El "Infanta Cristina", que se integró a principios de agosto en la operación "Atalanta", se encuentra ya de tránsito de vuelta a su base en Cartagena, después de hacer una breve escala logística en Yibuti, donde recibió la visita del contraalmirante francés Philippe Coindreau, comandante de la Agrupación Naval de la Fuerza Europea.
En su última patrulla, los efectivos españoles asistieron a unos pescadores yemeníes que se encontraban a la deriva en el corredor del Golfo de Adén.
Según se relata en su página web, al aproximarse a la embarcación y comprobar que no había indicios de actividades relacionadas con la piratería y que tenían problemas mecánicos en el motor, se les entregó comida, unas garrafas de aceite para el motor y herramientas para reparar la avería.
Por otra parte, la tripulación del patrullero ha recibido muchas felicitaciones con motivo del 30 "cumpleaños naval" del buque, entre ellas la de su madrina, la infanta Cristina.
La decisión de enviar este patrullero a la operación "Atalanta" respondió al acuerdo de ampliar las funciones de la misión europea, como el control de los puertos y bases desde las que operan los piratas y la neutralización de los barcos nodriza, haciéndolo coincidir con la finalización del monzón de verano.
Cuenta con una dotación de 85 militares, a los que se suma un equipo operativo de Infantería de Marina compuesto por siete efectivos cuya misión es proporcionar seguridad al barco y un intérprete.