Entrevistas

Jacobo Bergareche, autor de 'Los días perfectos': "Hemos perdido la tolerancia al tedio"

Jacobo Bergareche: "Hemos perdido la tolerancia al tedio"
Hablamos con el autor de 'Los días perfectos', el libro que puso en jaque muchos matrimonios. Uppers
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Cuenta Jacobo Bergareche que cuando publicó ‘Los días perfectos’ (Libros del Asteroide, 2021) empezó a recibir cantidades de mensajes en plan correo sentimental, en los que los lectores le pedían consejos o le contaban que gracias a su libro habían terminado con sus matrimonios. El autor se sintió un poco abrumado por esos mensajes porque no esperaba tal repercusión, aunque de alguna forma sabe que lo hizo con dolo.

La novela, que acaba de ser llevada a escena en el Teatro de La Latina en Madrid con Leonardo Sbaraglia como protagonista, abre la caja de Pandora de las relaciones de parejas que llevan juntas más de una década. El protagonista, un periodista que ha viajado a un congreso en Austin, Texas, y desde la distancia de ultramar con su familia y su mujer consigue ponerle palabras a todo lo que siente que está roto en su relación, dice textualmente: “Habría que cambiar eso de ‘hasta que la muerte nos separe’ por ‘hasta que el tedio nos separe’. La muerte, al contrario, une. Es el tedio el que nos separa”.

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Cuando Sbaraglia suelta esta frase en el teatro, se desencadenan las risas. Nadie no está de acuerdo con esa definición. La obra se constituye como un monólogo, en el que vemos al periodista, Luis, contando todo lo que está escribiendo en una carta que le mandará a su mujer antes de volver a casa. Hay risas. Pero luego, cuando dice crudamente “me aburrís, Paula, me aburro, me aburro, me aburro”, ya no es gracioso. Es triste. ¿Se puede volver del tedio? ¿Qué tiene el tedio que nos repele tanto?

“Hemos perdido tolerancia al tedio en los últimos 100 años de la historia”, reflexiona Bergareche en esta entrevista con Uppers. “Y desde los últimos 50 o 30 años, la gente necesita estímulos constantemente, y aburrirse parece un gran drama. Además, todo el mundo te está engañando diciéndote que lo está pasando fenomenal en sus redes sociales, entonces parece que todo el mundo está haciendo algo interesantísimo y que nadie se aburre, y tu frustración hacia el tedio es cada vez mayor. La vida parece una estafa porque hay una fiesta y tú no estás en ella”.

Cómo es un día perfecto para Leonardo Sbaraglia
Cómo es un día perfecto para Leonardo Sbaraglia

En su libro, se zambulle en todas las referencias posibles de autores y artistas que hayan explorado ese sentimiento de nostalgia por lo que fuimos en una relación. El disparador es Faulkner: Bergareche es miembro del Consejo Asesor del Harry Ransom Center, un archivo que guarda manuscritos de todo tipo de autores de todo el mundo, un verdadero tesoro para el estudio de las humanidades. Allí, encontró la correspondencia que Faulkner mantuvo con su amante, Meta Carpenter, durante 15 años. Y en esas cartas se registra paso a paso cómo la pasión se va convirtiendo en rutina y se desvanece, incluso tratándose de una amante, a la que ya había acudido para reavivar la llama perdida con su mujer.

En ese sentido, otra referencia cultural: Neil Young y la frase de su canción ‘Hey, hey, my, my’ tristemente célebre por haber sido usada por Kurt Cobain en su carta de suicidio: “It’s better to burn out than to fade away” (“Es mejor arder que desvanecerse”). El propio Neil Young aclaró en su momento que con esa frase hablaba del rock, no de la vida: “La vida tiene familia, niños, relaciones, naturaleza, belleza. Para el rock and roll, explotar no está mal. Pero hay mucho más en la vida que el rock”, dijo en una entrevista.

La novela y la obra de teatro -adaptada por el director argentino Daniel Veronese- buscan en la deriva del pensamiento de Luis una solución para este punto de inflexión de un matrimonio en el que o se “recupera la chispa”, “the thrill” (en alusión a la canción ‘The thrill is gone’ de B. B. King), “arder”, o dejamos que el amor se desvanezca. El protagonista empieza a rescatar los momentos buenos como “un repertorio para el estándar de jazz que sea la banda sonora de sus vidas”. Enumera los “días perfectos” que vivió con su mujer, le pide en la carta recuperarlos.

-¿Por qué es tan difícil asumir que el matrimonio implica rutina, aburrimiento y tedio?

-Se nos ha enseñado que el amor es para toda la vida, pero también que el verdadero amor es esa fase pasional. La literatura romántica, lo que exalta, es esa fase pasional, y no cuenta la parte aburrida, lo que pasa cuando el amor se asienta y ya no todo es aventura. Uno se ve a la hora de cenar, cambia pañales, hace un montón de cosas aburridas que ya no forman parte de la literatura, de lo que nos contaron que era el amor.

-En la novela, Luis menciona la película ‘Perfect Days’, que glorifica justamente la rutina, ¿qué aprendizajes tomas de esa idea?

-Yo vivo muy fuera de la rutina, desgraciadamente. En la peli ‘Perfect days’ hay un personaje que ha ritualizado la rutina, y ama todo lo que hace porque lo ritualiza y lo vive con asombro, creo que el secreto está por ahí y no en la gente que mira con hartazgo la vida porque espera todos los días grandes experiencias.

-Y tú, ¿vives en el presente o eres nostálgico?

-Trato de vivir en el presente. Lo intento. Es difícil, todo el tiempo uno está anticipándose, fantaseando, pero lo intento.

Una producción hispano-argentina: "Producir en Buenos Aires es caro"

Daniel Veronese y Julieta Novarro, director y productora de 'Los días perfectos', hablan sobre la situación de la cultura en Argentina
Daniel Veronese y Julieta Novarro, director y productora de 'Los días perfectos', hablan sobre la situación de la cultura en Argentina

La idea de llevar al teatro el libro de Bergareche, nació de una productora argentina: Julieta Novarro. Comenzó a trabajar con Daniel Veronese para pensar la adaptación al teatro y aunque al principio no estaba claro dónde y cuándo podrían estrenarla, la opción más plausible fue traerla a Madrid. Una decisión curiosa, a priori, si se tiene en cuenta que el protagonista, el director y la ideóloga eran argentinos.

"Producir en Argentina es caro", explicó Julieta Novarro en esta charla. La actriz y empresaria se asoció entonces con su colega española Mónica Regueiro, con quien Veronese ya había trabajado en España, para organizar el estreno en Madrid. Todos ellos denunciaron el desfinanciamiento que vive la cultura en Argentina y cómo eso afecta a la oferta que puede encontrarse en Buenos Aires, una ciudad conocida en el mundo entero por la calidad de sus propuestas teatrales.

"En el teatro comercial hay producción. Pero es un grupo muy limitado de gente el que puede pagar una entrada cara", comentó Veronese, director de larga trayectoria. "El país es un país creativo y la gente está respondiendo. Pero es una canallada lo que están haciendo", lamentó.

"Hoy por hoy el teatro es el lugar donde el actor puede mostrarse porque no hay ficción, tenemos que pensar que la única ficción que hay es a través de las plataformas de streaming, si es que producen en Argentina, pero es caro", dijo Novarro.

Para Sbaraglia, "el mundo de la cultura está siendo atacado de manera falaz". "Se habla como si fuera un gasto, y el teatro en Argentina siempre ha sido auto sustentado. Se ha construido un relato que parecería que eso es una amenaza a la economía de todos los argentinos, así como si la educación, la ciencia y los jubilados fuesen una amenaza para el crecimiento económico del país y desde mi punto de vista eso es una falacia".