Las 10 películas favoritas de Stephen King: ninguna de los últimos 30 años

El escritor comparte la lista de las diez películas que más admira, excluyendo adaptaciones basadas en sus propias obras
Stephen King recomienda: las series favoritas del maestro del terror entre las que se encuentra una española
El escritor Stephen King es bien conocido por su obra literaria, con numerosas adaptaciones al mundo del cine. Además también es un cinéfilo en toda regla, y la mejor demostración de ello acaba de llegarnos, al compartir lista de las diez películas que más admira, en la que obviamente excluya adaptaciones basadas en sus propias obras. La lista, publicada en su cuenta oficial de X, recoge clásicos absolutos, además de joyas que ofrecen pistas sobre su sensibilidad como narrador. Repasamos cada película de su lista para que puedas ponerte al día con las recomendaciones del escritor.
Carga maldita (1977)
Dirigida por William Friedkin, esta película es una adaptación de la novela "El salario del miedo". Narra la historia de cuatro hombres desesperados que deben transportar camiones cargados con explosivos por caminos selváticos imposibles. Roy Scheider lidera un reparto multinacional. El rodaje fue caótico y Friedkin contrató a verdaderos exiliados para aumentar la tensión realista. Aunque fracasó en taquilla al coincidir con el estreno de Star Wars, hoy es una obra de culto. Su banda sonora electrónica a cargo de Tangerine Dream marcó un antes y un después en la atmósfera del cine de suspense.
El Padrino II parte II (1974)

La segunda parte de la saga Corleone, dirigida por Francis Ford Coppola, alterna el ascenso criminal de Michael, interpretado por Al Pacino, con los orígenes de Vito, encarnado por Robert De Niro. Ganadora de seis premios Oscar, incluyendo Mejor Película y Mejor Director. Es una de las pocas secuelas que superan al original según la crítica. Curiosamente, De Niro tuvo que aprender siciliano para su papel y compartió muy pocas escenas con el resto del elenco. Su influencia llega hasta series actuales como The Sopranos.
La huida (1972)

Thriller de Sam Peckinpah, basado en una novela de Jim Thompson. Steve McQueen interpreta a un atracador que, tras ser traicionado, huye con su esposa (Ali MacGraw) hacia México. Fue un éxito comercial y consolidó el romance real entre los actores protagonistas. El guion original de Thompson fue modificado por Walter Hill para hacerlo más directo. Las escenas de persecución y tiroteo influyeron en el cine de acción de los 80. McQueen exigía hacer sus propias escenas de riesgo, lo que provocó tensiones con el director.
Atrapado en el tiempo (1993)

Esta comedia metafísica de Harold Ramis con Bill Murray como protagonista repite el día de la marmota en bucle. Detrás del humor, plantea dilemas existenciales sobre el cambio personal. Ganó el BAFTA a Mejor Guion y fue incluida en el Registro Nacional de Películas de EE.UU. Como curiosidad, su rodaje deterioró tanto la amistad entre Murray y Ramis, que no se reconciliaron hasta poco antes de la muerte del director. Muchos expertos la ven como una película zen disfrazada de comedia.
Casablanca (1942)

Michael Curtiz dirigió este clásico del cine romántico ambientado en la II Guerra Mundial. Humphrey Bogart e Ingrid Bergman protagonizan una historia de amores imposibles y lealtades rotas. Ganadora de tres Oscar, su guion se reescribía día a día durante el rodaje. La línea "Here's looking at you, kid" fue improvisada por Bogart. Su mezcla de drama, intriga y romance la mantiene entre las películas más queridas de la historia.
El tesoro de Sierra Madre (1948)

Una aventura moralizante sobre la codicia humana, dirigida por John Huston. Tres buscadores de oro (uno de ellos interpretado por Humphrey Bogart) caen en la paranoia y la traición. Walter Huston, padre del director, ganó el Oscar a Mejor Actor de Reparto. Fue la primera película de Hollywood rodada en localizaciones reales en México. El famoso "We don’t need no stinking badges!" fue parodiado hasta la saciedad en la cultura pop.
Tiburón (1975)

Steven Spielberg revolucionó el cine comercial con esta historia sobre un tiburón asesino. Protagonizada por Roy Scheider, Richard Dreyfuss y Robert Shaw. Tres Oscars y un trauma para toda una generación de bañistas. El tiburón mecánico falló tanto que Spielberg decidió ocultarlo hasta el clímax, aumentando la tensión. Fue la primera película en superar los 100 millones en EE.UU. y creó el concepto de "blockbuster veraniego".
Malas calles (1973)

Primer film de Martin Scorsese, ambientado en la Pequeña Italia de Nueva York. Harvey Keitel y Robert De Niro interpretan a amigos atrapados entre el crimen y la fe. Su uso de la música rock fue revolucionario. El plano subjetivo con De Niro en un bar borracho se considera uno de los más influyentes del cine moderno. Ganó el premio de la Crítica de Nueva York al Mejor Director Novel.
Encuentros en la tercera fase (1977)

Otra obra de Spielberg, donde el contacto con vida extraterrestre se representa como una revelación casi religiosa. Richard Dreyfuss protagoniza este viaje interior y visual. Nominada a ocho Oscars y ganadora del de Fotografía. La secuencia final con la nave nodriza fue pionera en efectos especiales. El característico sonido de cinco notas fue compuesto por John Williams para crear un "lenguaje musical universal".
Perdición (1944)

Dirigida por Billy Wilder, esta obra maestra del cine negro narra un asesinato pactado entre un vendedor de seguros y una mujer fatal. Fred MacMurray y Barbara Stanwyck destilan tensión sexual e intriga moral. Aunque no ganó ninguno de los siete Oscars a los que fue nominada, su influencia es incuestionable. Su estructura narrativa, con voz en off retrospectiva, fue imitadísima. El título en inglés (Double indemnity) hace referencia a una cláusula real de seguros que dobla la indemnización en caso de accidente mortal.
Stephen King ha demostrado tener un gusto de lo más variopinto, pero con un hilo común: personajes enfrentados a dilemas límites, ya sea por la codicia, la redención o lo sobrenatural. Su lista de películas favoritas revela mucho más que admiración cinéfila; revela también sus obsesiones narrativas.

