La historia de Quique y María, tenistas en silla de ruedas tras sufrir un accidente y un tumor: "No ha sido fácil, pero la vida es demasiado bonita"

María y Quique participan en un torneo en Madrid de tenis en silla de ruedas. Informativos Telecinco
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Madrid es estos días la capital mundial del tenis en silla de ruedas. Un gran torneo -organizado por la Fundación Emilio Sánchez Vicario- en el que estamos representados por cinco españoles campeones de la superación tras haber vivido situaciones de vida muy complicadas Informan D. Jiménez y E. Payán en el vídeo.

Con cada golpe María y Quique demuestran su carácter, dos deportistas de élite que disputarán el 13º torneo internacional que organiza la Fundación Emilio Sánchez Vicario. "No ha sido fácil, pero yo creo que la vida no es fácil", dice Quique. Para él, nada fácil fue sobreponerse tras un accidente de coche, en el que "la rueda se reventó" y que le causó una lesión medular.

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María "de un día para otro no podía mover nada del pecho para abajo" y tuvieron que extirparle un tumor junto a la médula. "En ese momento, me planteé que si podía hacer deporte, iba a ser muy feliz", declara la deportista. Le ha costado años volver a caminar, pero le ha quedado una discapacidad que requiere de la silla para experimentar esta forma de plenitud. Aunque para algunos supondría un problema en su día a día, María se encuentra "muy a gusto, disfruto".

La tecnología de las sillas de ruedas

Cada silla tiene un antivuelco fundamental sobre todo para el saque. La inclinación de las ruedas va en función de la longitud del brazo de cada deportista y durante el juego deben estar en todo momento en movimiento. "Además de movimiento, solemos estar todo el rato con giro interno o giro externo" para que la inercia permita llegar a bolas que parecen imposibles.

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Quique ha sido tres veces subcampeón del mundo y olímpico en dos ocasiones. María está peleando hitos en sus palmares, pero ambos coinciden en haber encontrado en el tenis una buena manera de enfrentar la vida.

"He descubierto mi deporte, he descubierto mi pasión", dice Quique. "La vida es demasiado bonita como para mi familia, amigo y yo mismo no vivirla al máximo". A pesar del infortunio que un día les golpeó, María cree "que es el camino un poquito, ese crecimiento personal y de ver la vida en su esencia".