Carlos Franganillo entrevista a Raphael tras su linfoma cerebral: "Al mes, el médico me dijo que fuera ensayando"
Carlos Franganillo entrevista en Informativos Telecinco al artista jiennense, que asegura que morirá en los escenarios porque es su "forma de ser feliz"
Raphael regresa a lo grande tras superar un linfoma cerebral: más de 10 minutos de aplausos y dos horas de concierto a sus 82 años
Hay vidas que están hechas para el aplauso y para resistir. Raphael, leyenda de la música en español, vuelve a vencer al destino con ganas de seguir conquistando escenarios. La enfermedad que ha sufrido apenas le ha parado unos meses. El presentador de Informativos Telecinco, Carlos Franganillo le ha entrevistado en su casa, donde ha hablado sobre estos meses de parón y su amor por el escenario y la música.
Con un rotundo "no", Raphael lo tiene claro. "No soy un nostálgico y creo que para mí es bueno. No soy una persona que quede contento a la primera de cambio", confiesa. "Creo que en cada época de mi vida he ido haciendo lo mejor que he sabido hacer. También yo soy una persona que todo lo aprendo yo, que yo no tengo un maestro por ahí que me vaya enseñando", cuenta.
El linfoma cerebral que sufrió hace seis meses no le ha impedido su vuelta a los escenarios. "Afortunadamente me sacaron adelante de una manera rápida. Me acuerdo que cuando vinieron a explicarme lo que me ocurría yo ya estaba puesto en la carretera. Le dije a los médicos 'lo que vaya a hacer, hágalo ya'".
"Esta vez no he llorado ni una sola vez"
En comparación al trasplante de hígado que sufrió en 2003, Raphael asegura que este linfoma ha sido "mucho más engañoso porque no llegué a perder el juicio". "Yo seguía entrándome de lo que pasaba, pero no entendía. No les podía ayudar y eso me dejaba con la mosca detrás de la oreja".
Raphael recuerda uno de los mejores momentos durante su tratamiento. "Al final del primer mes, uno de los médicos que estaba me preguntó si ensayaba mucho. Le dije que no, que soy más del último momento. Me dijo: 'pues vete ensayando', diciendo que ya me quedaba poco". Raphael reconoce haber vivido estos meses con mucha ilusión. "Esta vez no he llorado ni una sola vez porque lo vi tan claro en las palabras de los médicos", asegura.
"Sigo aprendiendo constantemente"
También reconoce ser un constante aprendiz, también en estos meses. "Yo sigo aprendiendo constantemente y eso es bueno para mí", reconoce. El escenario para él es "felicidad" y reconoce haberse llegado a creer "dueño de los escenarios".
La familia es un pilar fundamental para Raphael. "Es muy importante para mí. Es bueno que haya conseguido tener una familia en la que yo me vuelco siempre que puedo", admite. Raphael tiene claro que no piensa en retirarse. "Yo soy carne de escena y yo moriré en el escenario. Es la forma que tengo de ser feliz", concluye.