder del experimento y jefe adjunto de la Universidad de Chongqing. La idea de una carga útil biológica se seleccionó a partir de 257 sugerencias recopiladas de estudiantes de secundaria y universitarios en 2016.
Contenido para crear una minibiosfera simple
¿Qué contenía la sonda Chang'e-4? Poseía semillas de algodón, colza, patata y arabidopsis, así como huevos de mosca de la fruta y algunas levaduras, para formar una minibiosfera simple. De esta forma, se generaba la cantidad de oxígeno óptima que necesitaban los seres vivos que lo requiriesen. Por su lado, la drosophila melanogasters, como consumidores, y la levadura, como descomponedores, proporcionarían el dióxido de carbono suficiente para la fotosíntesis de las plantas. Así, mediante productores, consumidores y descomponedores se creaba la mini biofera esperada.
Te interesa: