La ausencia de Gisele Bundchen, que tradicionalmente desfila para Colcci, ha supuesto un duro golpe para la semana de la moda brasileña.
La diseñadora Marcela Virzi ha sido la encargada de inaugurar la pasarela con unos diseños llenos de tejidos ligeros y transparencias.
Por su parte, la marca Santa Ephigenia presentó su última colección con un desfile romántico inspirado en una tarde de Picnic en París.
Bajo el lema "repensar, reciclar, renovar", la semana de la moda brasileña pretende poner énfasis sobre la responsabilidad ambiental. Los desfiles y las diferentes actividades que serán organizadas hasta el próximo viernes pretenderán hacer reflexionar sobre qué hacer con la gran cantidad de basura que el mundo produce hoy en día.
Además de los tradicionales desfiles, la Fashion Río, como se conoce a este evento en el que se dan cita 57 marcas, contará con actividades paralelas como exposiciones y una bolsa del mercado de la moda que espera facturar 435 millones de reales (unos 266 millones de dólares). BQM